El adelanto electoral anunciado por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, hace que los comicios se celebren en plena Presidencia española del Consejo de la Unión Europea. Algunos diplomáticos temen que esta situación eclipse la Presidencia española, según informan fuentes comunitarias a TVE.
España asumirá la Presidencia de turno del Consejo de la UE el próximo 1 de julio, a solo 22 días de las elecciones generales del 23 de julio. Aunque el Gobierno lleva semanas preparando la Presidencia de seis meses y los diplomáticos ya conocían que se celebrarían comicios nacionales en diciembre -al final del mandato europeo-, el anuncio ha pillado por sorpresa a muchos en Bruselas.
Diferentes fuentes europeas coinciden en que el adelanto electoral y un posible relevo en el Palacio de la Moncloa podría complicar la gestión de la Presidencia.
Miedo en Bruselas a que la campaña contamine la Presidencia
Diplomáticos de diferentes países en Bruselas han recibido la noticia del adelanto electoral con sorpresa. Tienen miedo de que España pase de estar totalmente centrada en la Presidencia a llevarla a un segundo plano por la campaña electoral, porque una Presidencia europea "tiene que seguir funcionando al 100%", según informa la corresponsal de TVE en Bruselas, Marta Carazo.
Además, algunos diplomáticos destacan la posibilidad de que pueda haber un cambio de presidente en España, algo que podría "desdibujar las prioridades españolas", aunque admiten que la Presidencia española es una "maquinaria bastante práctica, no tan política, que va a funcionar haya un gobierno u otro".
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La primera consecuencia de la disolución del Parlamento es que queda en suspenso la aprobación de las prioridades de España para los seis meses de la Presidencia rotatoria de la UE. No obstante, la Presidencia de la UE no es una presidencia del Gobierno, sino de país, y el principal papel de quien ostenta el cargo es no tanto dirigir, como servir de árbitro para lograr cerrar cuantos más expedientes estén en trámite.
Otros diplomáticos creen que el hecho de que las elecciones se celebren cinco meses antes de lo esperado "es lo mejor que puede pasar" porque para una Presidencia europea es necesario un gobierno estable. Opinan que "la contaminación habría sido peor si las elecciones hubieran sido en diciembre", según la corresponsal.
Fuentes diplomáticas españolas han afirmado a la agencia Efe que los equipos formados en Madrid y Bruselas para la Presidencia española siguen con "el trabajo y compromiso" para desarrollar sus funciones propias, al margen del adelanto de las generales.
Una agenda complicada
Y es que Sánchez tendrá compromisos ineludibles que cumplir una vez España asuma la Presidencia del Consejo de la UE, que coincidirá con la campaña electoral, que arrancará el 7 de julio. El presidente del Gobierno tendría ya comprometidos al menos cinco días de las dos semanas de campaña electoral, aunque en algunos casos podrá apurar los tiempos y participar en algún mitin en la misma jornada.
La primera cita obligatoria en la agenda del semestre español será la comparecencia de Sánchez ante el Parlamento Europeo en Estrasburgo. Su intervención debería producirse el 13 de julio, justo después de participar en la cumbre de la OTAN, prevista para el 11 y 12 de julio en Vilna, en Lituania.
Asimismo, en los primeros días de julio, el colegio de comisarios, con su presidenta a la cabeza, Ursula von der Leyen, se desplazará a Madrid, como es habitual cada vez que hay un relevo al frente del Consejo de la Unión Europea.
Sánchez también tendrá tiempo para encabezar antes de los comicios una de las citas más importante del semestre: a cumbre entre la UE y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), la primera desde 2015.
Además, después de asistir a la cumbre de la OTAN, todos los ministros deben presentarse ante la Eurocámara en su sede en Bruselas del 17 al 21 de julio para explicar las responsabilidades de sus respectivas carteras.
Situaciones similares en otros países
La celebración de elecciones durante el mandato al frente de la UE ya estaba contemplada y se había dado en otras ocasiones, ya que otros países también han celebrado comicios durante su semestre al mando.
Las elecciones que otorgaron un segundo mandato al presidente francés, Emmanuel Macron, tuvieron lugar en plena presidencia francesa del Consejo de la UE. El Gobierno francés, que asumió esta posición el 1 de enero de 2022, optó por aglutinar la mayor parte de eventos y reuniones de ministros de la UE en los primeros meses de la Presidencia, antes de unas elecciones celebradas en abril.
Para encontrar un caso similar hay que remontarse a octubre de 2011, cuando Polonia celebró comicios parlamentarios coincidiendo con su Presidencia de turno de la UE, que había asumido el 1 de julio. Ninguna de las dos elecciones en Francia y Polonia derivaron en un cambio de Gobierno, por lo que el Ejecutivo pudo proseguir en ambos casos con la Presidencia de la UE que había organizado anteriormente.
Asimismo, hay precedentes en cuanto al cambio de Gobierno en mitad de una presidencia, como podría ocurrir en España en caso de que el PP se imponga al PSOE en la nueva cita electoral.
El 1 de enero de 2009, República Checa asumió la Presidencia con Mirek Topolanek (Partido Democrático Cívico, ODS, centr-derecha) al frente del Gobierno, pero tras perder una moción de censura, tuvo que ceder el testigo al independiente Jan Fischer el 8 de mayo.
Por su parte, Bélgica ejerció toda su Presidencia en 2010 con un Gobierno interino ante la imposibilidad de formar un Ejecutivo. El país estuvo sin Gobierno durante 541 días, pero no le impidió que el país ejerciera una Presidencia que fue calificada de exitosa.