Pesaba 150 kg y una decisión le cambió la vida. José Manuel Zapata (Granada, 1973) es tenor y ha pisado los principales teatros de ópera del mundo, desde el Teatro Real al Metropolitan de Nueva York, pasando por el Theater an der Wien de Viena, entre muchos otros. En 2016, y con motivo de la obesidad que padecía, decidió someterse a un bypass gástrico, una cirugía bariátrica tras la cual inició una vida nueva.
Habitual colaborador en el programa No es un día cualquiera con Pepa Fernández, en esta ocasión el tenor visita a Lourdes Maldonado para hablar en Las tardes de RNE sobre gordofobia en el mismo día que se conmemora la lucha contra este fenómeno. Según el informe ALADINO, España es el sexto país de la UE con más exceso de peso y el séptimo en obesidad.

Las tardes de RNE - José Manuel Zapata, tenor contra la gordofobia
El sincero testimonio del tenor le lleva a comparar la relación de las personas obesas con la comida como la de los adictos con la droga: "Para nosotros la comida es una droga, te agarras a ella como una salvación muchas veces para tu estado de ánimo". Además, no esconde la barrera que le ha supuesto la pérdida de peso a la hora de mantener la voz, su principal instrumento. "La voz no está igual, es verdad que físicamente te encuentras mejor porque descansas más, pero al final hay una serie de musculatura que está acostumbrada a esa grasa que tú llevas dentro", explica.
"Lo hice por una cuestión puramente de salud. Yo veía crecer a mi niña, cada vez tenía más problemas a la hora de dormir, tenía apneas del sueño, me agotaba al subir cuatro escalones", dice Zapata en relación a la decisión que tomó de someterse a la cirugía, tras la cual también acudió a terapia psicológica. Ante esa situación, el cantante de ópera señala que la estética ya le daba igual y que se trataba de atender a su salud.
Tras la intervención, Zapata llegó a perder 60 kg, pasando de los 150 que llegó a pesar a los 90 que le marca la báscula actualmente. Una cirugía importante pero muy avanzada, según cuenta el protagonista, que destaca la rapidez del proceso y anima a las personas obesas a perderle el miedo. "La operación bariátrica hoy en día es una cosa que está muy testada y que funciona fenomenal, no tiene nada que ver con la de antes. Yo tengo seis incisiones en el vientre y no tuve postoperatorio, me mandaron a casa al día siguiente y no he tenido ninguna contraindicación", narra. "Perdamos el miedo. Lo importante es tomar la decisión", añade.
El humor como antídoto contra la gordofobia
Junto al problema de los datos de obesidad surge un fenómeno como la gordofobia. Esta realidad, que describe el rechazo, prejuicio y discriminación hacia las personas con sobrepeso u obesidad, puede generar consecuencias significativas afectando la salud mental y física de quienes la padecen.
En su relato, Zapata hace una interesante reflexión sobre el fenómeno y su manera de afrontarlo, al mismo tiempo que bromea sobre su experiencia: "Cuando tenía que coger un avión llegaba con mi maleta abrazado, me veían subir las azafatas y miraban para el pasillo como diciendo: ¿Lleváis la merienda por si caemos?", cuenta entre risas. Luego, una vez dentro, "no cabes dentro del asiento del avión, pero como digo yo, el que va al lado va protegido porque lleva un airbag natural", comenta.
De ese tipo de experiencias y de otras como las que se tienen durante la infancia siendo un niño con sobrepeso en el colegio, el músico reconoce que ha sido el humor donde él se ha refugiado. "El primero que se llamaba gordo era yo a mí mismo. Tenía el escudo de la música y me defendía con el humor y con la guitarra", asegura.
Como reflexión final, Zapata no duda en incidir en la la importancia de perderle miedo a tomar la decisión de someterse a una cirugía si así lo valora un especialista. A él le cambió la vida. "Cambió lo que soy, cambió mi persona. Empecé a quererme más y a sentirme más seguro".