Israel ha confirmado los nombres de los cuatro rehenes muertos que serán entregados el jueves por Hamás. Entre ellos, tal y como había adelantado el grupo palestino, están Shiri Bibas y sus dos hijos Ariel y Kfir —que fueron retenidos por la milicia palestina con nueve meses y cuatro años, respectivamente—, y también Oded Lifshitz, de 84 años, cuyo nombre se ha conocido este miércoles.
"Israel ha recibido la lista de rehenes fallecidos que serán liberados mañana, de conformidad con el marco", afirma un comunicado de la oficina del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, quien ha afirmado en un mensaje en vídeo que su corazón y el de todo el país "está desgarrado".
El presidente israelí, Isaac Herzog, ha asegurado durante una visita en Roma que los próximos días "serán especialmente desgarradores". "Contendrán dolor, pena y tristeza, ya que los cuerpos de los rehenes nos serán devueltos mañana, pero también alivio e incluso esperanza, ya que los rehenes vivos, nuestros hermanos, serán liberados en Shabat", ha afirmado el mandatario.
Hamás afirma que los cuatro murieron en ataques israelíes
El portavoz del brazo armado de Hamás, las Brigadas al Qasam, Abu Obeida, ha subrayado que los cuatro rehenes cuyos cuerpos serán entregados el jueves "fueron capturados con vida" el 7 de octubre y que los "centros de detención" en los que se encontraban fueron "bombardeados deliberadamente" por la aviación israelí.
El grupo palestino confirmó el miércoles que el próximo sábado liberará a los únicos seis rehenes vivos que quedan en la Franja de los 33 que deben entregar en la primera fase del acuerdo alcanzado entre Israel y Hamás, que comenzó el 19 de enero. Además, informó de que este jueves entregarían cuatro cuerpos, entre ellos los de parte de la familia Bibas. El padre, Yarden, fue liberado con vida durante el cuarto intercambio de la tregua.
"Son horas difíciles para nosotros, tras ser informados de que nuestro querido Oded se encuentra entre los rehenes fallecidos que serán devueltos a Israel mañana", ha afirmado la familia Lifshitz en un comunicado en el que aseguran que durante 502 días han "esperado y rezado por un resultado diferente".
Oded, periodista y activista, fue capturado el 7 de octubre en el Kibutz de Nir Oz junto a su mujer, Yocheved, que fue liberada durante la primera tregua pactada en noviembre. Según el Foro de Familiares de Rehenes, este hombre se dedicaba a transportar "a gazatíes enfermos de cáncer desde la Franja a hospitales israelíes".
Tras el anuncio de las autoridades israelíes, la familia Bibas ha pedido en un comunicado que "se abstengan de elogiar" a sus seres queridos "hasta que haya confirmación tras la identificación final".
El Comité Internacional de la Cruz Roja en Israel ha pedido "que todas las liberaciones se lleven a cabo de manera privada y digna, incluso cuando impliquen trágicamente a los fallecidos".
Se confirma la muerte de los Bibas
Días antes de que se produjera la primera liberación de rehenes, pactada entre Israel y Hamás en noviembre de 2023, la Yihad islámica informó de la muerte de Shiri Bibas y sus dos hijos en un ataque israelí que nunca fue confirmado por el Gobierno de Netanyahu. Los Bibas al completo fueron capturados el 7 de octubre en su domicilio de Nir Oz, ubicado a poco más de un kilómetro y medio de la Franja de Gaza, aunque el padre permaneció separado del resto de la familia.
El momento de su secuestro, de hecho, fue capturado en vídeo y difundido por Hamás. Yarden pidió que solo se lo llevaran a él y que dejaran a los niños y a su mujer y "se fue pensando que le habían hecho caso", relató Jimmy Miller, primo de Shiri, en una entrevista a RTVE.es cuando se cumplía un año del 7 de octubre. Israel nunca confirmó su fallecimiento, así que sus seres queridos han vivido todo este tiempo sin saber si estaban vivos muertos.
Kfir era el más pequeño de todos los rehenes —tenía tan solo 9 meses cuando fue capturado— y sorprendió que ni él ni su hermano, que entonces tenía tres años, no fueran liberados durante la primera tregua, cuando 105 rehenes regresaron a Israel. El pelo pelirrojo de ambos se convirtió en un símbolo en las protestas que han tenido lugar en Israel desde el 7 de octubre, cuyos participantes acuden en muchos casos con camisetas naranjas.