El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha mostrado este domingo su comprensión hacia aquellas comunidades que han mostado su desacuerdo con la decisión de Sanidad de rechazar su paso a la Fase 1 de la desescalada por la pandemia de coronavirus, pero ha insistido en que son los criterios sanitarios los únicos que han guiado las decisiones del Ejecutivo.
Así lo ha confirmado en rueda de prensa la portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, tras la reunión por videoconferencia que Sánchez ha mantenido con los presidentes de las comunidades autónomas, la novena desde que se decretó el estado de alarma.
"Entendemos que haya decepción pero no podemos alejarnos del criterio sanitario y dejarnos llevar por consideraciones de tipo político", ha señalado Montero en una comparecencia en la que ha estado acompañada del ministro de Sanidad, Salvador Illa. "Correr más de lo que debemos nos puede devolver a la casilla de salida y eso no podemos permitírnoslo, ni como país ni como sociedad", ha añadido la portavoz.
Según Montero, los presidentes autonómicos han coincidido en la necesidad de actuar con "máxima cautela y lealtad" e intentar "no trasladar falsos agravios o especulaciones que no tienen ningún fundamento en una pandemia de estas características".
Además, ha aclarado que para avanzar en las distintas fases se ha realizado un trabajo "muy riguroso" entre los técnicos del Ministerio de Sanidad y los de las comunidades autónomas.
En la misma línea, Salvador Illa ha manifestado que "la prudencia va a ser la guía de actuación en la desescalada".
[Qué puedo hacer desde el lunes si vivo en la Fase 1]
Sánchez también les ha detallado los criterios con los que se repartirá el Fondo de Reconstrucción de 16.000 millones de euros entre las comunidades autónomas para gasto sanitario y les ha comunicado que podrán destinar a esta partida la parte no ejecutada de los fondos FEDER, unos 3.200 millones de euros, según ha indicado Montero.
Además, el presidente del Gobierno les ha comunicado que este lunes se firmará el acuerdo sobre los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) alcanzado entre el Gobierno y los agentes sociales y que prevé su extensión hasta el 30 de junio.
Ayuso, Moreno y Puig piden avanzar en la desescalada
Algunos de los presidentes de las comunidades afectadas por la decisión de permanecer en Fase 0 le han reprochado al jefe del Ejecutivo el perjuicio que va a suponer esta decisión. Los más críticos han sido los de la Comunidad de Madrid, Andalucía y Comunidad Valenciana, que le han pedido que replantee su pase a la siguiente fase de la desescalada.
Así, la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, ha reclamado a Sánchez un cambio en su decisión para reactivar la economía tras el "zarpazo" que ha supuesto el coronavirus.
Ayuso ha defendido que es necesario poner en marcha ya el Fondo no reembolsable para las comunidades autónomas, reunir cuanto antes el Consejo de Política Fiscal y Financiera "para saber ya a través del mismo cómo vamos a poder operar" y que se lleve el real decreto a tal efecto al Consejo de Ministros.
Por su parte, el presidente de Andalucía, Juan Manuel Moreno, ha considerado "difícil de entender" que distritos sanitarios como la Costa del Sol, con 1,6 casos PCR por 100.000 habitantes, no pueda pasar a la Fase 1 y sí lo vayan a hacer otros con incidencias más elevadas.
Moreno ha advertido al presidente del Gobierno que esta decisión está causando un "daño reputacional" innecesario a marcas como la Costa del Sol o la Costa Tropical de Granada y ha pedido que se revise la decisión, que considera "un agravio evidente".
Mientras, el presidente de la Comunidad Valenciana, Ximo Puig, ha exigido a Sánchez que "estudie de nuevo" el plan que presentó su gobierno para que toda la región avanzara en la desescalada -14 departamentos no lo han hecho- y que se "se revierta lo más pronto posible" esta decisión. "Lealtad no es sumisión", ha señalado en una comparecencia tras el encuentro.
Sin embargo, ha matizado que quiere "evitar crispaciones innecesarias" porque buscar la confrontación "sería sumamente irresponsable".
En contraste, el presidente de Murcia, Fernando López Miras, ha mostrado ciertas reservas hacia las medidas más permisivas de la Fase 1 -en la que a partir de este lunes se encontrará su comunidad autónoma- y ha señalado que no dudará en pedir a Sanidad volver a la Fase 0 si aprecia falta de civismo entre la población y un repunte de contagios.
Diferentes criterios sobre el fondo de compensación
El reparto del Fondo no reembolsable a las comunidades ha sido otro de los asuntos centrales de esta videoconferencia, con divergencias entre los diferentes presidentes acerca de los criterios a aplicar en la distribución de los 16.000 millones de euros anunciados por el Gobierno, aunque la mayoría ha reclamado a Sánchez la inmediata puesta en marcha de esta ayuda.
Así, el jefe del Gobierno asturiano, Adrián Barbón, ha defendido una "posición común" para que el fondo de compensación tenga en cuenta el envejecimiento de la población de los territorios, mientras que su homólogo cántabro, Miguel Ángel Revilla, considera "totalmente injusto" que el reparto se haga en base al número de habitantes y hospitalizaciones y no por los costes del servicio.
Por su parte, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha solicitado que el reparto de los 16.000 millones se destine en función de la incidencia que ha tenido la pandemia en cada territorio.
Alfonso Fernández-Mañueco, presidente de Castilla y León, ha exigido la participación de las autonomías en la aplicación de los criterios macroeconómicos que decidirán la capacidad de deuda y nivel de déficit de todas ellas a raíz la crisis sanitaria y la presidenta de La Rioja, Concha Andreu, ha pedido contar con los apoyos a los ERTE, el Fondo de Liquidez no Reembolsable y de todas ayudas que puedan llegar desde Europa para la recuperación de la comunidad. Además ha solicitado facilitar la conciliación de los padres que se reincorporen al trabajo en las sucesivas fases de desescalada mientras los niños siguen sin clase.
Torra quiere mascarillas obligatorias en espacios públicos
Aunque parte de Cataluña también se ha quedado en Fase 0, su presidente, Quim Torra -muy crítico con la gestión del Gobierno desde el inicio del estado de alarma-, no ha abordado esta cuestión pero sí ha reclamado el uso obligatorio de mascarillas en espacios públicos, así como un plan para los próximos tres meses destinado a "salvar" la economía, "interviniendo y gastando" sin pensar en el déficit. Torra ha garantizado que el gobierno autonómico no recortará en el gasto público para superar la crisis.
A la economía también se ha referido el lehendakari, Iñigo Urkullu, quien ha pedido en su intervención que se clarifice de manera "urgente" el margen de deuda y déficit para abordar la reconstrucción. Además, ha pedido "altura de miras" y consenso "entre todos" para planifcar esta nueva etapa que, en su opinión, debe centrarse en "responder a la crisis socioeconómica"-
Mientras, el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, ha instado al Gobierno a que informe de los requisitos que se exigirán para avanzar a la Fase 2 y ha criticado el criterio aplicado para no poder desplazarse entre provincias.
En la misma línea, el presidene de Aragón, Javier Lambán, ha asegurado que luchará para que la movilidad se pueda extender a toda la comunidad autónoma y para la flexibilización de las normas en el medio rural.
Page y Vara reclaman que se permita la caza y la pesca
La caza y la pesca también han ocupado el interés de algunos presidente autonómicos, como García-Page y Fernández Vara, que han pedido al jefe del Ejecutivo que se reconsidere la decisión de no permitir en la Fase 1 las actividades de caza y pesca deportiva y han pedido reactivarlas de forma normalizada.
También el presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, ha solicitado que se permita la pesca deportiva individual, una petición a la que se han sumado Galicia y Asturias, lo que ha llevado al Ejecutivo central al analizarlo para que se pueda permitir a partir de la próxima semana.