El líder de Vox, Santiago Abascal, ha responsabilizado al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, de los disturbios producidos este miércoles en Vallecas durante el acto de presentación de la campaña de Rocío Monasterio para las elecciones del próximo 4 de mayo en la Comunidad de Madrid. Interior, sin embargo, ha defendido que el dispositivo policial diseñado para garantizar la seguridad fue el "acorde". El mitin se saldó con cuatro detenidos -tres menores- y 35 heridos, la mayoría policías.
"Marlaska es directamente responsable de todas las agresiones que se produjeron. Montó un dispositivo policial gigantesco que no se usó como es debido", ha criticado el presidente de Vox en entrevistas en Antena 3 y TeleCinco.
Abascal ha denunciado que sus dirigentes y simpatizantes fueron "acosados, agredidos e insultados" a "tan solo 18 metros de distancia". Y ha asegurado que él mismo recibió el impacto -"hoy tengo la cara dolorida"- de una botella de plástico llena de líquido; a la vez que ha mostrado un adoquín recogido de la plaza de Vallecas donde celebraron el acto.
El líder de Vox ha insistido en que los efectivos de la Policía Nacional tenían órdenes de "no actuar" para impedir esos "ataques" a Vox y sus seguidores sufrieron el lanzamiento de "botellas y adoquines" que, según ha denunciado, podían incluso haber matado a alguien en el caso de haber impactado en una de sus cabezas.
También ha acusado al exvicepresidente del Gobierno y candidato de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, de "criminal" y "mentiroso patológico" por acusarles de acudir a Vallecas a provocar. De hecho, ha señalado a Unidas Podemos como responsable del acoso a Vox y también a PSOE y Más Madrid, que firmaron un manifiesto contra ellos.
Interior: el dispositivo fue "el adecuado"
Tras estas acusaciones, Fuentes de Interior han asegurado que el dispositivo policial desplegado en la plaza de la Constitución- conocida como Plaza Roja- para garantizar tanto la seguridad de los asistentes a una concentración de antifascistas como los que acudieron al mitin de Abascal fue el "acorde" dadas las circunstancias "complejas".
Unas 500 personas se concentraron contra el acto de Vox al que asistieron unos 350 simpatizantes. Desde Interior rechazan las actitudes de quienes no siguieron las pautas de los agentes que velaban por su seguridad y que pusieron en riesgo el trabajo y la integridad de los propios agentes. Durante el acto, Abascal abandonó el atril en dos ocasiones para encararse con los manifestantes, lo que tensó aún más la situación.
Sin embargo, desde el sindicato policial JUPOL no comparten que el dispositivo diseñado fue el adecuado. En un comunicado, han criticado la falta de previsión y dotación de medios ante una "concentración que se preveía extremadamente violenta" y que, en su opinión, contó con un 40% menos de funcionarios de los necesarios.
JUPOL ha mostrado su indignación y "profundo malestar" por los sucesos ya que era previsible que el acto fuera contraprogramado con "extrema violencia" y ha llegado a preguntarse si Interior "busca un muerto entre los agentes".
Aparte de los disturbios durante el mitin de Vox, la sede del Orgullo Vallekano LGTBI fue vandalizada el jueves con simbología fascista y mensajes homófobos, según ha comunicado la entidad a través de sus redes sociales. Orgullo Vallekano enmarca el ataque dentro de "la consecuencia de los mensajes de odio de la ultraderecha".
Robles, Casado y Arrimadas condenan la violencia
Las críticas a los incidentes violentos siguen produciéndose este jueves en la esfera política. La ministra de Defensa, Margarita Robles, ha afirmado que "ningún tipo de violencia tiene cabida" durante un acto con la ministra de Sanidad, Carolina Darias, en Getafe (Madrid): "Aspiramos a una sociedad tolerante, en convivencia y en la que cada uno pueda tener sus ideas respetando a los demás".
Robles, Casado y Arrimadas condenan los disturbios en Vallecas durante un acto de Vox
"Cualquier piedra arrojada sobre un demócrata la sufrimos los demás", ha asegurado por su parte el líder del PP, Pablo Casado, en un acto de la Fundación Concordia y Libertad, perteneciente al Partido Popular.
El líder de la oposición ha mostrado su preocupación por que "haya partidos que forman parte del Gobierno de España que justifiquen y alienten estos ataques inaceptables en cualquier Estado democrático", en alusión a Podemos.
Ha asegurado Casado que también el PP ha vivido agresiones en Puente de Vallecas y que los diputados autonómicos tuvieron que salir de algún pleno de la Asamblea de Madrid, que se ubica en este distrito, "escoltados".
Además, ha reclamado que el Gobierno dote a los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado de medios materiales y personales "para que no se encuentren como ayer, en el que algún cafre quitó el casco a un policía nacional y empezó a golpearle".
La candidata número 3 del PP a la Asamblea de Madrid, Ana Camíns, ha condenado el acoso contra cualquier partido democrático y ha exigido al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, el cese inmediato de los ministros de Unidas Podemos que justifican la violencia. En su opinión, tras los comentarios que han hecho en redes sociales ministros como Alberto Garzón, Irene Montero o Ione Belarra, "no pueden seguir ni un minuto más cobrando sueldos públicos mientras sigan justificando la violencia".
También la líder de Cs, Inés Arrimadas, ha rechazado los incidentes "absolutamente intolerables" que se produjeron el miércoles. "Unas imágenes violentas que condenamos absolutamente, sin excusas ni justificaciones como hacen otros", ha subrayado. A continuación, ha afirmado que Madrid no debe ser noticia por estos hechos, sino "por su emprendimiento, su capacidad tecnológica, la atracción de talento y de inversiones, sus servicios públicos y las oportunidades" que ofrece.