El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha llamado a “frenar cuanto antes” los ataques de Rusia a Ucrania porque, más allá de los agentes implicados en el conflicto, se trata de “un ataque frontal a los principios y valores de Europa”, en particular al de la “paz”. Sánchez ha acusado al presidente ruso, Vladimir Putin, de cometer una "violación flagrante" del Derecho Internacional y ha advertido de que esto "no debe quedar impune". España, ha asegurado, defenderá la legalidad internacional, se "desvivirá por el restablecimiento de la paz y se mostrará solidaria con las poblaciones afectadas".
Sánchez ha hecho una declaración institucional en La Moncloa tras participar en la reunión extraordinaria del Consejo de Seguridad Nacional, que ha durado unas dos horas y media y ha estado presidida por el rey Felipe VI. Precisamente, el rey ha cancelado su agenda tanto de este jueves como del viernes. Igualmente, el Gobierno ha cancelado, dados los últimos acontecimientos, el homenaje al pueblo de La Palma y la Conferencia de Presidentes que iba a celebrarse allí el viernes.
En esta reunión han participado las vicepresidentas del Goberno, los ministros de Defensa, Exteriores y Transportes, así como el Jefe del Estado Mayor de la Defensa (JEMAD) y la presidenta del Centro Nacional de Inteligencia (CNI).
Según ha sabido TVE, el Ejecutivo descarta enviar tropas a Ucrania “como país”, pero no lo descarta si se trata de una acción “conjunta” con la OTAN, que sin embargo no lo contempla por el momento.
14 Horas - Sánchez: "Es un ataque injustificado y brutal" - Escuchar ahora
"Una potencia nuclear ha violado la legalidad internacional"
El presidente ha iniciado su intervención con una condena “rotunda y total” ante las “inaceptables acciones militares” de Putin, unos hechos que, si bien son “muy graves”, son “muy simples a la vez”: “Una potencia nuclear ha violado la legalidad internacional y ha comenzado una invasión a un país vecino”.
Y ha avanzado que se trata de una crisis que afectará más allá de los países involucrados, con “consecuencias de gran alcance” internacional. Por eso, ha recordado las palabras del presidente de la ONU, Antono Guterres, pidiendo a Putin retirar las tropas y frenar el conflicto.
“Estamos comprometidos con la paz, pero si queremos que sea efectiva, debemos frenar cuanto antes esta agresión”, ha advertido el jefe del Ejecutivo, que ha defendido el primer paquete de sanciones aprobado por la UE contra Rusia y que “persigue que cesen los primeros ataques de Putin”. Unas sanciones, ha dicho, con las que pretenden demostrar a Putin que estas agresiones “no deben quedar impunes”.
Avisa de que habrá un "impacto económico" en España
Pero Sánchez ha advertido también de que este conflicto “va a tener un impacto económico” en España y en la UE, “especialmente en los mercados energéticos” (Europa depende en buena parte del gas que proviene de Rusia). “Tomaremos cuantas medidas sean necesarias para mitigar el impacto económico, también el energético, sobre la sociedad española”, ha prometido.
Sánchez, que viajará por la tarde para participar en el Consejo Europeo extraordinario ha dicho: “Estamos en contacto desde hace muchas semanas con nuestros socios y aliados para dar una respuesta coordinada y de unidad ante esta crisis”. También, ha dicho que España es “solidaria” con los pueblos agredidos y ha dicho que la mejor forma de “socorrer” desde la Unión Europea es “con la ayuda financiera”, con inversiones y con material sanitario.
Y tras participar en el Consejo Europeo, ha confirmado que el próximo miércoles comparecerá a las 09.00 en el Congreso para explicar el contenido del mismo. “La posición de España es muy clara”, ha aseverado. Ha apoyado “hasta el extremo” la vía diplomática para evitar “la escalada bélica”. “A la vez, hemos recalcado junto con Europa que no aceptaríamos una agresión injusta, injustificada y que las sancionaríamos”, ha añadido.
Por ello, ha lanzado un mensaje “claro” y “nítido” al gobierno de Putin: “Reclamar que ponga fin de inmediato a las hostilidades, que revoque el reconocimiento de independencia” de las dos regiones al este de Ucrania (Lugansk y Donetsk) y que “cumpla con sus compromisos” con los acuerdos de Minsk.
Por último, ha dicho que “hoy se abre ante España y ante toda la UE dos caminos”, el de la paz y la legalidad internacional, o el de “la fuerza ilegítima que solo aboca al desorden mundial y a la inseguridad”. “Nosotros somos un país, una democracia, una unión comprometida con los valores de la paz, la legalidad internacional y la solidaridad”, ha concluido.
“Quedan más de 320 españoles en Ucrania con los que se mantiene el contacto“
El Gobierno contabiliza que quedan algo más de 320 españoles en Ucrania, con los que mantienen el contacto y que podrán retornar siempre que deseen y sea posible. La mayoría de ellos, dicen, no quiere volver a España como sí otro centenar que lo ha ido haciendo en las últimas horas.
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Por otra parte, en el Ejecutivo ven la situación como "muy preocupante" y dicen que hay "mucha confusión" porque hay "informaciones contradictorias" que están tratando de comprobar con los aliados. Está habiendo "contactos a todos los niveles" sobre esta crisis. También con la oposición, que está informada.
Además, desde hace un mes, todos los días se ha reunido la célula de coordinación (con todos los ministerios implicados) y, desde que estalló la crisis, se ha ido reuniendo el comité de situación y se ha ido obteniendo información sobre los acontecimientos en "tiempo real", lo que consideran útil.
Los partidos condenan de forma unánime los ataques de Rusia
En España la condena al ataque de Rusia es unánime no solo en el Gobierno de coalición sino entre los distintos partidos políticos, cuyos miembros se han pronunciado, sobre todo, en Twitter, para expresar también su solidaridad con el pueblo ucraniano.
Desde el Ejecutivo, Yolanda Díaz (vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo), José Manuel Albares (Exteriores), y Alberto Garzón (Consumo) han condenado respectivamente una agresión "intolerable", "injustificable" e "imperialista". También Ione Belarra (Derechos Sociales) ha dicho que "la guerra nunca es el camino". Y tanto ellos como la oposición han mostrado también su solidaridad con el pueblo ucraniano.
Entre Unidas Podemos se ha repetido el lema de "no a la guerra", como ocurriera con la guerra de Irak. "Quiero expresar mi rotunda condena al ataque ruso contra Ucrania. La Paz es el camino. No a la guerra. Reclamamos el fin inmediato de este conflicto armado. Rusia ataca Ucrania", ha dicho en Twitter el diputado Juan López de Uralde.
Entre la oposición, Pablo Casado, todavía presidente del PP, e Inés Arrimadas (Cs) han ofrecido su "respaldo" a Sánchez. Casado ha pedido una "respuesta coordinada con la UE y la OTAN". La líder naranja, por su parte, ha pedido en la misma línea "una respuesta contundente, coordinada e inteligente de la UE": "Pido a Sánchez que la voz de España sea fuerte, decidida y decisiva en toda la respuesta coordinada que se deberá hacer ante esta agresión".
El único líder nacional que no se ha pronunciado es Santiago Abascal, pero su formación, Vox, ha mostrado en su cuenta de Twitter su "condena contundente del ataque militar". Ha ido acompañada de una crítica: "No hay que dejar de señalar el fracaso y la irresponsabilidad de la Comisión Europea. España debe exigir que Rusia detenga los ataques y avalar la solución diplomática del conflicto".
Íñigo Errejón (Más País), ha apostado por "una respuesta proporcionada y autónoma de la UE, que trabaje por una desescalada del conflicto y por reducir los daños sobre la población civil". Y ha pedido a España acoger refugiados. Algo similar a lo que ha pedido Joan Baldoví (Compromís), que ha señalado que no hay que "ir a remolque de lo que digan los EEUU" sino hacer "una apuesta decidida por medidas diplomáticas".
Aitor Esteban (PNV) ha dicho que "no podemos hacer como si no pasara nada" y que Europa debe "replantear su estrategia de defensa". Por último, Miriam Nogueras (JxCat) ha dicho que "la tiranía de Putin debe ser duramente sancionada" y ha pedido "unanimidad" para ello: "Un conflicto armado es preocupante, grave e inaceptable en el siglo XXI".