Las personas vacunadas con una sola dosis de la vacuna de Pfizer contra el coronavirus podrían generar una respuesta inmune más reducida frente a las variantes británica y sudafricana.
Así lo han sugerido los resultados de una investigación dirigida por el Imperial College de Londres, que han revelado que, en comparación, las personas que han recibido un solo pinchazo y, además, han pasado la COVID-19, han desarrollado una mayor protección contra estos dos grupos de mutaciones.
Una dosis para quienes han pasado la COVID-19
El estudio ha analizado la inmunidad generada contra las dos nuevas variantes británica y sudafricana por los trabajadores sanitarios británicos vacunados con el primer pinchazo de la vacuna Cominarty, basada en ARNm y desarrollada por Pfizer y BioNTech. Su objetivo era conocer la respuesta de las células T y B después de la inoculación de una única dosis en dos grupos diferenciados: con y sin infección previa del SARS-CoV-2 de Wuhan.
"El despliegue de la vacuna contra el SARS-CoV-2 ha coincidido con la propagación de variantes preocupantes", han justificado los autores del estudio publicado en la revista Science. Y han destacado que, en las personas que ya se contagiaron de coronavirus (fuera de la variante que fuera), solo la primera dosis aumenta sustancialmente las respuestas de anticuerpos neutralizantes contra otros grupos de mutaciones.
Según la estrategia de vacunación de España, las personas menores de 65 años que ya hayan pasado la COVID-19 en los últimos seis meses recibirán solo la primera dosis de una de las vacunas cuya pauta completa sea de dos. Así, atendiendo a las conclusiones de este nuevo estudio, con el suero de Pfizer podrían estar también protegidos contra las variantes británica y sudafricana.
Y es que las autoridades sanitarias permanecen atentas a la eficacia de las vacunas contra las variantes que han desplazado a la original, conocida en China. Según la evidencia recogida hasta ahora por el Centro del Control de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES) del Ministerio de Sanidad y la Organización Mundial de la Salud, la eficacia de las vacunas se reduciría "ligeramente" para la variante británica.
En cambio, las variantes brasileña y sudafricana es "probable" que puedan escapar de la respuesta inmune provocada por haber pasado la enfermedad o haber sido vacunado. Este riesgo está especialmente asociado a la variante sudafricana, por lo que la comunidad científica y las farmacéuticas permanecen atentas y trabajando por si fueran necesarios nuevos desarrollos para acabar con ella.