Enrique Ponce y Ana Soria son los protagonistas de la crónica social este verano. La pareja no deja de mostrar su amor en público y fotos y mensajes que se dedican mutuamente en las redes sociales son ya habituales. El último en hacerlo ha sido el torero que ha publicado una imagen en el storie de su perfil en Instagram en la que aparecen las manos de los enamorados entrelazadas, dibujando un corazón.
El diestro ha dedicado, además, la canción "Jóvenes eternamente" de Pol 3.14. "Y yo, que no puedo estar sin ti, no he encontrado la manera de que no tengas que morir", esta es el fragmento que ha escogido; pero la letra del tema del grupo madrileño es una declaración de amor en la que el autor quiere vivir al lado de su amada eternamente.
Imagen publicada por Enrique Ponce en su perfil de Instagram. @enriqueponce
Tal vez nos están dando una pista de su futuro inmediato. Fuentes cercanas al valenciano afirman que los tortolitos estarían pensando en irse a vivir juntos a partir de otoño, cuando en maestro termine la temporada taurina. Y sus planes irían más allá: Enrique Ponce y Ana Soria estarían pensando en casarse por la Iglesia en junio de 2021, tal y como publicó La Razón.
De no poder celebrar su boda eclesiástica por la negativa de Paloma Cuevas para darle la nulidad matrimonial al diestro, la pareja no descarta casarse por la vía civil. Sin embargo y, tal y como anunciaron en un comunicado oficial, el matrimonio pretende divorciarse de mutuo acuerdo y respetándose en todo momento, por el bien de sus dos hijas menores de edad. Ponce y Cuevas se repartirá las empresas e inmuebles que han adquirido durante sus casi 24 años como marido y mujer.
Enrique Ponce y Paloma Cuevas, años de amor
Tras cancelar la cita El Espinar (Segovia), Enrique Ponce (48 años) ha reaparecido en los ruedos este jueves, 13 de agosto. Lo ha hecho en la plaza de toros de Fuengirola (Málaga), solo, sin la presencia de la joven almeriense en el tendido. Eso sí, la ha tenido muy presente durante la tarde como hemos comprobado al dibujar una 'A' en el albero, algo que ya forma parte de su ritual antes de comenzar la faena.
Y parece que ha vuelto su suerte: ha cortado dos orejas y ha recuperado el prestigio como torero. La estudiante de Derecho, de 22 años, solo ha asistido a tres corridas de Ponce desde que se hiciera pública su relación: en la plaza de la Merced (Huelva), en la de Plasencia y en El Puerto de Santa María (Cádiz). En ninguna de las tres, el de Chiva logró brillar y fue en el coso de la localidad gaditana donde sufrió una cogida que le apartó de sus compromisos profesionales durante una semana.