El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha informado este lunes desde La Moncloa que ha comunicado al rey Felipe VI su intención de adelantar las elecciones generales al 23 de julio (pese a que no estaban previstas hasta noviembre) tras la derrota del PSOE en las municipales y autonómicas de este 28 de mayo.
"Como presidente del Gobierno y como secretario general del PSOE, asumo en primera persona los resultados y creo necesario dar una respuesta y someterlos a la voluntad popular", ha informado en una declaración institucional sin preguntas pasadas las 11.00 de la mañana que había convocado tan solo una hora antes.
Ha sido, además, la primera vez que Sánchez se ha pronunciado sobre los resultados (ya lo habían hecho varios 'barones' socialistas, algunos de ellos responsabilizando a la situación del PSOE nacional de las derrotas territoriales). Y el anuncio ha pillado por sorpresa tanto a los socialistas como a sus socios y la oposición, pues nadie se esperaba este movimiento.
Fuentes socialistas afirman que Sánchez seguirá siendo el candidato del PSOE a las generales y subrayan que la decisión de disolver las Cortes ha sido "solo suya". "Se tomó esta madrugada", han informado, y han reconocido que esta mañana la conocía el "núcleo más duro" del jefe del Ejecutivo pero que ha pillado "por sorpresa" a gran parte de la Ejecutiva Federal. De hecho, estaba previsto que la Ejecutiva se reuniera temprano por la mañana, pero la cita se pospuso tras el anuncio de Sánchez de comparecer en Moncloa. Las mismas fuentes consideran que lo "preocupante" no es el resultado socialista sino la "debacle institucional" que aseguran que supondrá la entrada de Vox en más ayuntamientos y gobiernos autonómicos. Y creen que es mejor adelantar las elecciones para evitar "seis meses infernales" con un PP que "no entiende que solo ha ganado las elecciones municipales y autonómicas y que hay un Gobierno legítimo" al frente de España.
La decisión de Sánchez ha sido refrendada en un consejo de ministros extraordinario este lunes por la tarde para disolver las Cortes y convocar formalmente las elecciones. El decreto, con la fecha de los comicios el 23 de julio, será publicado este miércoles en el Boletín Oficial del Estado.
"He tomado esta decisión a la vista de las elecciones celebradas ayer", ha admitido el también secretario general de los socialistas. Y es que el PSOE ha perdido un importantísimo poder territorial. Sale de los gobiernos de la Comunidad Valenciana, Extremadura, Aragón, La Rioja y Baleares, aunque ha mantenido la mayoría absoluta en Castilla-La Mancha y tiene posibilidades de gobernar en Asturias, Navarra y difícilmente en Canarias (si pacta con Coalición Canaria). También han perdido 15 de las capitales de provincia en las que regían, entre ellas Sevilla, que era el principal bastión municipal del PSOE.
Sobre estos resultados, el jefe del Ejecutivo ha dicho que "la primera consecuencia" de estos comicios será que "magníficos presidentes y alcaldes se van a ver desplazados" pese a una "gestión impecable" y a pesar, ha proseguido, de que "muchos han visto incrementado su apoyo" en las urnas.
"Lo mejor es que los españoles se pronuncien para definir el rumbo del país"
La segunda consecuencia, ha añadido, es que "numerosas administraciones" serán gestionadas a partir de ahora por "mayorías conformadas por PP y Vox". Y, aunque las votaciones tenían carácter municipal y autonómico, ha admitido, "el sentido del voto traslada un mensaje que va más allá". De ahí, su decisión de adelantar las elecciones.
Sánchez ha destacado que España está “a punto de superar” una etapa de crisis derivada de la pandemia y la guerra en Ucrania y que encara una “agenda clara de crecimiento, creación de empleo y cohesión social”. Ha subrayado también que, “a estas alturas”, el Gobierno ha sacado adelante “las grandes reformas” comprometidas en su discurso de investidura, en el programa de gobierno con Unidas Podemos y en el acuerdo con la Comisión Europea. Y ha recordado que España ostentará a partir de julio “una responsabilidad muy grande”, que es la presidencia de turno de la UE. Precisamente, el PSOE contaba con explotar la proyección internacional de España y, sobre todo, de su presidente, ante este hecho.
“Todas estas razones aconsejan una clarificación sobre la voluntad de los españoles, sobre las políticas que debe aplicar el gobierno de la nación y sobre las fuerzas políticas que deben liderar esta fase”, ha expuesto. Y ha dicho que solo hay “un método infalible” para clarificar las dudas, que es la democracia. “Lo mejor es que los españoles se pronuncien sin demora para definir el rumbo político del país”.
En el PSOE ven la decisión "valiente" pero surgen voces críticas con la campaña
Esto no es lo que se esperaba dentro del PSOE, aunque desde la Ejecutiva socialista, la eurodiputada Iratxe García ha considerado la de Sánchez como una decisión "acertada, valiente y adecuada en este momento" y ha asegurado que los socialistas están "preparados": "Este presidente es lo mejor que tiene en estos momentos el país y por eso estamos optimistas y positivos de cara a los próximos comicios electorales". Los socialistas creen que el adelanto electoral es una decisión "táctica y estratégica" y creen que el resultado del 28M "no es un palo excesivo para remontar en las generales".
Poco antes del anuncio de Sánchez, fuentes de Ferraz decían que no pondrían "paños calientes" a su derrota, pero recordaban que el PSOE ha perdido 400.000 votos desde el 2019 y se ha quedado a tres puntos porcentuales del PP. Y recalcaban que en muchas capitales de provincia han perdido la Alcaldía por un solo concejal. "Los ciudadanos nos dan un aviso, pero no estamos en la lona", añadían. Y es que el PSOE no ha caído tanto, de hecho ha subido en algunos lugares, como en la Comunidad Valenciana, donde Ximo Puig ha mejorado los resultados de 2015 y 2019 que le llevaron a la presidencia. Sin embargo, la caída en el resto de partidos de izquierda, sobre todo en Podemos, ha hecho imposible la suma para gobernar.
También, fuentes de La Moncloa han destacado la "valentía" de Sánchez por asumir "en primera persona" los resultados e ir "a por todas". Destacan igual que él los compromisos llevados a cabo en esta legislatura y coinciden en que "hay que clarificar proyectos y liderazgos en el país" para que los españoles "digan si quieren un gobierno del PP con la extrema derecha".
Hasta ahora, Sánchez había abogado por agotar la legislatura en diciembre con sus socios de coalición, Unidas Podemos. Lo hizo cada vez que surgía una crisis entre ambas formaciones por discrepancias en diversas cuestiones, como la ley de vivienda, el aumento del gasto en defensa o la ley del ‘solo sí es sí’.
En este tiempo, algunos ‘barones’ socialistas incluso habían reprochado la alianza con los ‘morados’. Llama la atención que Castilla-La Mancha sea el territorio que haya aguantado el tipo con la victoria absoluta de Emiliano García-Page, el barón más crítico con Pedro Sánchez y con el que menos ha estado el jefe del Ejecutivo en actos de campaña.
Tras las elecciones, el PSOE extremeño, donde Guillermo Fernández Vara pierde el poder, ha criticado un mensaje muy “errático” por parte de Sánchez al llevar la campaña “al ámbito nacional”, con una serie de anuncios como presidente del Gobierno que no ha habido tiempo de “digerir”. Creen además que los resultados son un "castigo" al presidente del Gobierno. Estas fuentes se pronunciaron poco antes del anuncio de Sánchez y apuntaban a que veían “difícil” remontar de aquí a unas generales en noviembre, que finalmente serán en julio.
Cabe recordar además que los socialistas han sido muy criticados en campaña por el apoyo de Eh-Bildu al Ejecutivo central tras la inclusión de 44 condenados de ETA en las listas abertzales y por los presuntos fraudes electorales por compra de votos por correo en distintos territorios que han salpicado a candidatos socialistas.