El Kremlin ha dado por finalizada la movilización parcial de 300.000 reservistas decretada el pasado mes de septiembre por el presidente ruso Vladímir Putin para reforzar al Ejército ruso en la 'operación militar especial' en Ucrania. En total, son 82.000 los reservistas enviados al territorio ocupado, ha informado Serguéi Shoigú, ministro de Defensa ruso, a Putin durante una reunión ofrecida por la televisión pública. "De ellos, más de 41.000 combaten en el seno de unidades", ha precisado.
El resto, 218.000, permanecen en formación en distintas bases militares de Rusia. "La edad media de los ciudadanos movilizados es de 35 años", ha apuntado Shoigú. Entre los movilizados, todos hombres, figuran más de 1.300 funcionarios y más de 27.000 empresarios, autónomos y emprendedores. "Otros 13.000, sin esperar recibir la convocatoria, expresaron su deseo de cumplir con su deber y fueron enviados en calidad de voluntarios", ha señalado.
La movilización anunciada por el dirigente ruso provocó el éxodo de miles de rusos en edad militar. La capital, Moscú, había suspendido ya hace dos semanas la leva.
"El envío de ciudadanos convocados para la movilización se ha completado hoy. Se detuvo la notificación de ciudadanos. No se planean tareas adicionales", ha precisado el titular de Defensa ruso, tal y como ha informado la agencia de noticias Interfax.
Según el Estado Mayor de Ucrania, Rusia ya ha comenzado a fortalecer sus unidades en Jersón, con otros 1.000 militares movilizados. Estas tropas se están instalando en las casas de los residentes locales que abandonaron los territorios ocupados, ha indicado el portavoz Oleksandr Shtupun.
Además, el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha expresado este viernes sus dudas sobre la declaración de Rusia, diciendo que el pobre rendimiento de las fuerzas pro-Moscú significa que podrían necesitarse más hombres. "Muy pronto Rusia puede necesitar una nueva oleada de personas para enviar a la guerra", ha indicado Zelenski en un discurso por vídeo.
Rusia continuará reclutando tropas solo aceptando voluntarios y candidatos para el servicio militar bajo contrato.
Putin reconoce errores durante la movilización
Vladímir Putin ha subrayado que la prioridad a día de hoy es adiestrar y equipar a los movilizados "para que esa gente se sienta más segura si les toca participar en acciones militares". "Quiero agradecerle a todo aquel que se ha alistado en las Fuerzas Armadas. Quiero decir gracias por la lealtad, el patriotismo, por el firme convencimiento de defender a nuestro país, a nuestra Rusia, es decir, su casa, su familia, nuestros ciudadanos, nuestra gente", ha dicho.
Al mismo tiempo, el dirigente ruso ha admitido dificultades y problemas durante la movilización, aunque los ha considerado "inevitables", ya que en Rusia hacía "mucho tiempo" que no se llevaba a cabo una movilización, en alusión a la Gran Guerra Patria contra la Alemania nazi (1941-45).
Putin admitió en su momento "errores" que van desde el reclutamiento de padres de familia numerosa, personal sanitario, discapacitados y personas enfermas, así como hombres que no cumplieron el servicio militar, uno de los requisitos contemplados en el decreto presidencial.
El presidente también ha considerado que la experiencia acumulada durante la actual campaña militar en Ucrania obliga a introducir reformas, tanto del Ejército como en el sistema de alistamiento. Le ha dado de plazo a Shoigú hasta diciembre para que le presente las propuestas para la reforma del Ejército, que ha sufrido en los últimos dos meses varios reveses en Ucrania, que le han obligado a replegarse en varias zonas del Donbás y el sur del vecino país.