Para Mariana Barturen, cualquiera puede llevar un sombrero, solo hay que encontrar el adecuado. Se han convertido en un complemento básico que podemos lucir tanto en invierno como en verano. Su uso lo conocemos desde la antigüedad hasta la época actúal, y siempre está de moda. Cada vez son más las personas que se apuntan a la moda de lucir un sombrero, pero es importante saber elegirlo bien teniendo en cuenta la forma de la cara, estatura, peinado y época del año en la que nos encontremos. Tampoco debemos olvidar el protocolo de uso del sombrero para llevarlo siempre en la situación adecuada, y cómo lucir correctamente tocados y pamelas en las bodas.
Hay un sombrero para cada momento y cada persona. Hay míticos personajes que no imaginamos sin este complemento sobre sus cabezas: Joaquin Sabina, Tip y Coll, Fofó o Paco Rabal. Un sombrero para cada ocasión y cada uno con un curioso nombre. En Flash Moda hemos visitado el taller de Mariana Barturen para conocer las últimas tendencias en moda sobre la cabeza, y os damos unos consejos sobre cómo elegir el sombrero más favorecedor y seguro que os convertís en influencers para vuestro círculo cercano.
Según el tipo de rostro
Es importante pararse ante el espejo y observar cómo es la forma de nuestro rostro para ver cuál es el sombrero que mejor se adapta a nuestra anatomía. Debemos fijarnos en nuestra frente, pómulos, línea de la mandíbula y el largo de nuestra cara.
Rostro cuadrado es el que tienen casi la misma medida de ancho que de largo. Los sombreros que más favorecen son tipo boina o lo que tienen media ala para quitarle dureza a los rasgos faciales. Se deben evitar los de ala ancha.
Rostro redondo es cuando tenemos la barbilla más redondita, las mejillas marcadas y el pelo tienen una línea también redonda. Suelen ser facciones muy juveniles que les favorecen los sombreros de ala ancha y estilo angular, ya que ayudan a equilibrar de forma suave el rostro. Se debe evitar los sombreros de forma redonda, como por ejemplo los sombreros campana, ya que acentuarán la forma circular de la cara.
Rostro alargado es ligeramente con forma rectangular, pero con la barbilla y la sien un poquito más anchas. A este tipo de facciones les favorecen los sombreros de ala ancha y acampanados para que rostros parezca un poquito más ancho de lo que realmente es. Se debe evitar los sombreros de copa alta ya que nuestra cara parecería más alargada.
Rostro con forma de corazón es cuando la barbilla es la parte más estrecha de la cara y la frente es amplia y los pómulos anchos. Los sombreros que más favorecen son los de ala media y caídos en la parte frontal. De esta forma dirigimos la atención a la zona de los ojos proporcionando un equilibrio con la frente. Las personas con este tipo de facciones deben evitar los sombreros de copa alta y boinas.
Rostro ovalado es cuando se asemeja a la forma que tienen un huevo: frente ligeramente más grande que la línea de la mandíbula y el ángulo redondo. Las personas que tienen este tipo de rostro tienen suerte ya que les favorecen la mayoría de los sombreros y los lucen a la perfección.
Un sombrero para cada estatura
Ser más altos o más bajos no es ninguna excusa para lucir bien un sombrero, solamente hay que tener en cuenta lo que nos estiliza más y solamente hay que tener en cuenta dos normas: los sombreros de ala ancha hacen que una persona parezca más bajita, y los sombreros de copa elevada hacen que una persona parezca más alta. Así que según sea nuestra estatura ya sabemos por qué sombrero nos debemos decantar.
Un sombrero para cada época del año
Un sombrero es un complemento de moda perfecto que nos puede favorecer y mejorar mucho nuestro look, pero también tiene una función muy practica dependiendo de la época del año en la que nos encontremos. En verano nos proporciona sombra en la cabeza y rostro, ayudando a evitar las manchas solares en la piel. En invierno nos proporciona calor en la cabeza y nos ayuda a evitar el pelo encrespado ¡una gran solución a este problema!
Lo que tenemos que tener en cuenta a la hora de elegir un sombrero según la época del año es el material el que está hecho. Para el verano mejor sombreros de paja, rafia o incluso sombreros de centeno que se utilizaban para segar al sol. Para el invierno debemos decantarnos por materiales que abriguen tipo fieltro o lana.
La delicadeza de Mariana Barturen
Los diseños de Mariana Barturen son especiales y únicos, capaces de estilizar y enmarcar la mirada. Sólo existen tres talleres de flores como el suyo: uno en Paris, otro en Nueva York y el tercero lo gerenta esta conocida sombrerera. Desde su taller salen las piezas más exclusivas que desfilan en las pasarelas de todo el mundo, y lucen en teatros y en la gran pantalla.
Para Mariana Barturen su negocio es un sueño hecho realidad. Construido sobre un antiguo taller de flores con maquinaria de los años 40 que estaba abocado a desaparecer, la sombrerera no se lo pensó dos veces a la hora de pedir un crédito para comprar toda la maquinaria digna de un museo, y que las personas que trabajaban ese taller pasaran a fabricar todos los adornos para sus sombreros.
Elabora piezas exclusivas para los principales diseñadores, tanto españoles como internacionales. Dior decía que la cabeza es parte de la silueta completa a la hora de definir una señora, y Mariana Barturen sabe cómo trabajar con la silueta y las líneas completas de cada mujer: “No todo vale. Cada pieza tiene un momento y está hecha para una ocasión única. Por eso es importante hacer un estudio de la fisionomía de cada persona, atender a la época del año y la vestimenta que lucirá."
Tenemos que tener en cuenta el pelo, y comprobaremos si queda más bonito si recogemos el pelo porque favorezca que se vea más la línea del cuello. También debemos prestar atención a la estructura del traje. Si tenemos, por ejemplo, un traje que tiene cuello, deberíamos retirar el pelo para dejar el cuello despejado y que pueda lucirse.
El color melocotón funciona muy bien con la piel y favorece a casi todo el mundo, pero hay que tener en cuenta que combine con el color del traje. Lo que se suele hacer es combinar el tocado con el zapato y el bolso y dejar el color del traje que respire. Zapatos, bolsos y guantes deben seguir el mismo patrón de medidas personalizadas, ya que la exclusividad y el buen gusto están en los pequeños detalles. Estos son los consejos que nos da Mariana Barturen, una apasionada por el mundo de la sombrereria artesanal que sabe mimar hasta el último detalle.