⏳ La actualización continúa aquí: El mapa de la guerra en Ucrania
Jueves 1 de diciembre, día 281 de la guerra: seis meses de encarnizada lucha por el control de Bajmut
La batalla por la ciudad de Bajmut, en la provincia de Donetsk, al este de Ucrania, se ha convertido en uno de los principales frentes de la guerra. La lucha por el control de esta localidad -actualmente bajo control ucraniano- suma ya seis meses de encarnizados combates. De hecho, Bajmut ha sido apodada como la "picadora de carne" por la brutal guerra de trincheras, duelos de artillería y ataques frontales entre los dos ejércitos desde el pasado mes de mayo, según AFP.
En lo últimos días, Rusia ha logrado algunas ganancias al sur y noreste de esta ciudad, que antes de la invasión contaba con 70.000 habitantes y era conocida por sus viñedos y minas de sal. El Instituto para el Estudio de la Guerra, sin embargo, ha insistido en sus últimos informes en que estos avances rusos no suponen el "cerco inminente" de Bajmut.
De hecho, el think tank estadounidense cree que la batalla por Bajmut -que están librando del lado ruso los mercenarios del Grupo Wagner y las tropas prorrusas de Lugansk y Donetsk- es un nuevo ejemplo de cómo Moscú asume un alto coste humano y de material en objetivos que en el caso de lograrse tienen una "importancia estratégica limitada".
Desde mayo, explica en su informe de este jueves, las fuerzas rusas han empleado fuerza de combate en pequeños asentamientos alrededor de Bajmut avanzando solo "unos pocos kilómetros" en seis meses. El ISW señala que este "patrón" de operaciones se parece mucho a los esfuerzos que tuvo que hacer Moscú para hacerse con el control de Lysychansk y Severodonetsk, en la vecina región de Lugansk.
Bajmut es una ciudad estratégica porque su control supondría abrir la puerta hacia un hipotético avance hacia Sloviansk y Kramatorsk. Sin embargo, los costes los "seis meses de combate brutal, agotador y basado en el desgaste alrededor de Bajmut superan con creces cualquier ventaja operativa" de tomar la ciudad. Al contrario, los esfuerzos en este punto "están consumiendo una proporción significativa de el poder de combate disponible de Rusia, lo que potencialmente facilita las continuas contraofensivas ucranianas en otros lugares".
Por su parte, la inteligencia británica señala en su informe diario que el éxito de la estrategia rusa de atacar la red eléctrica ucraniana para desmoralizar a la población "es probablemente menor" del que hubiera tenido de haberse usado al inicio de la guerra tras los nueve meses de movilización "con éxito" de Ucrania.
Viernes 3 de diciembre, día 282 de la guerra: Rusia reposiciona tropas y "probablemente" logística en Jersón
El ejército ruso sigue construyendo defensas y fortificaciones en la región de Jersón, donde está llevando a cabo un reposicionamiento de sus tropas, aunque "no está claro" cómo está haciendo esto último "exactamente" porque hay informes contradictorios sobre sus posiciones actuales, según señala este viernes el Instituto para el Estudio de la Guerra (ISW).
La contraofensiva ucraniana en el sur del país que permitió recuperar la orilla occidental del Dniéper y liberar la ciudad de Jersón ha provisto, además, a Kiev de "oportunidades adicionales" para atacar los nodos logísticos y las líneas de comunicación terrestre (carreteras y ferrocarril) que estaban usando los rusos en el sur de Ucrania, según el Ministerio de Defensa de Reino Unido.
Es "probable" -añade Londres- que esta circunstancia esté obligando a Moscú a "reubicar" sus nodos logísticos más al sur y este de Jersón para eludir la artillería ucraniana, lo que supondrá un esfuerzo adicional para abastecer a las tropas que aún continúan en primera línea del frente. "La escasez de municiones -exarcerbado por estos desafíos logísticos- es probablemente uno de los principales factores que actualmente están limitando el potencial de Rusia para reiniciar operaciones terrestres ofensivas efectivas a gran escala", subraya la inteligencia británica.
El Instituto para el Estudio de la Guerra refiere en su informe diario que Rusia está también moviendo tropas en la región de Zaporiyia. Se estarían retirando de las posiciones más cercanas a la línea del frente. Esto sugeriría que "no pueden defender áreas críticas en medio de los crecientes ataques ucranianos" contra su personal y logística en la zona, aunque es "igualmente probable" que estén "reorientando" su agrupación en la zona y puedan trasladar a otro personal a estos asentamientos. De hecho, Rusia mantiene en Crimea reservas para apoyar las operaciones defensivas en Zaporiyia y Jersón.
En el este, prosigue la batalla por Bajmut con "avances marginales" rusos hacia esta ciudad, escenario de una encarnizada lucha desde hace ya más de seis meses. Imágenes geolocalizadas muestran a tropas ucranianas retirándose "supuestamente" de posiciones en el lado occidental de una carretera que a traviesa Opytne, a tan solo 4 kilómetros al sur de Bajmut, apunta el ISW. Este think tank estadounidense cita una información en vídeo de un corresponsal de la CNN en la zona donde comandantes ucranianos reconocen que sus fuerzas son superadas en número por las rusas y que se están enfrentando a serios problemas de suministro.
En el noreste de Ucrania, Rusia sigue intentando frenar el avance ucraniano hacia Svatove y Kreminna, en la región de Lugansk.
Sábado 3 de diciembre, día 283 de la guerra: Rusia aumenta la presión sobre Bajmut y Ucrania se acerca a Kreminna
Este sábado continúa la presión rusa sobre la ciudad de Bajmut, a la que Moscú pretende "rodear con avances tácticos en el norte y sur", según ha afirmado el Ministerio de Defensa de Reino Unido. La conquista de esa localidad, uno de los objetivos prioritarios del Kremlin desde agosto, posibilitaría el avance ruso sobre otras ciudades importantes en el frente este como Kramatorsk y Sloviansk, ha añadido en su informe diario sobre la guerra.
Las fuerzas ucranianas, por su parte, habrían logrado avances localizados al suroeste y noroeste de Kreminna, ha informado el Instituto para el Estudio de la Guerra (ISW), situándo al ejército de Kiev cerca de la ciudad. El clima invernal podría ser un componente importante para su avance de la batalla, pues el suelo helado ofrecería mejores condiciones para las maniobras de guerra, ha agregado este think tank estadounidense.
En cuanto al frente sur, las tropas ucranianas han tomado la iniciativa y han forzado a los rusos a retirarse de varias localidades cerca de Zaporiya. Allí, los funcionarios de Moscú estarían estableciendo condiciones para negociar la desmilitarización de la planta de energía nuclear, un acuerdo que, según opina el ISW, Rusia probablemente acabaría por incumplir y no eliminaría ni disminuiría la amenaza actual para la central.
La vía diplomática también se mantiene congelada y las posiciones para una posible negociación de la paz están aún alejadas, debido a las líneas rojas establecidas por ambos ambos. Estados Unidos pide la retirada total de las tropas rusas de Ucrania, mientras que el Kremlin dice que no se sentará a la mesa hasta que se reconozcan los territorios anexionados por Rusia en septiembre: Donetsk, Lugansk, Jersón - recientemente recuperada por Ucrania- y Zaporiyia. A esto se une un nuevo acuerdo en la Unión Europea y entre los países del G7 para limitar en 60 dólares el precio del barril por el petróleo ruso.
Domingo 4 de diciembre, día 284 de la guerra: tropas ucranianas cruzan el río Dniéper en botes frente a la ciudad de Jersón
Las fuerzas ucranianas han conseguido este fin de semana dar un pequeño paso más en la conquista de los alrededores de la ciudad de Jersón, atravesando el río Dniéper y llegando hasta la orilla este, donde se replegaron los rusos tras su retirada.
Así lo ha informado el Instituto del Estudio de la Guerra (ISW) de Washington, citando imágenes e informes ucranianos que revelarían cómo militares de Kiev han cruzado en botes hasta "una estructura de madera similar a un puerto deportivo" y han levantado una bandera ucraniana en esa zona, lo que podría suponer "un trampolín - han afirmado- para las operaciones ucranianas posteriores en la orilla este". En los próximos días, se podrá ver el éxito real de la incursión, pues en ese área Moscú ha construido fortificaciones por lo que podría estar preparando acciones ofensivas.
En otros frentes, las tropas rusas han continuado sus ataques en la región de Donetsk, con apenas progresos por la encarnizada resistencia que presentan las fuerzas ucranianas. La ciudad de Bajmut sigue estando en el punto de mira del ejército ruso, ya los progresos en la zona permitirían avanzar hacia Kramatorsk y Slovianks, las principales plazas fuertes de Ejército ucraniano en la región Donetsk.
En cuanto al apoyo de la ciudadanía rusa a la 'operación militar especial', según el Ministerio de Defensa de Reino Unido, encuestas recientes sugieren que "está cayendo significativamente". "Los datos indicaron que el 55 % de los rusos están a favor de las conversaciones de paz con Ucrania, y solo el 25 % afirma apoyar la continuación del conflicto", ha escrito en su informe diario sobre la guerra. "En abril de 2022, - ha continuado - alrededor del 80 % de los rusos afirmaron apoyar la operación".
En la batalla económica, el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha criticado por insuficiente el límite al precio del petróleo ruso a 60 dólares el barril pactado por sus aliados occidentales y pide que se reduzca a la mitad. Un alto funcionario ruso, por su parte, ha asegurado que cortará el suministro de petróleo a Europa este año tras el tope de la UE.
Lunes 5 de diciembre, día 285 de la guerra: Ucrania pretende mantener sus operaciones ofensivas en invierno para evitar que Rusia recupere la iniciativa
Ucrania busca aprovechar las ventajas que ofrece el invierno para la guerra mecanizada aprovechando que el suelo se hiela para intentar mantener la iniciativa en al campo de batalla y evitar que Rusia pueda recuperarla, según destaca el Instituto para el Estudio de la Guerra (ISW) en su informe diario. Moscú la mantuvo hasta agosto, pero la perdió con la contraofensiva relámpago que Ucrania lanzó un mes después para recuperar prácticamente toda la región de Járkov en unos días. En octubre, Kiev comenzó a recuperar terreno en Jersón y el pasado 11 de noviembre retomó el control de la capital del mismo nombre de esta región.
"La capacidad de Ucrania de mantener la iniciativa militar y continuar con el impulso de sus éxitos operativos actuales depende de que continúe realizando operaciones sucesivas a lo largo del invierno. (...) Es probable que las condiciones climáticas del invierno de 2023 marquen el periodo de tiempo en el que Ucrania pueda mantener una guerra de maniobras", señala el think tank estadounidense.
El ISW vuelve a insistir -como ha hecho en informes pasados- en que "el invierno suele ser la mejor temporada para la guerra mecanizada en Ucrania, mientras que la primavera es la temporada de pesadilla para luchar en Ucrania" porque el deshielo convierte los campos en "mares de lodo". "Es probable que las fuerzas ucranianas se estén preparando para aprovechar el terreno congelado para moverse más fácilmente de lo que podrían hacerlo en los fangosos meses de otoño".
El instituto, de hecho, advierte de que si los aliados y socios de Ucrania no apoyan a Kiev para llevar a cabo contraofensivas "decisivas" a gran escala este invierno como parecen sugerir las declaraciones de representantes de la inteligencia de Estados Unidos al afirmar que durante el invierno se reducirá el ritmo de la guerra se otorgará a las "destrozadas fuerzas rusas una valosia tregua de tres o cuatro meses" para reconstruirse y luchar en mejores condiciones.
Sobre el terreno, prosigue la encarnizada batalla por Bajmujt, en la región de Donestk, en el este de Ucrania. Hay intensos combates en el asentamiento de Opytne, en el sur. Una localidad "crucial" para avanzar hacia el objetivo principal. En el este, Rusia mantiene también ataques terrestres en el área de Avdiivka-Donetsk. En el noroeste, Ucrania sigue intentando avanzar hacia Svatove y Kreminna, en la región de Lugansk.
La inteligencia británica, por su parte, señala este lunes que Rusia ha reducido el uso de sus aviones de combate "significativamente" al pasar de hasta 300 salidas diarias en marzo a decenas.
La empresa de satélites Maxar Technologies difundió el pasado viernes varias imágenes de la ciudad portuaria de Mariúpol, en la región de Donetsk, entre ellas, dos del cementerio de Starokrymske, el más importante de la ciudad, donde puede apreciarse el aumento de los enterramientos.
Martes 6 de diciembre, día 286 de la guerra: los ataques a aeródromos rusos demostrarían la capacidad de Ucrania para atacar lejos de sus fronteras
Las fuerzas ucranianas "probablemente" han realizado en las últimas horas ataques con drones contra tres aeródromos en Rusia, que demostrarían "la capacidad" de Kiev para bombardear áreas de la retaguardia rusa y para "posiblemente interrumpir la campaña de ataques de Rusia contra la infraestructura ucraniana", según el Instituto para el Estudio de la Guerra.
El lunes 5 de diciembre se produjeron los ataques contra la base aérea Engels-2, en la región de Saratov -a unos 500 kilómetros del territorio ucraniano- y contra la base de Diagilevo, en Riazán -a 460 kilómetros. Este martes, un tercer aeropuerto -en este caso el de la región de Kursk, que comparte frontera con Ucrania- ha sido golpeado también.
La importancia de los ataques del lunes -que fueron respondidos con un nuevo bombardeo masivo de misiles de largo alcance contra infraestructuras críticas de Ucrania- radica en la distancia alcanzada supuestamente por Ucrania, que no ha reivindicado la operación pero que tampoco la ha desmentido.
Las bases de Engels-2 y de Diagilevo albergan parte de la flota de bombarderos estratégicos de Rusia. Forman parte de su política de disuasión nuclear y han sido usados en los bombardeos de Ucrania. "Las fuerzas ucranianas probablemente intentaron interrumpir los ataques rusos contra infraestructura crítica ucraniana y demostrar la capacidad de Ucrania para atacar los activos estratégicos rusos", añade el ISW.
La inteligencia británica señala que, si Rusia evalúa estos incidentes como ataques deliberados, "probablemente los considere como uno de los fallos estratégicos más significativos" desde el inicio de la invasión.
En el frente, Rusia continúa defendiendo sus posiciones a lo largo del frente de Svatove-Kreminna, en la región de Lugansk, mientras logra "avances incrementales" alrededor de la ciudad de Bajmut aunque sin rodear por ahora la ciudad, según el Instituto.
Miércoles 7 de diciembre, día 287 de la guerra: Ucrania parece avanzar en el noreste de Járkov mientras Rusia lucha por Bajmut sin poder rodearla aún
La guerra de Ucrania mantiene actualmente tres frentes principales: el noreste, donde Kiev parece haber logrado avances en las últimas horas en Járkov; el este, donde Rusia intenta rodear la ciudad de Bajmut, en Donestk, sin éxito aún; y el sur, en Jersón, donde rusos y ucranianos siguen intercambiando fuego de artillería a ambos lados del río Dniéper.
Según el informe diario del Instituto para el Estudio de la Guerra, es "probable" que las tropas ucranianas hayan logrado "avances recientes" en el noreste de la región de Járkov. Rusia está bombardeando posiciones ucranianas en localidades a 50 kilómetros al noroeste de Svatove, ya en Lugansk, y 15 kilómetros de la frontera internacional, "lo que indica que las tropas ucranianas probablemente han hecho avances limitados en este área".
Una de las localidades que han recuperado los ucranianos en las últimas horas es Kyslivka, a 25 kilómetros al noroeste de Svatove, un importante nudo logístico para Rusia y principal objetivo en este frente junto a Kreminna.
En el frente este, Rusia sigue logrando avances "marginales" alrededor de la ciudad de Bajmut, en Donetsk, pero sin conseguir rodearla aún. El Estado Mayor de Ucrania ha informado de que Moscú se está concentrando en mejorar sus posiciones tácticas alrededor de este ciudad, según el ISW. Los rusos no tendrían esta vez la "ventaja de sorprender" a los ucranianos como sí lo hicieron en el asedio de Mariúpol en marzo, según la valoración de un exministro de seguridad de la autoproclamada prorrusa República Popular de Donetsk recogida en su informe por el think tank estadounidense.
El Ministerio de Defensa del Reino Unido, por su parte, informa este miércoles de que Rusia ha comenzado a extender posiciones defensivas a lo largo de su frontera internacional y en el interior de la región limítrofe de Belgorod, para evitar un supuesto asalto mecanizado de Ucrania. En esta región también se ha puesto en marcha "unidades de autodefensa locales".
La inteligencia británica señala que estas decisiones ilustran "la creencia genuina (pero falsa)" de que existe una "amenaza creíble" de invasión. El ISW habla directamente de "teorías inverosímiles" y de "premisa absurda".
Semana anterior
El 24 de febrero de 2022 comenzó la invasión rusa de Ucrania con ataques aéreos y ofensivas sobre el terreno. En la 40ª semana de guerra, del 18 al 30 de noviembre, Ucrania se ha enfrentado a las consecuencias del peor ataque masivo contra la infraestructura energética con la desconexión por primera vez en la historia de todas sus centrales nucleares a la vez y millones de personas sin luz, agua y calefacción.
Sobre el terreno, en el este de Ucrania, Rusia ha logrado avances en su lucha por el control de Bajmut, en la región de Donetsk, aunque sin que se espere por ahora un "cerco inminente" de esta ciudad, según el Instituto para el Estudio de la Guerra. En el sur, en Jersón, ha seguido preparando posiciones defensivas en la margen izquierda del Dniéper, lo que sugiere que Moscú ve como "amenaza seria" la posibilidad de que Ucrania cruce el río, según el think tank.
En el siguiente enlace se puede consultar el diario del conflicto en esa semana y acceder a los de las semanas anteriores.
Contribuyen a la elaboración de esta información Ana Martín Plaza, Daniel Flores, José Ángel Carpio, Cristina Pozo García, Jaime Gutiérrez, Paula Guisado, Pilar Bayón y el equipo de Diseño de RTVE.
Sobre estos mapas
La situación en Ucrania cambia continuamente, pero el flujo de información no es constante. Por eso, esta pieza no pretende ser exhaustiva, sino hacer un seguimiento general de los ataques. Es posible que en los mapas sigan apareciendo eventos pasados y que haya otros que tarden un tiempo en reflejarse.
Existe un debate metodológico acerca de que asignar zonas geográficas enteras al control de las tropas rusas puede dar a entender que no existe resistencia o contraataques por parte de las fuerzas armadas ucranianas. Sin embargo, en estos mapas se busca visualizar las áreas en las que se producen los avances y maniobras de las tropas rusas, adoptando un enfoque militar estándar para registrar diariamente los movimientos de una guerra de maniobras convencional como la que libra Rusia en Ucrania. Este seguimiento de las maniobras y tácticas es esencial para entender y evaluar la evolución de la guerra.
La información del avance de las tropas rusas procede de los informes del Instituto para el Estudio de la Guerra (ISW) de Washington junto con el proyecto Critical Threats. Sus actualizaciones diarias indican las partes de Ucrania que están bajo control ruso, entendiendo ‘control’ como influencia sobre un área frente a un enemigo. En ese sentido, las áreas coloreadas no suponen la eliminación completa de la resistencia local.
Para completar la información se utilizan las actualizaciones del Ministerio de Defensa del Reino Unido y del Ministerio de Asuntos Exteriores de Ucrania, así como datos, vídeos y fotografías proporcionadas por agencias de noticias, medios internacionales y otras fuentes de información fiable revisada por el equipo de DatosRTVE.