A finales del siglo XIX comenzó la tradición de tomar las uvas en Nochevieja en la madrileña Puerta del Sol. Hubo que esperar hasta 1962 para asistir a las primeras campanadas televisadas (en TVE, claro está). Y no fue hasta el 31 de diciembre de 1994 que pudimos ver a Ana Obregón asomada al balcón para desearnos un feliz año nuevo. Ana repitió dos Nocheviejas (las de 1995 y 2004), y en unos días celebrará sus cuartas campanadas en TVE (sin duda las más amargas de su vida, por la pérdida este año de su hijo Alex).
En la entrada en 1995, acompañada de Joaquín Prat, Ana expresó su emoción y nerviosismo por el debut en un evento tan sonado. La noche era muy ventosa, tanto que su capa roja (también lucía una liga roja) no dejaba de zarandearse. Joaquín combatía el frío con una elegante bufanda blanca.
En la bienvenida a 1996, Ana compartió balcón en la Puerta del Sol con Ramón García, con quien ya hacía pareja profesional en el concurso ¿Qué apostamos? Llovía con fuerza en la capital de España, de modo que miles de paraguas estaban desplegados en la plaza cuando tocó comerse las uvas.
Ana volvió a estar junto a Ramontxu en la llegada de 2005, el año con la rima maldita (un sms viral, del que se hizo eco el telediario, convirtió esas campanadas en un reto). La capa del presentador vasco acabó cayendo desde el balcón en esa alocada Nochevieja.
La Nochevieja de este año tan aciago será Anne Igartiburu la que acompañe a Obregón. Serán las Campananas (porque en las de Canarias estará otra tocaya: Ana Guerra). No te lo pierdas, como siempre, en La 1 de TVE y RTVE.es.