La prueba de seguir al chef es la primera puerta al duelo final en MasterChef Celebrity 6y por ello es un reto de extrema complejidad. En esta ocasión, Miki, Juanma, Belén y David han tenido que cocinar junto al chef Jesús Sánchez uno de sus platos estrella: un pichón con remolacha, trigo sarraceno, albóndigas de pichón y un envoltorio acompañado de tierra de remolacha. Mientras que Miki y Juanma, con excepción de algunos pequeños fallos, han logrado presentar un plato similar al del chef, Belén y David han protagonizado un cocinado caótico, hasta el punto de que el cántabro se ha planteado tirar la toalla.
Bustamante ha empezado el cocinado emocionado al tener que replicar un plato de un chef de su tierra. Sin embargo, los nervios se han apoderado de él de forma progresiva. El cantante ha cocinado acelerado, lo que le ha llevado a cometer pequeños fallos que se le han ido acumulando. Por ejemplo, en la primera parte del cocinado, ha picado más cebollas de las que debería y se ha quedado sin este ingrediente para integrarlo más adelante. Este error ha conseguido solventarlo mediante el uso de una chalota, pero no ha sido más que el principio de una cadena de despistes.
David se ha perdido en varias ocasiones, ha adelantado al chef, ha roto una batidora e incluso ha mezclado elaboraciones de forma incorrecta. En este punto, Pepe y Jordi se han llevado las manos a la cabeza. “Lo hemos perdido”, ha señalado Jordi. Al darse cuenta de su fallo, el aspirante se ha planteado abandonar. “Me retiro, tiro la toalla”, ha dicho. “Qué injusto es”, ha añadido.
Lo cierto es que estamos acostumbrados a que David consiga hacer de ese nervio suyo tan característico una virtud en vez de un defecto. Durante ‘MasterChef Celebrity', hemos visto cómo canalizaba su energía y la utilizaba para coordinar cocinados y para llegar a tiempo para presentar buenos platos. Pero el cansancio acumulado y la presión por lograr una de las chaquetillas han jugado en contra de David.
Sin embargo, a pesar de los contratiempos, David ha seguido adelante y ha logrado presentar este complicadísimo plato a los jueces. “Perdóname, Jesús, lo he intentado con todo mi corazón”, le ha dicho al chef al presentarle su plato. “David sufre pero controla”, ha replicado él, que ha valorado muy positivamente la capacidad resolutiva de David. Los jueces le han reconocido su esfuerzo y su perseverancia y han calificado su plato de “milagro”.