El Tribunal Constitucional germano ha dado luz verde con condiciones este miércoles a la ratificación por parte de Alemania del Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE) -el fondo de rescate permanente europeo-, y el pacto fiscal, ambos aprobados por las dos cámaras parlamentarias de este país el pasado mes de junio.
El máximo tribunal germano ha desestimado los distintos recursos presentados contra dicha ratificación, pero ha impuesto nuevas condiciones.
La principal de las condiciones del Constitucional ha exigido que las garantías de Alemania para el fondo de rescate se limiten a los 190.000 millones de euros acordados en Bruselas y aprobados en su momento por el Bundestag y el Bundesrat (la cámara baja y alta del país).
Alemania cuenta con el 27% de las acciones del Mecanismo de Estabilidad, que actualmente equivalen a esos 190.000 millones. Sin embargo, hasta ahora no estaba claro qué ocurriría en el caso de que fuese necesario ampliar este fondo de rescate permanente.
Ahora el Alto Tribunal germano deja claro que cualquier futura ampliación de capital debe ser autorizada por el Bundestag, la cámara baja del Parlamento alemán.
Asimismo, ha dictaminado que las decisiones del MEDE deben ser presentadas a ambas cámaras, rechazando la cláusula de confidencialidad en el tratado. Es decir, que los parlamentarios alemanes tienen que estar lo suficientemente informados sobre las actividades del fondo de rescate, a pesar del secreto profesional que se exige a los empleados del MEDE.
Este punto, según algunos expertos, hará que se retrase de forma significativa la activación del fondo de rescate porque podrían necesitarse cambios en el tratado del MEDE.
En paralelo a la sentencia, según la ley alemana, el Parlamento germano debe autorizar las ayudas derivadas del MEDE. Sin embargo, todavía no está claro aún si esta autorización requerirá el voto del parlamento o del comité de presupuesto, significativamente menor. En la práctica, implica que el Parlamento alemán tendrá que aprobar cada nuevo desembolso que sea necesario.
El fondo de rescate europeo permanente
Los ocho jueces togados han rechazado también este miércoles el recurso de urgencia para aplazar la ratificación del MEDE por Alemania hasta que el Banco Central Europeo revoque su decisión de la semana pasada de comprar deuda soberana de los países en crisis del euro, presentada por el diputado crítico gubernamental Peter Gauweiler.
La entrada en vigor del MEDE estaba prevista inicialmente para el pasado mes de julio, pero al necesitar la ratificación por parte de al menos el 90% de sus participantes, no podía estar operativo antes de que el Constitucional diera su visto bueno.
El retraso de la ratificación alemana se debió a decisión del pasado mes de julio del Constitucional germano de analizar en profundidad las reclamaciones para aplicar medidas cautelares presentadas por distintas agrupaciones sociales, euroescépticos y el partido 'La Izquierda'.
Los demandantes denunciaban que la adhesión a estos tratados suponía una cesión de soberanía que exigiría la revisión del texto constitucional germano al debilitar la capacidad de supervisión del Parlamento alemán respecto al dinero de los contribuyentes alemanes.
El Presidente alemán, Joachim Gauck, firmará "lo antes posible" el paquete legislativo que engloba el Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE) y el pacto fiscal europeo, tras la sentencia del Tribunal Constitucional (TC) que ha avalado su legalidad.
Primera reunión del MEDE, el 8 de octubre
Tras conocerse la sentencia, el presidente del Eurogrupo, Jean-Claude Juncker, ha hecho público un comunicado. "Teniendo plenamente en cuenta todos los elementos de la sentencia, espero que se completen los procedimientos pendientes para permitir que el Tratado del MEDE entre en vigor", ha dicho Juncker en un comunicado recogido por Europa Press.
"Tengo previsto convocar la reunión inaugural del consejo de gobernadores del MEDE en los márgenes de la reunión del Eurogrupo del 8 de octubre en Luxemburgo", ha anunciado.
En opinión de Juncker, tanto el Tratado del MEDE como el de refuerzo de la disciplina fiscal, también avalado por el Tribunal Constitucional alemán, constituyen "un importante paso adelante hacia una mayor integración presupuestaria y económica y hacia una gobernanza más fuerte en la eurozona".
"Son parte de nuestra estrategia global para mejorar las perspectivas de sostenibilidad fiscal y crecimiento en la eurozona", concluye el comunicado.