Su eterno rostro adolescente esconde muy bien su edad, pero el tiempo también pasa por Gabino Diego. A sus 56 años, el actor es hoy todo un símbolo de la historia de nuestro cine. Durante los años 90, su nombre podía leerse en los créditos todas las comedias españolas. Decenas de títulos en los que puede presumir de haber trabajado junto a grandes como Fernando Fernán Gómez, Imanol Uribe, Carlos Saura, Fernando Trueba o José Luis Cuerda.
A pesar de aquella fama, hace unos años que Gabino vive apartado de la gran pantalla y ha dejado de aparecer en la cartelera nacional. Desde el inicio de los 2000, apenas ha participado en algunos títulos y han pasado cuadro años desde que le vimos en su último rodaje, en la película del fallecido Cuerda, Tiempo después (2018). Una de las contadas ocasiones en las que el actor se ponía delante de las cámaras.
Gabino Diego en 'El rey pasmao' (1981), de Imanol Uribe
Gabino no echa de menos el cine
En una entrevista en el programa de La 2, Atención Obras, el actor reconocía que no echa de menos el cine. “Mientras estaba rodando siempre pensaba lo maravilloso que sería estar de gira con una obra de teatro, ahora me siento muy afortunado de poder ir llevando mi obra por todas partes”, confesaba. Lo cierto es que es ahí donde Gabino ha volcado su carrera, sobre las tablas, en la que actualmente representa la obra Los Mojigatos, dirigida por Magüi Mira y protagonizada junto a Carmen Barrantes.
Gabino Diego actua junto a Carmen Barrantes en 'Los Mojigatos'
“Me siento muy afortunado de mi paso por la gran pantalla, empecé con 16 años y he trabajado con grandes del cine español y toda una generación de actores irrepetibles”, comentaba también echando la vista atrás. Reconoce también que haber acabado en esta profesión fue cuestión de suerte. De hecho, hace tiempo llegó a plantearse si quería seguir siendo actor.
Ocurrió poco después de estrenar Las bicicletas son para el verano (1983), la película de Jaime Chávarri con la que Gabino debutaba en pantalla. Algunas de las malas críticas que recibió por su actuación llegaron a macharle tanto, que decidió marcharse a la otra punta del mundo, en Australia, para reflexionar sobre su futuro.
Sus grandes éxitos en pantalla
Afortunadamente, decidió regresar. A mediados de los años 80 y durante todos los 90 comenzó para el actor su etapa más brillante en el cine. En 1986 se puso bajo la batuta de Fernándo Fernán Gómez en la premiadísima El viaje a ninguna parte, cinta por la que regresó a tras su experiencia australiana. Pero muchos le recuerdan por ¡Ay, Carmela!, cinta que le llevó al éxito, o por sus personajes en Amanece, que no es poco, Belle Epoque o Los peores años de nuestra vida.
Historia de nuestro cine - Belle Epoque - Ver ahora
En 1991, interpretó a uno de sus personajes más importantes en El rey pasmado, de Imanol Uribe. Fue el primer papel totalmente protagónista de Gabino Diego. Una película que volvió a unirle con Fernando Fernán Gómez y sirvió (aparte de para que todos viéramos que se daba más que un aire a Felipe IV) para que España entera se empapara de su mensaje de libertad moral en clave cómica, casi caricaturesca, pero no por ello menos efectiva.
Últimos trabajos y teatro
El papel más popular que el actor ha interpretado en los últimos años se lo debe a Santiago Segura, junto al que firmó dos entregas de la famosa saga Torrente. Apartado ahora de todo aquello, el actor ha encontrado su sitio sobre los escenarios. Desde que era un niño, Gabino Diego ha sido feliz haciendo reír a los demás e interpretando pequeñas obras de teatro y monólogos. El apagón, Nuestras mujeres, El intercambio o Los mojigatos son algunas de sus últimas obras de teatro. Actualmente, el actor se encuentra de gira por España con la obra de teatro La curva de la felicidad, dirigida por Edu Galán.
Atención Obras - Gabino Diego nos presenta Los Mojigatos - ver ahora
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