Mientras el brote de coronavirus continúa dejando en España un goteo constante de nuevos casos, este miércoles se ha conocido que tres de las personas contagiadas son menores: dos niños en Castilla-La Mancha y una niña en Madrid. Si bien las autoridades sanitarias intentan transmitir tranquilidad en lo relativo al impacto que tiene la nueva enfermedad en la infancia, sí que inciden en un aspecto: a pesar de que Covid-19 les afecte de una manera extraordinariamente leve, los niños pueden convertirse en un foco de contagio en sus respectivos núcleos familiares, donde puede haber personas más vulnerables.
[Mapa del coronavirus en España
En su comparecencia diaria ante los medios de comunicación, Fernando Simón, director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias del Ministerio de Sanidad, ha vuelto a llamar a la calma en este sentido: "sabemos por los miles de casos en China que a los niños les afecta menos y que, en general, tienen una evolución clínica mucho más benigna, con una mortalidad realmente baja".
Esa "mortalidad realmente baja" a la que se ha referido Simón está refrendada por los datos. Según el informe sobre el impacto del coronavirus más completo hasta la fecha -realizado en China con 72.000 casos-, de los 1.023 fallecimientos registrados hasta el 11 de febrero, fecha hasta la que abarca el trabajo, solo uno de ellos correspondía a un adolescente, situado en la franja de edad entre los 10 y los 19 años. Entre los cero y los nueve años, el virus no produjo ni una sola muerte, una circunstancia que se ha mantenido a nivel mundial a medida que la epidemia se ha ido expandiendo por otros países.
Mensaje de tranquilidad de los pediatras
En esta línea, los pediatras españoles quieren transmitir a madres y padres un mensaje de tranquilidad. "Lo que estamos viendo es que los niños tienen cuadros leves. No podemos decir que no se vayan a contagiar o que no haya niños contagiados, ya lo estamos viendo y seguramente va a haber más. Pero hasta ahora no hay mortalidad y los casos que se detectan son muy, muy leves. Son catarros. En ese sentido pueden estar tranquilos", asegura a RTVE.es Cristina Calvo, portavoz en materia de coronavirus de la Asociación Española de Pediatría (AEP).
Sobre el posible cierre de colegios en zonas muy concretas de España afectadas por el coronavirus, especialmente en aquellas donde no se ha logrado establecer un vínculo epidemiológico claro en los infectados -ahora mismo, las más preocupantes-, el Ministerio de Sanidad ha insistido un día más en que de momento no se plantea elevar el nivel de alerta y clausurar centros educativos, entre otras medidas. Tampoco en aquellos donde ya se han constatado contagios en alumnos o profesorado. "Ahora mismo no tiene sentido cerrar los colegios", ha dicho Fernando Simón, quien ha detallado que se ha comunicado a los colegios que, cuando se detecta un contagio, "algunas aulas, algunos profesores o algunos contactos muy estrechos de los niños tienen que ponerse en cuarentena".
“Los datos indican que, en Europa, hay una media de seis menores infectados por cada 1.000 casos. “
"El impacto de un posible cierre de colegios no beneficiaria al control de la epidemia", ha proseguido, al mismo tiempo que ha incidido en el hecho de que "cualquier enfermedad que afecte a los niños se tiene que valorar con mucho cuidado porque, además de ser un grupo muy sensible, pueden suponer núcleos de transmisión en sus familias".
Contagio secundario
Sin embargo, en lo relativo a que los niños sean el foco del contagio, hasta ahora los casos descritos a nivel mundial indican lo contrario. "Normalmente, lo que estamos viendo es que sucede al revés; son los familiares los que están contagiados y en el ámbito familiar se contagia el niño" -asegura Cristina Calvo- "la familia está contagiada y el niño se contagia secundariamente".
“Son los familiares los que están contagiados y el niño se contagia en el ámbito familiar. “
"Pero también es verdad que un niño contagiado puede contagiar a otros miembros de la familia", continúa explicando la pediatra, "por eso, con ellos hay que tomar las mismas precauciones que con un adulto. Sobre todo, no deben estar en contacto con otras personas ni acudir al colegio". "Un niño que presente síntomas de una infección respiratoria no debe mezclarse con otros niños o con otras personas enfermas. Pero para este virus y para todos, como ocurre con la gripe", añade.
Los datos indican que, en Europa, hay una media de seis menores infectados por cada 1.000 casos de coronavirus. Apenas un 0,6% del total. "Son cuadros catarrales leves y generalmente la cosa no pasa de ahí", insiste Cristina Calvo, aunque pide que esa levedad tampoco provoque un exceso de confianza que pueda promover contagios. "Si el niño, aunque no tenga síntomas o tenga pocos síntomas, está excretando el virus, siempre existe la posibilidad de contagio", subraya.