Jésica Rodríguez, la expareja del exministro de Transportes, José Luis Ábalos, declaró en el Tribunal Supremo (TS) que "acompañó al exministro a varios viajes oficiales" y dijo no saber quién pagaba el piso en el que estuvo viviendo, si bien cree que lo hacían Ábalos y su entonces asesor, Koldo García, quienes están siendo investigados por una presunta trama de corrupción.
Así consta en la trascripción de su declaración del pasado jueves, a la que ha tenido acceso RTVE, donde a preguntas del juez Leopoldo Puente explicó que acudía a viajes oficiales del ministro sin pagar "nada". La joven testificó el pasado 27 de febrero ante el instructor del caso, que investiga el presunto cobro de mordidas por parte de Ábalos y de Koldo García, a cambio de la adjudicación de contratos públicos de obras y para la compra de material sanitario en plena pandemia. Rodríguez compareció para aclarar las circunstancias sobre el piso en el que residió dos años y medio, su contratación en dos empresas dependientes de Transportes y los viajes oficiales a los que acompañó al exministro.
"Siempre lo ha pagado el señor Ábalos, excepto cuando lo gestionaba Koldo (...) o aunque Koldo lo gestionara y él me cogiera el billete o lo que fuera, luego el señor Ábalos se lo abonaba", afirmó en su declaración. Además, reconoció que no preguntó nunca a cerca de quién se hacía cargo de los gastos, pero que lo hablaban delante de ella. Entre varios de esos viajes, Jésica Rodríguez destacó destinos internacionales, como Londres o Montreal, y nacionales. "Estuvimos, por ejemplo, en Sevilla. Todos los meses hacíamos viajes", indicó.
Cree que el piso "lo estaba pagando el señor Ábalos"
Otro de los ejes de la declaración de esta testigo fue el piso ubicado en la Plaza de España de Madrid, donde vivió como inquilina entre marzo de 2019 y marzo de 2022 con una renta mensual de 2.700 euros, un hecho donde la Fiscalía Anticorrupción ve indicios de cohecho.
Rodríguez narró que acabó allí porque cuando empezó su relación con Ábalos compartía piso con unas amigas, lo que impedía que el entonces ministro fuera a su casa. "Me dijo que cogiera un piso que a mí me gustara", señaló. Ella escogió ese porque "estaba cerca de Ferraz", donde está la sede central del PSOE, y de la universidad. "Koldo fue el que se puso en contacto conmigo y me dijo que el día de la visita yo tenía que quedar con un tal Alberto", detalló.
Los informes de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil identifican a Luis Alberto Escolano como el presunto testaferro del supuesto conseguidor de la trama, el empresario Víctor de Aldama, que se hizo cargo del pago del alquiler llegando a abonar 82.298 euros.
El resto de las rentas mensuales fueron costeadas por Joseba y la hija pequeña de Koldo, por un total de 5.803 euros, de acuerdo con la Benemérita. "Yo no sé quién pagaba el piso. Yo imaginaba que lo estaba pagando el señor Ábalos", admitió Jésica, aunque matizando que, ante cualquier incidencia hablaba con Escolano o con García porque este último "siempre gestionaba todo, o sea, hasta incluso si tenía que ir a comprar tabaco o medicamentos".
La joven asumió que el alquiler lo pagaba Ábalos, "como todo". "Sí, como todo lo que siempre yo tenía. O sea, si me regalaban unas flores, aunque me las trajera el señor Koldo, eran del señor Ábalos", desarrolló. "Nunca aboné nada", remachó.
Los contratos en Ineco y Tragsatec
Por otro lado, sobre sus contratos en dos empresas públicas, en las que aseguró que cobró pero sin trabajar, la expareja de Ábalos le explicó al juez cómo consiguió el de la consultora Ineco. Así, relata que el exministro le recomendó que trabajara mientras estudiaba, y que por eso le envía su currículum por WhatsApp.
En este punto, el juez le preguntó si la contrataron por encargo del exministro de Transportes, a lo que ella respondió que imagina que sería por eso, porque "yo realmente no había echado currículum en ningún sitio, solamente le di mi currículum a él".
En Tragsatec tampoco realizó trabajo alguno y ni siquiera sabía donde estaba la oficina, según confesó: "Yo no tenía tampoco ningún interés en el trabajo, ni nada, al principio. Me lo dijo el señor José Luis, que me vendría bien trabajar". "No tenía usted interés en el trabajo porque tampoco tenía que trabajar, podría tener interés en cobrar la nómina, que supongo que interés sí que tendría, por poco que fuera", le replicó el fiscal anticorrupción Alejandro Luzón. "Sí", contestó ella.
Juez y fiscal también quisieron saber por qué envió el 23 de febrero de 2021 un mensaje de WhatsApp a Ábalos avisándole de que se le acababa el contrato en Ineco. La joven indicó que, simplemente, por ponerlo en su conocimiento, aunque entonces ya no seguían juntos. Una semana después salió de la empresa y "muy pocos días después" –según destacó Luzón– acabó contratada en Tragsatec, empresa pública dependiente de la SEPI, donde estuvo seis meses. Sobre cómo recaló en Tragsatec, Rodríguez aseguró que no lo recordaba. Solo detalló que esta vez no hizo siquiera entrevista.