El Departamento de Salud de la Generalitat de Cataluña ha propuesto un plan de apertura progresiva de actividades, que afectará a la Navidad durante la pandemia de coronavirus. Así, en estas fiestas, las reuniones no podrán ser de más de 10 personas y de dos grupos de convivencia habituales, mientras se mantiene el toque de queda nocturno y el cierre perimetral autonómico.
Es la primera Comunidad Autónoma que plantea una "desescalada" similar a la pautada antes de verano, aunque desde el Govern han rechazado referirse a ello en estos términos, sino como "retorno progresivo" de la actividad. En cualquier caso, el Ejecutivo catalán se ha adelantado también al resto del Estado para apuntar cómo serán las restricciones más allá del 9 de diciembre.
El plan se estructura en cuatro tramos o escenarios, que se revisan cada 15 días y, en las primeras fases, las reuniones privadas deben ser de máximo 6 personas sin contar convivientes.
La relajación paulatina de las restricciones empezará el lunes 23 de noviembre con la reapertura de bares y restaurantes hasta las 21:30 horas, con el 30 % de su aforo en interior y sin restricciones en terraza. En cambio, teatros, cines y salas de concierto podrán reabrir al 50 %, como lo harán las instalaciones deportivas al aire libre. Los comercios de más de 800 metros cuadrados no podrán superar un aforo total del 30%.
Reuniones navideñas con máximo 10 personas y sin salir de noche
Para hacerse una idea de cómo serán las fiestas de Navidad en Cataluña tenemos que fijarnos en el tercer tramo de esta desescalada que comenzará el 21 de diciembre si la situación epidemiológica lo permite. No será hasta dicha fase cuando las reuniones sociales se amplíen de 6 a 10 personas.
El toque de queda nocturno, establecido actualmente entre las 22:00 horas y hasta las 6:00 horas, se mantendrá durante los cuatro tramos, que se alargan hasta enero, por lo que incluye el Fin de Año, que se tendrá que celebrar en casa.
Desplazamientos por Navidad
A partir del tercer tramo la movilidad ya será libre, por lo que serán posibles desplazamientos por Navidad. El cierre perimetral de Cataluña durante la semana se mantiene en las primeras dos fases, pero se levantará en la tercera, prevista para el 21 de diciembre.
Mientras, el cierre perimetral del fin de semana se irá ampliando durante este periodo: será un cierre municipal en el primer tramo (del 23 de noviembre a 6 de diciembre) y comarcal en el segundo (del 7 al 20 de diciembre).
¿Qué hay de las compras?
Las compras en tiendas de barrio y centros comerciales serán posibles esta Navidad, aunque con restricciones en el aforo. En el comercio se ampliará la capacidad permitida del 30 al 50% a partir del segundo tramo de la desescalada, que comenzaría el 7 de diciembre.
Si la situación epidemiológica continúa siendo positiva, finalmente los centros comerciales podrán abrir a lo largo de todo diciembre, aunque deberán respetar también las limitaciones de aforo y otras medidas de seguridad.
Restricciones a los actos religiosos y de empresa
Durante todo el periodo, según la propuesta de Salud, los congresos, convenciones, ferias de empresas y actividades similares quedan prohibidas. Asimismo, los actos religiosos tendrán que respetar un aforo del 50% durante las Navidades y el Fin de Año.
A partir del cuarto tramo de la apertura, esto es, el 4 de enero, el bachillerato y los ciclos formativos recuperarán el 100 % de la presencialidad. Se retomarán igualmente las clases extraescolares y las actividades educativas de ocio.
El vicepresidente del Govern con atribuciones de presidente en funciones, Pere Aragonès, ha hecho un llamamiento a la responsabilidad de la ciudadanía con el anuncio del levantamiento de las medidas: "Este inicio de apertura debe ir acompañado de toda la responsabilidad que ha demostrado la ciudadanía hasta el momento".
Además, ha avisado de que si los datos epidemiológicos no lo permiten, Cataluña no pasará al siguiente tramo e incluso cabe la posibilidad de que se retroceda de estadio, si es necesario.