El presidente de Vox, Santiago Abascal, ha anunciado que su formación pretende impulsar la creación de un sindicato "para defender a los trabajadores" y que no estará al servicio de "causas ideológicas", según ha anunciado el propio líder del partido en un mitin en A Coruña, donde se encuentra participando en la campaña para las elecciones al Parlamento de Galicia del 12 de julio.
"Habrá un sindicato de trabajadores en España muy pronto, que no se arrodillará ni ante los poderosos ni ante la nomenclatura comunista como hacen otros sindicatos; que defenderá a los trabajadores, que no permitirá la ruina de España", ha afirmado Abascal, que no ha avanzado ni el nombre del sindicato ni cuándo plantean ponerlo en marcha, pero ha señalado que estará sufragado por sus afiliados.
La aparición de este sindicato que "no se alimentará del trabajo de los españoles" y no estará "ni al servicio de la izquierda ni de intereses globalistas", según ha señalado Abascal, nacerá con una orientación ideológica claramente opuesta a las organizaciones obreras convencionales, con una matriz histórica vinculada al socialismo, el comunismo o el anarquismo, y supone abrir un territorio político nuevo para Vox, más vinculado a la clase obrera.
Abascal ha defendido en el mitin que ha protagonizado en A Coruña que Vox ha venido para dar "la batalla ideológica y cultural" para "defender a la España que madruga", en referencia a los trabajadores sanitarios y fuerzas de seguridad que han estado luchando contra el que ha llamado "virus chino" de la Covid-19.
Este sindicato impulsado por Vox llegaría en un momento crucial en España, que se enfrenta a una crisis económica sin precedentes derivada de la pandemia de la Covid-19, con el desempleo golpeando en todos los sectores (el paro registrado llegó a los 3,8 millones de personas en junio), expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) que han afectado a cientos de miles de trabajadores y unas perspectivas de desplome de la riqueza del 12,8% del PIB este año, la mayor de todo el mundo, junto a Italia.
Concentración antifascista
En su mitin de este sábado en el exterior del Palacio de Exposiciones y Congresos de A Coruña, como hizo también en su mitin en Lugo, Abascal ha arremetido contra las personas que fuera de la zona del mitin se han concentrado para expresar su rechazo a los "fascistas".
Unas 200 personas han protestado con una gran pancarta que rezaba “Contra el fascismo ni un paso atrás”, al grito de “fuera fascistas de nuestros barrios”. Frente a esta consigna, los asistentes al mitin se han levantado de sus sillas antes del comienzo de las intervenciones coreando al unísono “Que viva España” y agitando sus banderas.
Al término del acto, han arrojado dos bengalas que han provocado algunas cargas policiales. "Aquí los patriotas, y detrás la chusma totalitaria, los hijos de Pablo Iglesias y de Beiras", ha añadido el dirigente de Vox sobre los concentrados.
En clave electoral, arropando al candidato de Vox por A Coruña, Ricardo Morado, Abascal ha subrayado que espera obtener representación en el Parlamento gallego para “romper la ley del silencio” por la que, a su juicio, no se tratan los temas que importan a los gallegos.
Una vez esté Vox en el Parlamento, ha añadido, su objetivo es “mantener vigilado” al presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, en sus “derivas y tentaciones” porque tiene “un ojo izquierdo y otro que mira a los nacionalistas”, ha condenado antes de reprocharle que “solo” diga “Galicia al cubo” y se olvide de España.