Irán y las grandes potencias mundiales han alcanzado un histórico acuerdo que pone fin a 13 años de conflicto de la República Islámica. El acuerdo ha sido saludado tanto por el presidente de EE.UU., Barack Obama, como por el presidente de Irán, Hassan Rohaní, aunque muy criticado por el primer ministro israelí, Banjamín Netanyahu.
El ministro de Exteriores de Irán, Mohamed Yavad Zarif, ha asegurado al inicio de la última sesión de las negociaciones que el acuerdo "no es perfecto" pero "todos ganan con él". "Hoy podría haber sido el final de la esperanza, pero estamos ante un nuevo capítulo de esperanza", ha dicho el ministro iraní antes de rubricar el acuerdo tras 18 días seguidos de negociaciones con el Grupo 5+1 en Viena.
Por su parte, la responsable de política exterior de la Unión Europea (UE), Federica Mogherini, que ha coordinado al grupo internacional (Estados Unidos, China, Rusia, Reino Unido, Francia y Alemania) en estas negociaciones, ha dicho que el pacto "supone una señal de esperanza para todo el mundo". "Todos sabemos que la decisión que vamos a tomar está relacionada con su programa de armas, pero es mucho, mucho más que eso. Esta decisión abre un nuevo capítulo en las relaciones internacionales", ha dicho.
Por su parte, el presidente de EE.UU., Barack Obama, ha señalado en un mensaje televisiado a la nación que "este acuerdo ofrece una oportunidad de avanzar en nuevas direcciones. Deberíamos aprovecharla", ha indicado Obama."El camino de la violencia y de la ideología rígida, una política exterior basada en amenazas para atacar a tus vecinos o erradicar a Israel, eso es un callejón sin salida", indicó el mandatario en referencia a Irán.
Términos del acuerdo
Conforme a los términos del acuerdo, Irán se compromete a eliminar dos tercios de centrifugadoras instaladas y, según ha manifestado el propio Obama, deshacerse del 98% de su uranio. Además, permitirá el acceso de inspectores de la ONU a instalaciones militares, pero podrá poner objeciones. Además, según Reuters, el acuerdo contempla que se mantendrá durante 5 años el embargo para armas convencionales y durante 8 el de misiles balísticos.
A cambio, Teherán consigue que se levanten las sanciones internacionales que no estén relacionadas con la violación de derechos humanos. Sin embargo, ha aceptado una suerte de ‘mecanismo automático’ por el cual estas sanciones se podrán volver a imponer a los 65 días de constatarse de que Irán viola el pacto.
Sólo cuando el OIEA emita su veredicto sobre el cumplimiento íntegro de los primeros pasos del acuerdo se podrán levantar las primeras medidas punitivas, impuestas en su momento por la ONU, Estados Unidos y la Unión Europea (UE). Se estima que el OIEA entregue su informe a finales de año. El director del OIEA ha señalado que el objetivo es presentar una evaluación definitiva sobre el programa atómico iraní a partir de la 15 de diciembre de este año, incluida una investigación sobre sus actividades pasadas.
La comunidad internacional buscaba desde hace años un acuerdo para impedir que Irán acceda a la bomba atómica a cambio del levantamiento de las sanciones económicas que han estrangulado la economía del país. Los detalles políticos del acuerdo se conocerán a lo largo de este martes, según ha dicho Mogherini después, tras la lectura del documento general del acuerdo.
Ratificación en el Congreso de EE.UU.
Desde Teherán y Washington, Hasán Rohaní y Barack Obama han saludado también el acuerdo "histórico" aunque con matices. Para Obama, el acuerdo supone "el camino de la violencia y de la ideología rígida, una política exterior basada en amenazas para atacar a tus vecinos o erradicar a Israel, eso es un callejón sin salida", han indicado el presidente de EE.UU. el mandatario en referencia a Irán.
El Congreso de EE.UU. tiene 60 días para revisar y ratificar el acuerdo, aunque Obama ya ha advertido de que vetará cualquier proyecto de ley que impida la aplicación del acuerdo.
Por su parte, el presidente iraní también ha saludado el pacto, aunque con más escepticismo. "Hoy no es el día del final, hoy es el día del comienzo, de un comienzo para un nuevo movimiento, un nuevo regocijo, una nueva esperanza, un futuro mejor para los jóvenes, un movimiento más acelerado para el crecimiento y desarrollo de nuestro país", afirmó Rohaní
En mayo, el Congreso estadounidense, dominado por los republicanos, aprobó una ley que da al Legislativo la potestad de decidir sobre si acepta el acuerdo de Estados Unidos, Rusia, China, el Reino Unido, Francia y Alemania con Irán para evitar el uso militar de su tecnología nuclear.
En Irán, el pacto tendrá que afrontar un formal trámite parlamentario, una votación en la que en principio hay pocas posibilidades de que sea rechazado. En cualquier caso, el mayor peso lo tiene el pronunciamiento del líder supremo, Alí Jameneí, quien ha saludado los "honestos y duros esfuerzos" de los negociadores, y que será en última instancia el responsable de juzgar si el pacto de Viena cumple con las "líneas rojas" de la República Islámica o si las demandas de Occidente han sido "excesivas".
Netanyahu: "Es un error de envergadura histórica"
El más crítico ha sido el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, que lo ha calificado como "error de envergadura histórica".
"Se han hecho grandes concesiones en todos los temas que debían impedir que Irán alcance las armas nucleares. Adicionalmente, Irán recibirá miles de millones de dólares con los que alimentar su maquinaria terrorista y su agresividad y expansión por Oriente Medio", ha subrayado, poco después de anunciarse el pacto que Israel ve como una amenaza a su existencia.
Este acuerdo implicará una serie de medidas en los próximos meses, incluido un "acuerdo aparte" sobre la base militar de Parchin, una instalación en la que varias agencias de inteligencia sospechan se realizaron experimentos relacionados con armas atómicas y a la que Teherán niega la entrada a los inspectores del OIEA.