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Bélgica no ha pedido investigar a la Organización Mundial de la Salud

Verifica RTVE
4 min.

El gobierno de Bélgica no ha pedido investigar a la Organización Mundial de la Salud (OMS) por fabricar la pandemia, como afirma un mensaje que circula por las redes. La solicitud parte de un conjunto de médicos que se oponen a las medidas tomadas contra la expansión del virus.

La consulta de si “Bélgica propone investigar a la OMS por falsear que hay una pandemia de COVID-19” ha llegado al servicio de Whatsapp de VerificaRTVE. Su rastreo conduce a publicaciones de Facebook y Twitter y en bastantes ocasiones a un sitio web de escasa calidad. En grupos españoles se ha movido un titular (“Bélgica propone investigar a la OMS por fabricar la pandemia”) que enlaza a un artículo en Medium.

El origen de la petición es una carta alojada en un dominio belga no oficial que aglutina a doctores contrarios a las medidas tomadas contra el coronavirus. El sitio acusa a los grandes medios de “campaña masiva de desinformación” y “censura”. En concreto, en la carta los médicos afirman que las decisiones para gestionar la crisis son desmesuradas, acientíficas, represivas y que provocan más daño que bien. Solicitan el cese de las medidas, cuestionan la legitimidad de los expertos y piden examinar el rol de la Organización Mundial de la Salud (WHO) por sus posibles conflictos de intereses en la pandemia.

La carta mezcla verdades y mentiras, una táctica habitual entre quienes desinforman, e incluye bulos impulsados a menudo desde grupos negacionistas, como la idea de que las PCR no sirven o la de que las mascarillas tienen efectos perniciosos como acumulación de C02. El texto considera además que el uso de mascarillas, las cuarentenas o los confinamientos son un ataque innecesario a los derechos humanos.

Según el sitio web, la petición está firmada por 596 doctores, 1.872 trabajadores sanitarios y 13.7333 ciudadanos. El servicio de verificación de Chile FastCheck.cl ha comprobado el listado cuando mostraba 562 doctores. Hasta 110 de ellos se presentan como anónimos, 266 como médicos generales y únicamente 26 pertenecen a una especialidad que el medio relacionada con la COVID-19 (epidemiología, neumología, anestesista o virología). Entre los doctores se encuentra Pascal Sacré, que defiende el uso de la hidroxicloroquina, un medicamento descartado por la OMS contra el coronavirus.

El formulario no obliga a dar el número de colegiado (los números que se ven en la página son códigos postales), y por tanto su fiabilidad es escasa. Sólo pide introducir un enlace que pruebe cierta existencia digital en el caso de los médicos, no en el de otros profesionales sanitarios ni ciudadanos.

Algunos de los suscritos muestran una identidad difusa. Por ejemplo, Елена Шерстнева escribe su nombre en ruso y se describe como médico generalista (la descripción aparece en neerlandés, el idioma de la página, “huisarts”). Pero su nombre remite a 65 usuarios diferentes solo en Facebook. Entre los hallazgos hay una doctora rusa que no es generalista sino especialista de larga trayectoria en Historia de la Salud y la Medicina soviética, y también una ginecóloga y una jubilada.

En una nota de prensa del mes de abril, el actual primer ministro de Bélgica Alexander de Croo y el ministro de Exteriores Philippe Goffin confirmaron su apoyo a la Organización Mundial del Comercio tras la decisión de EE.UU. de dejar de financiar a esta institución. Pidieron apoyarla “tanto como sea posible” porque “principalmente asiste a los países más vulnerables en su respuesta a la COVID-19”. En otro comunicado del 24 de septiembre, el Ministerio de Asuntos Exteriores del país subraya la necesidad de un acercamiento multilateral a la pandemia y el importante rol que juega la OMS en esa aproximación. No hemos encontrado ningún comunicado que confirme la petición oficial belga de esa investigación. Es un bulo a partir de un titular que atribuye a un gobierno lo que en realidad parte, en todo caso, de un grupo de médicos.

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