La Generalitat de Cataluña ha decidido este jueves prorrogar diez días más, hasta el 23 de noviembre, el cierre de bares y restaurantes en toda la región, así como el cierre perimetral de la región, y mantiene también el confinamiento municipal de los fines de semana y el toque de queda, aplicado para hacer frente a la segunda ola del coronavirus.
"Hemos prorrogado las medidas actuales hasta el 23 de noviembre", ha explicado en rueda de prensa la consellera de Salud, Alba Vergés, pues ha asegurado que Cataluña está "en el pico de la presión asistencial en los hospitales y las UCI", por lo que se hace necesario hacer "un esfuerzo más".
14 horas - Cataluña prolonga diez días el cierre de bares, restaurantes, cines y teatros - Escuchar ahora
La prórroga de diez días, que ha sido acordada en el comité técnico del Plan de Emergencias de Protección Civil de Cataluña (Procicat), también afecta a restricciones de otros sectores, como el cierre de teatros, cines y gimnasios, que aplicó el Govern hace dos semanas.
Además, se ha acordado establecer una limitación en 100 personas en los centros de culto, que se añade a la reducción del aforo al 30 %, para evitar situaciones como la que se produjo este pasado fin de semana con la presencia de unas 600 personas en un acto de beatificación en la Sagrada Familia de Barcelona.
Sin embargo, el Procicat, ha decidido flexibilizar las medidas de cierre en los centros de estética, que podrán abrir de manera individual. En cuanto a los centros de culto, no podrán superar las 100 personas, ha afirmado Vergés.
El fin: "Rebajar el número de ingresados en las UCI"
El secretario de Salud Pública, José Maria Argimon, ha explicado que esperan que estos 10 días de prórroga "sirvan para rebajar el número de ingresados en las UCI catalanas".
Según Argimon, "se están estabilizando las hospitalizaciones" en Cataluña, si bien "ahora hay 600 camas de UCI ocupadas". "Dentro de diez días no vamos a salir con unos indicadores extraordinarios. Tendremos que seguir conviviendo con el virus", ha reconocido.
La consellera de Salut ha añadido que están "convencidos" de que con estas medidas adoptadas este jueves se podrá evitar "el confinamiento domiciliario en Cataluña" y ha avanzado que van a trabajar para que a partir del 23 se pueda hacer la desescalada "poco a poco".
Por su parte, el consejero de Interior, Miquel Samper, ha advertido de que el toque de queda ha llegado para "quedarse bastante tiempo", y ha planteado que podría ampliarse los confinamientos municipales a áreas más amplias como las regiones sanitarias o provincias.
Desescalada progresiva a partir del día 23
El resto de restricciones aplicadas en Cataluña, como el cierre perimetral de la comunidad, el toque de queda y los confinamientos municipales durante los fines de semana, siguen en vigor.
A partir del próximo 23 de noviembre, el Govern pondrá en marcha un plan de desescalada progresiva, en diálogo con todos los sectores afectados, ha asegurado Vergés. Este plan se iniciará con las actividades que comporten menor riesgo, probablemente abriendo las terrazas de los bares y restaurantes.