El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha aprovechado su primera intervención del debate sobre el estado de la nación para anunciar que los trabajadores que ganen menos de 12.000 euros no pagarán IRPF (ahora el mínimo exento está en 5.151 euros) en el marco de una reforma fiscal que beneficiará en total a "12 millones de contribuyentes" a partir de 2015. También ha anunciado una "tarifa plana" de cotización a la Seguridad Social de 100 euros en contingencias comunes para las empresas que contraten a trabajadores nuevos de forma indefinida.
Estas son las dos principales medidas que ha anunciado Rajoy durante un discurso de hora y media en el que ha defendido las medidas aplicadas en la primera mitad de la legislatura y ha mostrado su disposición de "perseverar sin descanso en la misma dirección".
"España era un lastre para Europa y ahora se la percibe como parte del motor", ha señalado Rajoy que ha incidido en que se ha producido "un cambio de tendencia" con un Gobierno que "ha variado el rumbo" invirtiendo la dirección de la marcha. "Hemos atravesado con éxito el cabo de Hornos", ha subrayado el presidente usando como metáfora la figura de este cabo, el más meridional de América, uno de los hitos de la navegación por su peligrosidad.
Para Rajoy no ha sido "casualidad" sino el resultado de "sacar a relucir la verdad y corregirla" (en contra de lo que hizo, en su opinión, el anterior Gobierno socialista: "No se puede corregir lo que no se quiere reconocer") y de aplicar reformas.
Revisión del crecimiento al alza
Como muestra de ese "cambio de tendencia", Rajoy ha adelantado que el crecimiento previsto se revisará al alza. Según los nuevos cálculos, la economía española crecerá un 1% en 2014 y un 1,5% en 2015. El año pasado el PIB cayó un 1,2% tras repuntar un 0,3% en el último trimestre. Durante 2014, ha asegurado, se creará empleo neto y subirán también los afiliados a la Seguridad Social.
Rajoy ha incidido en que ahora España avanza "en la buena dirección" aunque todavía queda camino hasta la "recuperación completa" y ha asegurado que "el triunfo" (que dice no reivindicar para el Gobierno) es "de los españoles, de su esfuerzo sostenido, de sus sacrificios, de su confianza".
No obstante, el presidente ha reconocido que "es difícil que nadie pueda sentirse satisfecho" cuando hay más de 5,8 millones de parados según la última Encuesta de Población Activa. Unas cifras que le impiden, ha añadido, el "triunfalismo" y "caer en la autocomplacencia".
Reforma fiscal para "12 millones de contribuyentes"
El presidente ha avanzado algunos detalles de la reforma fiscal que el Gobierno espera llevar al Congreso el próximo mes de junio para que entre en vigor en 2015 y que beneficiará, según sus cálculos, "a 12 millones de contribuyentes".
Una de las medidas de esta reforma fiscal será la exención de pagar el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas si el trabajador gana menos de 12.000 euros. Actualmente el mínimo exento general está en 5.151 euros, aunque este varía en función del número de hijos o de si el contribuyente tiene a su cargo ascendentes o personas con discapacidad.
El Gobierno estima que de esta medida en concreto se beneficiarán un millón y medio de contribuyentes, según ha reconocido el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, en los pasillos, informa José Ángel Carpio.
Rajoy ha avanzado también que se "mejorarán las deducciones fiscales para las familias" al elevar los mínimos personales por hijos y por el cuidados de padres mayores o personas con dependencia.
'Tarifa' plana de 100 euros para contratos indefinidos
"La creación de empleo es el eje que vertebra todos nuestras iniciativas, no diré en política económica, sino en política sin más, en todo nuestro quehacer como Gobierno", ha subrayado Rajoy, quien ha defendido su reforma laboral: "Por primera vez en toda la crisis, podemos decir que hay menos parados que hace un año".
Entre las medidas para crear empleo, Mariano Rajoy ha anunciado una "tarifa plana de cotización a la Seguridad Social de 100 euros" en contingencias comunes para las empresas que contraten a nuevos trabajadores de forma indefinida a partir de este mismo 25 de febrero.
El empresario solo tendrá que pagar 100 euros durante los primeros 24 meses. Si la empresa despide al trabajador antes de los tres años, deberá reintegrar los beneficios aplicados.
El presidente del Ejecutivo ha calificado esta medida como "el impulso a la creación de empleo neto más importante de nuestra historia".
Rajoy también ha anunciado medidas para mejorar la financiación de las pequeñas y medianas empresas y una reforma integral de la formación profesional. Este mismo viernes el Consejo de Ministros aprobará un "paquete de leyes de fomento de la financiación para mejorar la liquidez empresarial y fortalecer la financiación no bancaria para pequeñas y medianas empresas".
Rajoy reta a Cataluña a pedir la reforma de la Constitución
El presidente del Gobierno también se ha referido en su discurso a Cataluña para recordar que su "obligación" es "cumplir la ley y hacerla cumplir, lo que en este caso significa garantizar que nadie decida por el conjunto del pueblo español sobre el futuro de España".
En este sentido, ha vuelto a incidir en que el referéndum anunciado por la Generalitat para el 9 de noviembre de este año "no se puede celebrar" porque "no es legal".
No obstante, Rajoy se ha mostrado abierto al diálogo "dentro de la Constitución y la ley" y ha recordado, en cualquier caso, que "la Constitución puede ser reformada".
En este sentido, ha subrayado que "todos cuantos pretendan su modificación pueden plantearlas", pero les ha advertido de que para ello hay que seguir "los pasos y las reglas que la propia Constitución establece: ese es el Estado de Derecho".
Medidas para atajar la corrupción de "mañana"
El presidente del Gobierno ha dedicado también parte de su discurso a la lucha contra la corrupción, el segundo problema para los españoles por detrás del paro según el CIS.
"Trataremos que cada día sea más difícil corromper o dejarse corromper; que cueste más hacerlo; que si se hace se averigüe pronto; y si se averigua, que cueste tan caro como para castigar al culpable con la dureza necesaria para desanimar a quien pretenda imitarle".
En este sentido, ha destacado la necesidad de reformar el Código Penal para incluir nuevos tipos delictivos que ahora no existen como la financiación ilegal de los partidos.
Sin hacer mención a ningún caso de corrupción en concreto, como el caso Gürtel o el caso Bárcenas, en los que están imputados exmiembros del Partido Popular, Rajoy ha subrayado que "de los casos (...) que tenemos noticias hoy se están ocupando los tribunales". El presidente ha añadido que lo que tiene que hacer el Gobierno y el Parlamento es trabajar "en la prevención y el castigo de los que se produzcan mañana".
Rajoy ha acabado su discurso de la mañana, en el que no ha mencionado el supuesto desarme de ETA, volviendo a hablar de economía para incidir en que "no es el final del esfuerzo", pero que el país está en otra etapa "más llevadera y más reconfortante, porque ahora se palpan los resultados, se confirma el acierto de las medidas adoptadas, y encuentran justificación a los sacrificios".
El presidente ha señalado que ya no es la "esperanza", sino la "ambición" la que mueve al país después de "alcanzar la primera cumbre" aunque quede tanto que no sea para "estar satisfechos".