"Los cementerios son más que lugares de descanso eterno. Son museos al aire libre, testigos de la historia y, en muchos casos, guardianes de secretos que jamás han sido revelados. Dicen que cada lápida, cada tumba, esconde una historia. Algunas trágicas, otras insólitas y muchas verdaderamente aterradoras". El último episodio de Terror en blanco, podcast disponible en RNE Audio, se adentra en estos escenarios de misterio y memoria.
El concepto de cementerio, tal como lo conocemos hoy en día, es relativamente moderno. En tiempos antiguos, los rituales funerarios no contaban con espacios específicos para el descanso de los difuntos. La diferencia entre necrópolis, camposantos y mausoleos tiene explicación en su evolución y en las creencias culturales de cada sociedad.

Terror en blanco - Cementerios
Más allá del descanso eterno
Entre los casos más sobrecogedores que podemos escuchar durante los 57 minutos del capítulo se encuentra el de la Pirámide del Puerto del Escudo, en la frontera entre Burgos y Cantabria. Este monumento fue construido para albergar los restos de 360 soldados y 12 oficiales italianos caídos durante la Guerra Civil. La batalla librada en ese lugar fue de una crueldad extrema, dejando muchas vidas truncadas en el camino.
El periodista Salvador Rebollo tuvo la oportunidad de visitar la pirámide junto a dos compañeros y documentar la experiencia. Salvador cuenta que la sensación de entrar en un espacio lleno de nichos pequeños, lápidas rotas y restos de velas utilizadas en rituales es totalmente inquietante. Según su propio testimonio, sintió presencias que le dejaron paralizado por completo.
Los cementerios como museos al aire libre
El escritor Fernando Gómez ha compartido su fascinación por estos lugares, que para él son mucho más que simples centros de descanso eterno. Según Gómez, los cementerios son auténticos museos al aire libre que guardan historias de todo tipo, desde las más trágicas hasta las más aterradoras. Desde su infancia, el autor ha tenido una conexión especial con estos espacios, y su pasión por ellos le ha llevado a recorrer el mundo en busca de los más enigmáticos y misteriosos.
Uno de los cementerios que más lo atrajo fue el de Highgate en Londres, famoso por su atmósfera macabra y las leyendas sobre vampirismo. Gómez relata un caso extraño ocurrido en 1969, cuando un ocultista afirmó haber visto una figura sobrenatural en el cementerio, lo que desató un intenso debate sobre la existencia de un "vampiro".
Otro cementerio que despertó su curiosidad fue el de La Recoleta en Buenos Aires, donde se encuentra la tumba de Eva Perón. El autor destaca el misterio sobre el robo de las manos del cadáver de Juan Domingo Perón, que fue profanado por un grupo desconocido que exigía un rescate.
Además, Gómez también revela rituales funerarios de otras culturas que podrían resultar novedad para muchos. En particular, menciona la práctica de los Tanatoronja, un grupo étnico que mantiene a sus muertos dentro de casa hasta que tienen el dinero suficiente para enterrarlos. Durante este tiempo, el cadáver es "pseudomomificado" y permanece en la vivienda junto a la familia.