Irán ha llamado a consultas este lunes al embajador danés para pedirle explicaciones sobre la "ilógica" decisión de la Unión Europea de imponer un embargo petrolero sin precedentes contra el país, según ha informado la agencia oficial de noticias Irna.
Previamente, el ministro del Interior de Irán, general Mostafa Mohamad Nayar, ha aseguraba que el embargo petrolero castiga más a las economías occidentales que a la iraní.
"Con esas iniciativas (el embargo) lo que hacen es crear dificultades adicionales para la economía de Occidente", ha asegurado el ministro iraní, citado por al agencia rusa Interfax, tras reunirse en el jefe del Servicio Federal de Control de Narcóticos de Rusia, Víctor Ivánov.
Nayar, quien cumple un visita de trabajo en capital rusa, ha recordado que las sanciones incrementan el precio del petróleo son "inoportunas y dañinas para los intereses de Estados Unidos y los países occidentales".
"Nosotros no les damos importancia (...). Desde hace treinta años que nos imponen sanciones. No es algo nuevo", ha recalcado el ministro iraní, que ha agregado: "La anteriores sanciones a Irán nos ayudaron a inventar lo que necesitábamos y no teníamos".
Más países
Precisamente este martes Australia ha anunciado que se sumará a la reciente decisión de la Unión Europea de imponer un embargo petrolero sin precedentes contra Irán, según ha informado este martes el ministro de Exteriores, Kevin Rudd.
"Respecto a la cuestión de Irán, dejenme ser absolutamente claro: la postura adoptada ayer en Bruselas por la Unión Europea será en la línea de la que adoptaremos en Australia", ha comunicado a los periodistas durante su visita a Londres.
El pasado lunes los países de la Unión Europea acordaron imponer un embargo al petróleo iraní, que prohíbe inmediatamente todo nuevo contrato y da hasta el 1 de julio para poner fin a los ya existentes.
Además, se impone una nueva batería de sanciones que incluye el bloqueo de activos en Europa del Banco Central iraní y prohibición parcial de las transacciones con esa institución.
Europa es uno de los principales mercados de Irán, por lo que la UE confía en que la medida contribuya a aumentar la presión sobre el régimen iraní para que acceda a negociar sobre su polémico programa nuclear.