Los expertos del Ministerio de Sanidad estiman que esta semana podría alcanzarse el pico máximo de la curva de contagios de coronavirus, aunque se trata de una circunstancia imposible de prever con exactitud. Es algo que, como ha recordado el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, depende del número de reproducción del virus, es decir, del número de casos secundarios que genera cada positivo.
"Cuando ese número está por encima de uno, ese caso transmite a uno, a dos, a tres... la epidemia crece y ese número cambia en cuanto cambiamos el patrón de contacto social", ha estimado Simón. Por eso, el objetivo es conseguir que el promedio de casos de transmisión esté por debajo de uno. "Si lo conseguimos, empezaremos a descender automáticamente la transmisión de la enfermedad", ha aclarado.
Los últimos datos arrojados por la evolución de la epidemia de coronavirus en España invitan ligeramente al optimismo, aunque queda mucho camino por delante y lo más complicado está aún por llegar. "Parece que se va suavizando progresivamente el número de casos que se notifican cada día, pero no tenemos certeza de que nos estemos acercando al pico", ha asegurado este lunes Simón, tras la reunión diaria del Comité de Gestión Técnica del Coronavirus.
El ministro de Sanidad, Salvador Illa, también ha mostrado su "esperanza" en que el pico de casos de coronavirus en España llegue "en unos días", aunque ha puntualizado que, en cualquier caso, "llegar al pico en los próximos días no significa resolver el problema".
Quedarse en casa, lo más efectivo
Las estrategias epidemiológicas son siempre complicadas debido, entre otros factores, a la cantidad de variables que entran en juego. Sin embargo, hay una regla básica sobre la que se construye cualquier planificación: el distanciamiento social, o lo que es lo mismo, quedarse en casa. Solo así se puede disminuir la tasa de contagio (R0) del coronavirus Covid-19 por debajo de uno.
La OMS estima que la tasa de contagio (R0) del nuevo virus es de 1,4 a 2,5, aunque otras estimaciones hablan de un rango entre dos y tres. Esto quiere decir que cada persona infectada puede a su vez contagiar a entre dos y tres personas. El objetivo es llevarlo hasta una cifra inferior a uno para contener el avance de la epidemia, lo que a su vez permitiría descongestionar progresivamente hospitales y unidades de cuidados intensivos (UCI), la necesidad más acuciante en estos momentos.
Las medidas de distanciamiento social pueden ser más o menos duras, dependiendo de la estrategia adoptada por cada país. Y en este sentido también adquiere importancia el aspecto económico. Por lo que se desprende de las intervenciones de los representantes tanto del Ministerio de Sanidad como del Ejecutivo de las últimas horas, las autoridades españolas intentan apurar al máximo ese distanciamiento social para evitar el colapso sanitario, aunque sin llegar al punto de asfixia económica que creen que podría suponer ese cierre casi total que diferentes grupos políticos, gobiernos autonómicos e incluso científicos han pedido con insistencia.
"España no es China"
Tal y como ha recalcado una vez más esta mañana Fernando Simón, no parece que de momento las autoridades sanitarias españolas se planteen endurecer aún más las medidas de distanciamiento y aislamiento que están en vigor. "Nuestro país no es China, están afectadas todas las comunidades autónomas y no podemos aislarnos del resto del mundo", ha asegurado al respecto.
"En china se aisló una sola provincia que no representa el 4% de la producción del país, tenemos que plantear las cosas de otra manera. Tenemos que conseguir que las medidas actuales, que son muy estrictas, se cumplan", ha insistido, para añadir: "nuestra mejor medida para doblar la curva no es añadir una nueva medida, sino garantizar que las que hay se están implementando bien, y sabemos que se están implementando de una forma muy eficaz".