El juzgado de guardia de Lleida ha avalado la resolución de la Generalitat de Cataluña para confinar a los residentes en Lleida y otras seis localidades de la comarca del Segrià.
El tribunal ha excluido a la pequeña localidad de Massalcoreig, pero autoriza las medidas en la zona durante 15 días y pide información puntual sobre la evolución de la pandemia.
Sin embargo, respecto a las medidas de restricción de la actividad anunciadas por la Generalitat de Cataluña en varios barrios de l'Hospitalet de Llobregat (Barcelona), el Juzgado de Instrucción número 16 de Barcelona se ha opuesto a la prohibición de reuniones superiores a 10 personas por considerarla "desproporcionada".
El Govern presentó este martes ante el juzgado contencioso-administrativo la resolución por la que se prohíbe a los ciudadanos de Lleida, Alcarràs, Serós, Soses, Aitona, La Granja d'Escarp y Torres de Segre -además de las unidades municipales descentralizadas de Sucs y Raimat- salir de sus casas salvo para actividades esenciales.
Tras el decreto para limitar la actividad en caso de pandemia, con esta resolución el Govern quería sacar del limbo jurídico sus medidas para endurecer el confinamiento, que habían sido rechazadas por la justicia este domingo, de modo que pudieran entrar en vigor en la medianoche del martes al miércoles.
La portavoz del Ejecutivo catalán, Meritxell Budó, señaló que las medidas restrictivas estarán vigentes durante 15 días, dado que la falta de un límite temporal para la restricción de la movilidad uno de los argumentos que llevaron al Juzgado de Instrucción número 1 de Lleida a rechazar la resolución inicial para el confinamiento.
Tanto el Ejecutivo catalán como el estatal habían descartado la posibilidad de que fuera el Gobierno central el que aprobase el estado de alarma circunscrito a la zona afectada. El mismo ministro de Sanidad, Salvador Illa, valoró que el decreto ley aprobado por la Generalitat no invadía competencias del Estado.
Meritxell Budó: "No estamos en un confinamiento domiciliario pero sí en la recomendación de no salir"
Salidas restringidas, bares y restaurantes cerrados
La portavoz del Govern ha subrayado que no se trata de un confinamiento domiciliario, a pesar de que se "recomienda" no abandonar el domicilio para toda actividad que no sea "estrictamente necesaria". La situación de esos siete municipios se quiere aproximar a la de la Fase 1 de la desescalada, aunque ahora sin franjas horarias.
Bajo el planteamiento del Ejecutivo catalán, "se podrá salir a andar, a pasear, a hacer deporte, a comprar... Todo el comercio estará abierto", si bien será necesaria cita previa, salvo para los establecimientos de alimentación productos básicos. "No es estrictamente un confinamiento domiciliario, pero estamos diciendo a la ciudadanía que lo que no está en esta resolución no se podrá hacer, todo lo que no sea necesario no se podrá hacer", ha apostillado Budó.
Las mañanas de RNE con Íñigo Alfonso - Los comerciantes de Lleida, "preocupados y engañados" con el nuevo confinamiento - Escuchar ahora
Asimismo, las salidas del domicilio y la circulación por las vías públicas en las siete localidades afectadas estará restringida a unos pocos supuestos, que se consideran esenciales. Entre ellos, se incluyen acudir al puesto de trabajo, siempre que no sea posible el teletrabajo; cuidar de menores o ancianos; acudir a un centro sanitario, al banco o a comercios con cita previa; realizar exámenes oficiales que no se puedan posponer; y practicar deporte con personas con las que se conviva.
La orden prohíbe la celebración de bodas, funerales y otros servicios religiosos, aunque mantiene abiertos los centros juveniles y campamentos de verano -las conocidas como "colonias"- bajo las pertinentes medidas de seguridad y para menores que residan en los municipios afectados. Las bibliotecas y museos permanecerán abiertos, con las limitaciones de aforo establecidas, mientras que gimnasios, discotecas y otros lugares que propicien las aglomeraciones quedarán cerrados.
En cuanto a los bares y restaurantes, su actividad queda suspendida, por lo que tendrán que cerrar, salvo que sirvan a domicilio o sea posible recoger los productos en el establecimiento, siempre con cita previa. Además, se prohíbe la salida y la entrada de los siete municipios afectados, si bien se exceptúan las actividades esenciales y la circulación por autopistas y autovías para atravesar la zona del Baix Segre, de forma que esas localidades sufrirán un confinamiento más acusado que el resto de la comarca del Segrià, que lleva diez días confinada perimetralmente.
Según los últimos datos del Departamento de Salud de la Generalitat, la comarca del Segrià acumula 1.715 contagios desde el 23 de junio, cuando se declaró el primero de los más de 15 focos detectados que han convertido la zona en el brote más preocupante de coronavirus en España desde que se alcanzó la denominada nueva normalidad.
¿Por qué usa la Generalitat un decreto ley para confinar Lleida?
Los epidemiólogos advierten de la necesidad de actuar
Expertos como el jefe de Epidemiología del Hospital Clínic de Barcelona, Antoni Trilla, sostienen que en Cataluña se está "lejos de la preparación necesaria" para "frenar la velocidad de crecimiento" de la difusión del virus.
Más allá han ido la epidemióloga del Hospital Clínico Anna Villena y el investigador del grupo Biocom de la Universidad Politécnica de Cataluña Enric Álvarez al alertar de que la demora en aplicar el confinamiento en la comarca leridana del Segrià provocará un aumento de casos.
En esa comunidad, el ayuntamiento de Esplugues Llobregat (Barcelona) ha anunciado ya medidas preventivas, como el cierre de las pistas deportivas al aire libre ante los brotes en localidades como L'Hospitalet de Llobregat, municipio colindante donde el número de casos se ha disparado con más de 300 casos activos.
Por esa razón, el departamento de Salud de la Generalitat ha terminado recomendando "firmemente" a los vecinos de los barrios de La Torrassa, Collblanc y La Florida de L'Hospitalet salir únicamente en los casos imprescindibles e inaplazables, como trabajar o hacer la compra.