Esta jornada electoral en Cataluña se recordará como la más atípica de las celebradas hasta ahora debido a la pandemia de coronavirus, lo que ha provocado el incremento de las medidas sanitarias pero también circunstancias inéditas y algunas anécdotas curiosas.
Una de las imágenes más llamativas ha sido ver a los miembros de las mesas de votación con equipos de protección individual (EPI) durante el escrutinio. Unos EPI con los que se han pertrechado durante la franja horaria de las 19:00 a las 20:00 horas, que era la reservada para que pudieran votar los positivos con COVID-19 y aquellos que están en cuarentena por ser contacto estrecho de un contagiado.
Pero también ha habido novedades en cuanto a la ubicación de urnas en espacios poco habituales, como plazas de toros, campos de fútbol o iglesias, buscando mayor amplitud para garantizar la seguridad de votantes y miembros de las mesas y evitar aglomeraciones.
El Camp Nou, el estadio del FC Barcelona, ha sido uno de esos recintos utilizados como colegio electoral, lo que ha deparado la paradoja de que algunos seguidores madridistas hayan tenido que votar en casa del 'eterno enemigo'. "A mí me hace ilusión venir a votar aquí, pero acabo de hablar con uno que es del Real Madrid que no le hacía tanta", ha comentado a Efe uno de los electores. "Tengo un yerno que si tiene que venir aquí a votar no viene", ha señalado una mujer a TVE.
Algo parecido ha sucedido en las iglesias habilitadas para la votación, donde algunos ateos y agnósticos han tenido que entrar en el templo para ejercer su derecho, como en la iglesia de Santa Bárbara de Súria. O con los antitaurinos que hayan tenido que votar en la plaza de toros de Tarragona, aunque muchos de los electores han alabado "lo espacioso" del recinto.
También se han ubicado urnas en mercados municipales, teatros, pabellones polideportivos y hoteles. En total hay 83 nuevos puntos de votación respecto a las elecciones de 2017.
Montilla: "Somos muchos suplentes ejerciendo hoy de titulares"
Otra de las sorpresas de la jornada se la han llevado los votantes del colegio Les Escoles de Sant Just Desvenr (Barcelona), al ver al expresidente de la Generalitat José Montilla presidiendo una de las mesas electorales.
Montilla, de 65 años, había recibido la notificación de que era suplente, pero ha tenido que asumir las funciones al no presentarse el presidente de mesa. "Somos muchos suplentes los que hoy estamos ejerciendo de titulares", ha afirmado Montilla a TVE.
La misma resignación de otros ciudadanos que han tenido que asumir esa tarea ante las numerosas ausencias y se han convertido en imprescindibles. "No se ha presentado la persona que estaba de titular y me ha tocado", señala un joven.
En total, las juntas electorales han admitido más de 22.000 de las 34.000 alegaciones que se han presentado para formar parte de las mesas, aunque finalmente se han podido conformar el 100% de las mismas.
Largas colas, lluvia inesperada y Batman en el colegio electoral
Las medidas de seguridad en los colegios han ralentizado la votación y han provocado largas colas a las puertas, una circunstancia que ha resultado especialmente molesta debido a la lluvia que de forma inesperada ha hecho acto de presencia. A ello se ha unido la imposibilidad de ubicar paragüeros en los centros electorales, debido a los distintos recorrido de entrada y salida.
Algunos votantes no han querido dejar pasar la ocasión de celebrar a su manera el carnaval, a pesar de que la fiesta no se ha podido llevar a cabo por la pandemia. Así, en la escuela Ramón y Cajal de Terrassa (Barcelona) se ha podido ver a un elector vestido de Batman mientras que en Solsona (Lleida) un grupo de vecinos ha acudido con las tradicionales batas de carnaval.
Más llamativo ha sido un presidente de mesa de un colegio de Tarragona que ha aparecido vestido de payaso, pero no para celebrar el carnaval sino porque en su opinión todo lo que rodea a estos comicios "es un circo".
Sabotaje de dos repetidores y protesta de Femen contra Vox
Anécdotas aparte, apenas ha habido que destacar incidentes. El más grave han sido los actos vandálicos que se han producido en el centro emisor de Rocacorba (Girona) y en el centro repetidor de Cubélls (Lleida), horas antes de la apertura de los colegios electorales, y que han afectado a las emisiones de RTVE, cuyos servicios ya están restablecidos.
RTVE ha condenado estos sabotajes que "han intentado comprometer las telecomunicaciones en plena jornada electoral" en Cataluña.
También hay que señalar la protesta que han llevado a cabo cinco activistas de Femen durante la llegada del candidato de Vox, Ignacio Garriga, a su colegio electoral en Barcelona.
Las mujeres han exhibido pancartas con el lema "No es patriotismo, es fascismo" y el lema "Fascistas fuera de las urnas", escrito con tinta negra en el torso desnudo. El presidente de Vox, Santiago Abascal, ha condenado la protesta y ha asegurado que durante toda campaña "se han permitido y alentando delitos electorales" contra su partido.