El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, aboga por prolongar los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) por el coronavirus y las medidas de liquidez para las empresas viables con el fin de impulsar la recuperación.
En su intervención (pdf) en la comisión de reconstrución del Congreso ha señalado que "tiene sentido mantener los ERTE y asegurar los mecanismos de flexibilidad para las empresas" porque algunos efectos adversos de la crisis se extenderán en el tiempo. De momento, en el segundo trimestre la institución estima que la caída de la actividad puede rondar entre un 16 y un 21,8 % en tasa intertrimestral.
Ante la adversa coyuntura económica, "parece apropiado mantener durante un horizonte más amplio que el inicialmente previsto algunas de estas medidas de apoyo al empleo y a las rentas de los hogares más vulnerables", aunque Hernández de Cos ha matizado que es fundamental que se mantenga su carácter "focalizado y temporal".
Sostener a las empresas
Con respecto a los avales empresariales, Hernández de Cos, apunta que una vez superada la fase crítica de la crisis los recursos financieros para sostener a las empresas deberían primar a aquellas con perspectivas sólidas de viabilidad, en los sectores que pueden contribuir en mayor medida a recuperar la actividad y el empleo.
En esta segunda fase recién iniciada de reactivación económica ve "crucial" que se identifiquen a tiempo los daños estructurales para poder gestionar la política económica de forma que se produzca una adaptación del tejido productivo a la nueva realidad.
Aboga también por reforzar la agilidad y eficacia de los procesos de insolvencia empresarial para que las compañías con dificultades financieras, "cuyo número aumentará previsiblemente en los próximos meses", tengan acceso a un marco de reestructuración preventiva que les permita continuar con su actividad empresarial cuando aún son viables.
Evaluación de la renta mínima
El ingreso mínimo vital (IMV) podría contribuir, en coordinación con las políticas autonómicas preexistentes, "a reducir el nivel de pobreza extrema de colectivos con especiales dificultades de inserción en el mercado laboral", pero el gobernador recalca que debe ir acompañado de "un seguimiento continuo y riguroso de su funcionamiento, de su coste y del grado de consecución de los objetivos perseguidos".
Hernández de Cos estima que hay que vigilar si se producen algunos efectos indeseados sobre la capacidad futura de los beneficiarios de generar ingresos laborales pero valora que se mantenga una parte de la ayuda una vez que el beneficiario encuentra trabajo.
Sobre el endurecimiento de las condiciones de acceso al mercado de la vivienda en alquiler, aconseja impulsar la oferta disponible de inmuebles, en ocasiones, de manera directa y, en otras, por medio de mecanismos basados en incentivos fiscales.
"Si bien las limitaciones de precios pueden ser útiles para aliviar la sobrecarga del alquiler sobre el gasto de los hogares que residen en inmuebles regulados, esta medida no impulsa el necesario incremento de la oferta para absorber el aumento de la demanda y, de ese modo, contener la dinámica de los precios a medio plazo", ha precisado.
Aumentar los ingresos fiscales
Hernández de Cos ha aconsejado revisar los bienes gravados con los tipos de IVA más bajos, reducido y superreducido, para conseguir aumentar la recaudación fiscal y también las deducciones y bonificaciones porque el elevado nivel de beneficios fiscales "genera pérdidas importantes de recaudación, y distorsiona la eficiencia y la equidad del sistema impositivo".
Como ejemplo ha puesto analizar las deducciones del impuesto de sociedades al I+D y ver si cumple su objetivo o solo son una financiación de gasto que se hubiera producido en todo caso.
Sobre la tasa Google y la tasa Tobin, actualmente en tramitación parlamentaria, ha dicho que su capacidad recaudatoria dependerá del grado de coordinación fiscal a escala internacional.
Reformas "ambiciosas"
El gobernador ha insistido en la necesidad de afrontar una agenda de reformas ambiciosa "para asentar las bases de un crecimiento sostenible" y una estrategia que sea "urgente, integral, permanente y evaluable" para afrontar los desafíos económicos que deja la crisis y que son apremiantes.
"Ambiciosa, urgente para generar efectos positivos a corto plazo" ha explicado, al tiempo que ha avisado que la consolidación fiscal "solo debe acometerse cuando la economía tenga una senda de crecimiento sólido", con recortes anuales del déficit estructural del 0,5 % del PIB que permitirían situar la deuda por debajo del 100 % a finales de 2030.
Este programa de consolidación fiscal debe afrontarse a medio plazo con medidas para reducir el déficit "evaluables, permanentes y diseñadas con un elevado consenso político" con el fin de no arrastrar una "vulnerabilidad crónica". La deuda pública ha marcado en abril un nuevo máximo.
Para el gobernador también es prioritario que las medidas contra la crisis no endurezcan la financiación bancaria y advierte de que el aumento de la morosidad puede provocar un deterioro de los balances de las entidades. Los bancos tendrán más difícil lograr rentabilidad y necesitarán "esfuerzos adicionales para reducir los costes de explotación y aumentar la eficiencia".