Casi cien días después, este domingo decae el estado de alarma, decretado a causa de la pandemia del coronavirus, y el país entra en la nueva normalidad. Tras un duro confinamiento, que llevó a la paralización de buena parte de la economía, el plan de desescalada por fases ha permitido progresivamente adoptar nuevas medidas de alivio, con algunas comunidades, las menos afectadas, avanzando a mayor velocidad.
Esta situación llega este domingo a su fin pero, sin embargo, el Gobierno mantiene una serie de medidas de precaución, como refleja el decreto de nueva normalidad, y las comunidades autónomas tienen plena competencia para fijar diferentes normas en función de los datos epidemiológicos. Pero, ¿qué se puede hacer -y qué no- en esta nueva normalidad?
¿Qué territorios incluye?
Todas las comunidades y ciudades autónomas españolas dejan atrás desde esta medianoche el estado de alarma, aunque algunas ya han dado este paso, en función del anuncio del Gobierno de que todas las que alcanzaran la Fase 3 podían decretar el fin del estado de alarma. Galicia fue la primera en hacerlo y desde el lunes pasado se encuentra en la nueva normalidad, al igual que hicieron el viernes otras como Cataluña, País Vasco y Cantabria, las dos últimas permitiendo incluso la movilidad entre ambas regiones.
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¿Cuáles son las principales medidas?
La que afecta de forma más directa es el uso obligatorio de mascarilla en la vía pública, en espacios al aire libre y en espacios cerrados de uso público, así como en los transportes, siempre que no sea posible garantizar una distancia física de al menos 1,5 metros, con multas por incumplimiento de hasta 100 euros. El decreto también establece las habituales normas de higiene y distancia física en lugares públicos y obliga a las comunidades autónomas a garantizar el diagnóstico precoz y la disponibilidad de medios materiales y profesionales para la prevención y control del COVID-19.
¿Es igual en todo el país?
No. Aunque las normas citadas son obligatorias en todos los territorios, hay otras que cada gobierno regional podrá legislar según su criterio. La mayor diferencia se produce en cuestión del control de aforos, de modo que la Comunidad de Madrid -la más afectada por la pandemia- ha fijado una afluencia máxima en espacios cerrados del 60% hasta el 5 de julio, cuando lo aumentará hasta el 75%, mientras Andalucía permite un 75% en bares y restaurantes y hasta el 100% en terrazas.
Otros aspecto en el que difieren las distintas comunidades es en el ocio nocturno, que Madrid no permitirá abrir hasta el 5 de julio mientras que Baleares ha acordado limitar su horario de apertura hasta las 2 de la madrugada y solo a locales con aforos inferiores a 300 personas. Por su parte, Aragón permite que discotecas y bares de copas solo dispongan de la mitad de su aforo.
También hay diferencias de criterio en las limitaciones en playas, piscinas, fiestas populares o actividades al aire libre.
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¿Hasta cuándo durará?
No hay una fecha establecida para el final de la nueva normalidad. El Gobierno ha señalado en varias ocasiones que el fin de esta etapa se producirá con el momento en el que se dé por concluida la pandemia, y para ello será necesario la aparición de una vacuna o de un tratamiento efectivo para el COVID-19, un aspecto en el que laboratorios de todo el mundo trabajan contra reloj.
¿Puedo viajar a otras provincias y regiones?
Sí. Una de las medidas más esperadas de la nueva normalidad es la posibilidad de viajar sin restricciones por todo el país, ya que la movilidad se había restringido en las últimas semanas al ámbito provincial. Sin embargo, Sanidad ha pedido que todavía se limiten los viajes a casos de necesidad. Así lo señaló el pasado jueves el director del Centro de Coordinación de Alertas Sanitarias, Fernando Simón, quien recomendó no cambiar de provincia o comunidad salvo que sea necesario, al menos hasta que el riesgo de contagio sea cercano a cero.
¿Y a otros países?
Desde este domingo se abren las fronteras con los países del espacio Schengen -Bélgica, Dinamarca, República Checa, Alemania, Estonia, Grecia, España, Francia, Italia, Letonia, Lituania, Luxemburgo, Hungría, Malta, Países Bajos, Austria, Polonia, Portugal, Eslovenia, Eslovaquia, Finlandia y Suecia, así como Islandia, Liechtenstein, Noruega y Suiza- y de otros seis que, aunque no han suscrito el acuerdo, forman parte de la Unión Europea: Reino Unido -que se encuentra en período transitorio hasta que a final de año abandone definitivamente la UE-, Irlanda, Rumanía, Bulgaria, Chipre y Croacia. En el caso de Portugal, la apertura se retrasará al 1 de julio, a petición del gobierno luso, y se llevará a cabo con un acto en el que estarán presentes las autoridades de ambos países.
España pretende abrir las fronteras a sus socios europeos sin cuarentenas, incluido Reino Unido, aunque habrá que esperar al 29 para que Londres decida si levanta esta condición para los ciudadanos españoles.
Respecto a terceros países, España prevé ir recuperando la movilidad gradualmente a partir del 1 de julio, fecha marcada para el regreso del turismo. La negociación correrá a cargo de la Unión Europea y se exigen condiciones sanitarias y reciprocidad: es decir, que esos países también permitan el ingreso de viajeros europeos. Es posible que la Comisión Europea elabore, en función de eso, una lista de 'países seguros'.
¿Qué controles se realizarán a los turistas?
Según ha asegurado Sanidad, los viajeros que entren a España desde este domingo a través de aeropuertos y puertos se someterán a tres controles por parte de las autoridades sanitarias: se les tomará la temperatura, se les realizará una observación visual sobre su aparente estado de salud y deberán rellenar un documento con su procedencia, si han pasado la enfermedad en qué condiciones y el lugar en el que se alojarán. Si no supera satisfactoriamente alguno de estos requisitos, será examinado por un médico y, en función del diagnóstico, derivado a los servicios sanitarios para ponerle en cuarentena si fuera necesario o incluso hospitalizado.
El ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha descartado que se vayan a hacer pruebas PCR de modo masivo a los turistas pues confía en que aquellos que presentes síntomas antes de viajar, no van a desplazarse.
Los viajeros que lleguen a España tendrán que pasar tres controles básicos de salud en los aeropuertos
¿Puede decretarse un nuevo estado de alarma?
Sí. El Gobierno no lo descarta en caso de que se agrave la crisis sanitaria. En varias ocasiones, Pedro Sánchez y sus ministros han alabado las ventajas de esta herramienta legal para llevar a cabo un confinamiento que se considera esencial para el control de la pandemia y con un seguimiento ejemplar por parte de la población. Sin embargo, la opción que maneja el Ejecutivo es la de llevar a cabo actuaciones "quirúrgicas" sobre grupos puntuales ante los rebrotes, como se realizó en febrero en Tenerife, cuando se aisló a los clientes de un hotel. En todo caso, son decisiones que competen a los gobiernos regionales y que deben ser avaladas por un juez.