Doble fracaso electoral de Podemos en Galicia y País Vasco. Si en 2016 la formación de Pablo Iglesias desbancó al PSOE como segunda y tercera fuerza política, respectivamente, en los comicios de 2020, marcados de principio a fin por la crisis del coronavirus, los morados no han conseguido representación parlamentaria en la Xunta y han perdido la tercera posición en Euskadi. En ambos casos se han visto sobrepasados por los socialistas. Sumando el retroceso en ambas autonomías, los de Iglesias se dejan más de 300.000 votos respecto a 2016.
Las urnas han confirmado el desplome del fenómeno de Podemos en ambas regiones: en Galicia, ni la coalición que aglutina a Podemos, Esquerda Unida y Anova -Galicia En Común- ni la marca Marea Galeguista han obtenido representación en la Cámara autonómica, cuando en 2016 consiguieron 14 actas bajo las siglas de En Marea. Mientras, en País Vasco, Elkarrekin Podemos-IU de Miren Gorrotxategi también se desinfla, al pasar de 11 a 5 asientos.
Los socialistas, pese a superar a Podemos, solo han conseguido sumar un escaño más que en 2016 y el BNG de Ana Pontón, aupado por el electorado procedente de En Marea, le ha aventajado en cuatro asientos. Así, el PS gallego alcanza los 15 diputados, y en Euskadi, pese al desplome de la formación morada, el PSE-EE de Idoia Mendia obtiene un escaño más, hasta situarse en 10.
Debacle en Galicia
Ni el apoyo de la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ni la del líder de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, han evitado la desaparición de la formación morada en Galicia. El resultado está incluso por debajo de los peores pronósticos, que otorgaban entre 4-6 escaños a la formación de Antón Gómez-Reino.
“Son unos resultados inesperados y muy malos“
"Son unos resultados inesperados y muy malos, que asumo en primera persona", ha dicho el candidato de Galicia En Común, quien también ha recalcado que procederán a analizar los resultados y a hacer "una reflexión profunda".
La coalición de Podemos, Esquerda Unida, Anova y las mareas de Santiago y A Coruña no ha logrado el 5 % necesario en ninguna de las cuatro circunscripciones, por lo que no tendrá presencia durante la próxima legislatura en un Parlamento gallego en el que fueron segunda fuerza (bajo el paraguas de En Marea) hace cuatro años.
Antón Gómez-Reino (Galicia en Común): "Son unos resultados inesperados y muy malos"
Por su parte, los socialistas, con 15 escaños, han conseguido mejorar ligeramente el resultado que Xoaquín Fernández Leiceaga alcanzó hace cuatro años -el peor registrado en la historia del partido en Galicia- y continúan como tercera fuerza política pese al desplome de Podemos.
Para el candidato del PS de Galicia a la Presidencia de la Xunta, Gonzalo Caballero, los resultados son "insatisfactorios" pero descarta abandonar la formación por "responsabilidad" con aquellos que le dieron su voto. Con el escrutinio prácticamente finalizado, Caballero ha asegurado que el resultado es "claro" y que le corresponde al PP y a Alberto Núñez Feijóo, al que ya ha trasladado su felicitación, "encabezar un gobierno en Galicia", si bien ha destacado que, con todo, su formación sube un punto y medio con respecto a las autonómicas de 2016 y obtiene un 19,38 % de los votos.
Así, la sorpresa de la noche ha venido de la mano del BNG, que consigue alzarse como la principal fuerza de la oposición en Galicia, triplicando los escaños conseguidos en 2016 -pasa de 6 a 19-. Mientras, el PP de Alberto Núñez Feijóo ha obtenido de nuevo la mayoría absoluta en el Parlamento de Santiago de Compostela, con 41 escaños, lo que le augura una legislatura sin sobresaltos.
‘Sorpasso’ en País Vasco
En Euskadi, el PSE-EE ha obtenido 10 escaños, uno más que en 2016, arrebatando así la posición de tercera fuerza política en la Cámara de Vitoria a Elkarrekin Podemos-IU, que sufre un importante retroceso, ya que pierde seis escaños y rebaja a la mitad su presencia.
Con estos resultados, el objetivo que Podemos y sus socios se habían marcado en la campaña de presentarse como llave para reproducir en estos territorios gobiernos de coalición de izquierdas no podrá llevarse a cabo. Según el líder de la formación, Pablo Iglesias, el partido ha sufrido esta noche "una derrota sin paliativos" al perder buena parte de su representación en ambos territorios. "Nos toca hacer una profunda autocrítica y aprender de los errores que sin duda hemos cometido", ha asegurado el también vicepresidente del Gobierno en su cuenta de Twitter.
Por su parte, para la líder del PSE-EE, Idoia Mendia, su formación ha obtenido "un buen resultado", incluso con una abstención tan elevada, y ha abierto la puerta a reeditar la coalición con el PNV, una fórmula que han mantenido en el Gobierno Vasco durante cerca de catorce años. En este sentido, ha pedido a los nacionalistas que "faciliten con la máxima celeridad la puesta en marcha del reloj institucional vasco" porque Euskadi "necesita arrancar".
"Los socialistas vamos a utilizar cada papeleta en reconstruir económica y socialmente Euskadi. Hemos dado nuestra palabra y la vamos a cumplir como siempre", ha asegurado la candidata a lehendakari.
Idoia Mendia: "Vamos a utilizar cada papeleta en reconstruir económica y socialmente Euskadi"
En este caso, tal como apuntaban las encuestas, el PNV de Íñigo Urkullu ha revalidado su victoria con una mejora en los resultados de hace cuatro años tras obtener 31 escaños, 3 más que en 2016.
Mientras, EH Bildu se sitúa como segunda fuerza con 22 diputados -4 más que en las pasadas elecciones- y la coalición PP+Cs se queda con 5 escaños, frente a los 9 que lograron los populares en solitario en 2016. La sorpresa en Euskadi ha llegado con Vox, que entra por primera vez en el Parlamento vasco, con un escaño por Álava.