Desde el primer programa de MasterChef 10 Claudia dejó claro que su juez favorito era Pepe Rodríguez: "Me encanta. ¿Has visto cómo se come las cabezas de las gambas?". Incluso en la visita de María Morales, finalista de MasterChef 9, Claudia quiso marcar territorio: "Tu edición ya terminó", le dijo entre risas a María. Pero lo que no nos esperábamos era que la situación cambiara. Y es que en la última semana, el duro veredicto de Pepe hizo que Claudia empezara a ver con "mejores ojos" a Jordi Cruz.
Los altibajos en la amistad de Claudia y Pepe vivieron un nuevo capítulo en el programa 8 de la décima edición de MasterChef. Por suerte, con final feliz. Y es que en la prueba por equipos a Pepe le tocó capitanear al equipo azul, formado por Yannick, Patricia, Claudia y Luismi. El chef se esforzó al máximo por darle las directrices correctas a su equipo, pero unos trabajaban a un ritmo y otros a otro. Fue entonces cuando Pepe pidió mayor rapidez a todos los integrantes del equipo. Claudia no lo vio así y se pensó que el chef solo le recriminaba su lentitud a ella.
Claudia confiesa que Pepe Rodríguez es su hombre ideal
Pepe Rodríguez quiso reconducir la situación: "Anda, dame un beso. ¡¿Cómo me voy a enfadar yo contigo?!" Claudia confesó que su fuerte carácter, a veces, le jugaba malas pasadas. Y tan solo unos minutos después, volvimos a ver la versión cabreada de Claudia. En el veredicto final, el chef de Illescas volvió a poner enfásis entre la diferencia de ritmo de Yannick y Claudia con respecto a Luismi y Patricia. "Me equivoqué un poco esperando más de vosotros. Ibais con una marchita menos", reconoció Pepe. En ese preciso momento, Claudia torció el gesto y afirmó no estar de acuerdo con el chef. Pepe volvió a mencionar la diferencia de velocidad y a partir de ahí, no quiso hablar más: "Empieza a ser cansino". Dicho esto, en el reparto de delantales negros, Claudia asumió el veredicto de Pepe y cogió uno.
La reconciliación
Ya en la prueba de eliminación, Samantha le preguntó a Claudia cómo fue trabajar a las órdenes de Pepe. "Yo me lo esperaba mejor. Pillé un poco de berrinche. Pero si me enfado es porque me importa". Tras estas palabras de la aspirante, Pepe recogió el guante y lanzó un mensaje de paz: "Me alegra y me gusta que me digas eso. Que te duela. Es buena señal".