En el camino de salida de la pandemia, las vacunas son con diferencia el elemento más importante, pero no el único. Otras soluciones terapéuticas también tienen un papel fundamental, como es el caso de los fármacos antivirales y de aquellos que no atacan directamente al virus, sino que atenúan sus efectos más graves. Respecto a estos últimos, el Instituto Cardíaco de Montreal (ICM-MHI) acaba de dar a conocer un estudio cuyos resultados abren una nueva vía de esperanza en el tratamiento de la enfermedad: la colchicina o colquicina, un medicamento usado habitualmente contra la gota, ha demostrado que también es eficaz para tratar a pacientes de COVID-19, en los que reduce hasta un 44% su mortalidad y un 25% las hospitalizaciones. Eso sí, tiene que ser administrada al comienzo de la enfermedad, en recién diagnosticados; y bajo prescripción médica.
Al igual que la dexametasona -que también ha demostrado una eficacia significativa en el tratamiento de la COVID-19-, la colchicina consigue prevenir y reducir la inflamación producida por el coronavirus en el organismo humano. El estudio, llevado a cabo por los científicos canadienses, demuestra que es capaz de rebajar los niveles de citoquinas y la activación de macrófagos, neutrófilos e inflamasoma.
Así, parte de esta efectividad se basaría en su carácter inmunosupresor, ya que sería capaz de aplacar el daño causado por el sistema inmunológico cuando este se sobreactiva y alcanza niveles devastadores para el propio organismo al que intenta defender del coronavirus. Es lo que se conoce como "tormenta de citoquinas", un proceso que se desarrolla en los cuadros más graves de la enfermedad en algunos pacientes, y que es potencialmente mortal.
Solo tres euros por tratamiento
Otra de las grandes ventajas de la colchicina es que se trata de un medicamento muy barato y de fácil acceso. El tratamiento de un mes con este fármaco, que además de para combatir la gota puede ser utilizado contra la artritis y la cirrosis, cuesta aproximadamente tres euros.
El estudio clínico se ha realizado con una muestra de 4.488 pacientes en todo el mundo. Según los investigadores del Instituto Cardíaco de Montreal, los resultados demuestran "que el uso de colchicina estuvo asociado con reducciones estadísticamente significativas en el riesgo de muerte y hospitalización comparado con el placebo".
“La colchicina redujo las hospitalizaciones un 25%, la ventilación mecánica en un 50% y las muertes en un 44%. “
"En aquellos pacientes con un diagnóstico probado de COVID-19, la colchicina redujo las hospitalizaciones un 25%, la necesidad de ventilación mecánica en un 50% y las muertes en un 44%. Este gran descubrimiento científico hace de la colchicina el primer medicamento oral del mundo que puede ser utilizado para tratar pacientes no hospitalizados con COVID-19", añaden los autores.
Reducción de las complicaciones asociadas
El doctor Jean-Claude Tardif, director del Centro de Investigación del ICM-MHI y principal investigador del estudio, ha declarado en un comunicado que "nuestro estudio muestra la eficacia del tratamiento de la colchicina en prevenir el fenómeno de la 'tormenta de citoquinas' y reducir las complicaciones asociadas con la COVID-19".
El estudio, denominado Colcorona, se realizó con pacientes de Canadá, Estados Unidos, Europa, Sudamérica y Sudáfrica, y utilizó un sistema sin contacto, aleatorio, doble ciego, con placebo controlado y diseñado para determinar si la colchicina "podría reducir el riesgo de graves complicaciones asociadas con la COVID-19".