Aunque el escándalo saltara hace apenas un par de meses, los abusos sexuales de Harvey Weinstein a las actrices eran conocidos en Hollywood desde hace casi tres décadas. E incluso algunos se atrevieron a insinuarlos publicamente como Seth MacFarlane (en una ceremonia de los Oscar) o Tina Fey (en su serie Rockefeller Plaza). Lo curioso es que uno de los primeros en denunciar esos abusos fue, ¡hace 15 años!, el cómic Spider-Man: Monstruos de Hollywood (2002), que Panini publicará en España en febrero de 2018.
Los villanos del cómic eran Joseph y Harold Rothstein, dos productores con un apellido muy similar a los hermanos Weinstein, también de ascendencia judía y con similares actitudes mafiosas.
Julian Clemente, Editor de Marvel en españa asegura que: "Sorprendentemente este cómic fue de los primeros en denunciar estos abusos. Y digo sorprendentemente porque en el momento en que salió a la venta, simplemente se leía como una caricatura excesiva de Hollywood y sus directivos. Pasó un tanto inadvertido, a pesar de publicarse incluso en España, porque es un cómic que lleva a Spider-Man en el título, pero donde Spider-Man tiene un papel muy secundario, siendo el protagonista un personaje de escasa entidad".
"En realidad -continúa Clemente-, probablemente Marvel y Zimmerman recurrieron a Al Kraven (hijo de uno de los villanos míticos de Spider-Man) porque eso les permitía una libertad absoluta a la hora de mandar el mensaje del cómic. Te caes de espaldas cuando lo lees ahora, a la luz de los acontecimientos, y te das cuenta que estaba bastante ajustada a una realidad extraordinariamente trágica y dura".
Parecidos razonables
El responsable del guion del cómic fue Ron Zimmerman, que conocía los entresijos de Hollywood. "Ron Zimmerman -nos cuenta Clemente- fue uno de los fichajes de la primera época del editor Joe Quesada. Provenía de la industria del entretenimiento y la conocía por dentro. Fue guionista de Los Simpson y partícipe del show de Howard Stern. No imaginábamos entonces hasta qué punto el cómic era realista".
En cuanto a los villanos del cómic, los hermanos Rothstein: "Son dolorosamente parecidos a la descripción que se hace de los Weinstein, en especial sobre Harvey Weinstein, en el torrente de acusaciones que se han destapado en la actualidad" -asegura Clemente-.
El cómic está protagonizado por Al Kraven, hijo de uno de los villanos clásicos de Spider-Man, Kraven El Cazador. Un personaje que -como nos cuenta Clemente- es muy diferente a su padre: Es un idealista que trata de hacer las cosas bien. Lleva su historia a Hollywood y ahí se choca contra el muro invisible de la mafia que controla muchos estudios. Vemos en detalle la manera de comportarse de esta mafia, personificada en los Hermanos Rothstein, que vienen a ser un trasunto de los Weinstein, incluso en el aspecto y en la manera de hablar".
"Es un cómic -añade Clemente-que, considero, está todavía incrustado en la década anterior. La solución a la injusticia es muy heredera por ejemplo de lo que vemos en El Castigador de Garth Ennis. La solución en la actualidad creo que sería distinta, porque la realidad nos lo ha mostrado. Hemos sabido lo que ocurría en Hollywood gracias a unas pocas mujeres que se han atrevido a dar la cara. Aquí todavía el protagonista es el novio de una de ellas. Pero las verdaderas protagonistas ahora son ellas".
Un cómic muy realista
Tratándose de un cómic de superhéroes sorprende el realismo con el que retrata Hollywood y la crudeza de algunas escenas, incluyendo una violación. "Es un cómic bastante explícito -asegura Clemente-, dentro de los cánones en los que se suele mover Marvel y sin llegar a ser un cómic de la línea MAX para lectores adultos. Habrá lectores que lo consideren incluso grosero, pero no menos que la realidad que ahora hemos descubierto que retrata".
Los cómics de Marvel siempre se han caracterizado por retratar la realidad de cada épcoa, como nos recuerda Clemente: "Stan Lee siempre trató que sus cómics fueran el reflejo de la sociedad, y también apostaran por la búsqueda de una sociedad mejor. Los cómics de Marvel han luchado por la justicia social siempre, desde que reflejaron la pluralidad racial de Estados Unidos hasta que plantearon cuestiones sobre la Guerra de Vietnam, sobre la venta de armas o sobre los derechos de las minorías. Pese a quien pese, Marvel siempre ha estado en esas luchas y siempre estará".
"Necesitamos mucha pedagogía"
A pesar de su interés evidente, el cómic pasó desapercibido en su momento. Según Clemente: "Porque la sociedad todavía no había llegado ahí. Porque los comportamientos machistas todavía se silenciaban o se daban por aceptables, y porque no existían los canales apropiados para que esas denuncias se conocieran en todas partes".
"Sigue ocurriendo hoy en día -continúa el editor-, cuando cualquier denuncia de un comportamiento machista viene acompañada del acoso sistemático a quien hace esa denuncia. ¿Cómo no iba a pasar entonces? Seguimos viviendo en una sociedad muy machista y todos somos en cierta manera cómplices de ello".
"Por eso -concluye Clemente- es tan importante que se denuncien estas realidades, para que toda la sociedad en su conjunto tome conciencia y se mueva en otra dirección. Hay quien nunca cambiará, pero hay personas que sí están tomando conciencia de esos comportamientos machistas que todos tenemos muy asimilados y que sólo descubrimos cuando nos los hacen comprender. Necesitamos mucha pedagogía".
Guiños a la realidad y portadas geniales
En cuanto al cómic: "Es una historia llenas de guiños a la realidad -asegura Clemente-, que tal vez se han quedado un poco viejos, pero que todavía se pillan con facilidad. Recuerdo que Zimmerman en su momento hizo historias bastante dignas. Es una pena que no siguiera en la industria del cómic".
"El dibujo es de John McCrea, el principal artista de Hitman y que también ha acompañado a Garth Ennis en otros proyectos, por eso quizás el guión tiene ese toque gamberro de Ennis" -asegura Clemente-.
Otro de los aspectos más destacados del cómic son las portadas, que parodian películas míticas: "Son fantásticas -asegura Clemente-, y ya daban una pista de que aquel cómic era importante. El propio Joe Quesada (Daredevil) se encargó de hacerlas, algo que no solía ocurrir a menudo, y menos en aquella época. Son homenajes a grandes pelis de todos los tiempos, como Tiburón, Scarface o El cabo del terror, donde se viene a presentar a Al Kraven como un intruso en Hollywood, y de eso va también el cómic: ¿Qué pasa cuando alguien que no pertenece a un mundo cerrado y acotado irrumpe en él sin conocer sus reglas no escritas?"
Spider-Man: Monstruos de Hollywood se publicará en febrero de 2018.