Italia ha celebrado este domingo elecciones generales para renovar la composición del Parlamento. La jornada ha transcurrido con normalidad, si bien se han producido algunos incidentes por el confuso método de votación, que ha provocado retrasos en la apertura de varios colegios electorales de Palermo (en el sur del país) y anulaciones de votos en otro colegio de Roma porque las papeletas estaban equivocadas.
La participación en estos comicios, según datos del Ministerio del Interior italiano, ha sido del 73,16%. Dos puntos por debajo de los anteriores comicios de 2013, que se celebraron en dos días (domingo y lunes), cuando la participación fue del 75,2%.
A lo largo de la jornada se ha podido ver como han ido votando el presidente de la República, Sergio Mattarella; el secretario general del gubernamental Partido Demócrata (PD), Matteo Renzi; el actual primer ministro en funciones, Paolo Gentiloni; el líder del Movimiento Cinco Estrellas, Luigi di Maio; la de la formación ultraderechista de Hermanos de Italia, Giorgia Meloni; el de la Liga, Matteo Salvini; y Silvio Berlusconi, líder de Forza Italia.
Entre las anécdotas de estas elecciones se puede mencionar el momento en que una activista del grupo Femen ha soprendido al ex primer ministro al grito de "¡Berlusconi, tu tiempo ha caducado!" cuando se disponía a votar en un colegio de Milán.
La coalición de Berlusconi lidera las encuestas
Los italianos han votado en esta ocasión con un sistema llamado Rosatellum bis, pactado por los ex primer ministros Mateo Renzi y Silvio Berlusconi.
En total, este domingo se han elegido a 630 diputados y 315 senadores mediante un método mixto en el que el 36% de los escaños de ambas cámaras serán asignados con un sistema mayoritario basado en circunscripciones uninominales y el 64% restante de forma proporcional en candidaturas plurinominales.
Además, se ha establecido un umbral electoral del 3% de votos para que los partidos puedan acceder a las cámaras y del 10% en caso de que concurran coaligados.
Este nuevo sistema hace que para lograr una mayoría estable de gobierno sea necesario sumar el 40% de los votos, según los analistas, lo que ha favorecido la formación de coaliciones y alianzas, aunque las encuestas pronostican que nadie llegue a esa cifra.
La coalición formada por Forza Italia de Silvio Berlusconi y los Silvio Berlusconiultraderechistas de la Liga -según los últimos sondeos, publicados a mediados de febrero- será la ganadora de estas elecciones con cerca de un 35% de los apoyos, lo que en principio sería insuficiente para gobernar y convertir a Antonio Tajani, actual presidente del Parlamento Europeo, en primer ministro.
Después se situaría el Movimiento Cinco Estrellas (M5S), cuyo candidato es Luigi Di Maio, que sería la fuerza más votada en solitario con el 29% de las papeletas, y en tercera posición quedaría el gubernamental Partido Demócrata (PD) de Matteo Renzi, con alrededor del 23%. El papel fundamental lo desempeñarán aquellos que aún no habían decidido su voto y que pueden ser determinantes.
Los comicios generales han coincidido este domingo en Italia además con las elecciones regionales en Lacio (centro), cuya capital es Roma, y en Lombardía (norte), cuya capital es Milán, dos regiones muy significativas para el país por su población y su contribución al producto interior bruto (PIB).