La Comisión Europea (CE) propone un embargo gradual del petróleo ruso que suspenda las importaciones de crudo en seis meses y de productos refinados para final de año. Así lo ha anunciado en el Parlamento europeo la presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, que ha presentado este miércoles la propuesta para el sexto paquete de sanciones a Rusia por la guerra de Ucrania. El paquete deberá ser aprobado por unanimidad por los estados miembros de la Unión Europea (UE), pero por el momento Hungría rechaza la propuesta planteada este miércoles.
"Eliminaremos por fases el suministro de petróleo crudo en seis meses y de los productos refinados para final de año", ha explicado Von der Leyen. "Esto será una prohibición total de importaciones de todo el petróleo ruso, por mar o por oleoducto, crudo y refinado".
La presidenta de la Comisión asegura que el embargo de importaciones se hará de manera ordenada "para asegurar rutas de suministro alternativas y minimizar el impacto en los mercados globales".
"No será fácil - ha reconocido - Algunos estados miembros son fuertemente dependientes del petróleo ruso. Pero simplemente tenemos que trabajar en ello".
El ministro de Exteriores ucraniano, Dmytro Kuleba, ha valorado positivamente la nueva propuesta de sanciones, aunque ha criticado tanto la fase de transición hasta fin de año como a los países que rechazan el plan. "No nos alegra que se retrase cinco o seis meses, pero es mejor que nada," ha dicho Kuleba en una retransmisión en directo a través de su cuenta de Twitter,
Posible exención para Hungría y Eslovaquia
Más de un 40% del suministro que abastece a la Unión Europea proviene de Rusia y Hungría ya ha anunciado que se opone a este embargo y que no va a votar a favor, según el ministro de relaciones exteriores ruso.
Precisamente, para salvar la oposición de Hungría, la Comisión va a proponer que este país y Eslovaquia puedan beneficiarse de una exención en el paquete de sanciones para continuar comprando petróleo ruso hasta finales de 2023, según el contrato en vigor, informa la agencia Reuters, que cita una fuente anónima de la CE.
Budapest ya ha mostrado su discrepancia con los planes de sanciones. "En la propuesta actual no vemos ningunos planes para garantizar cómo se va a gestionar la transición, y cómo se va a garantizar la seguridad energética de Hungría", ha declarado a Reuters el portavoz del gobierno húngaro, Zoltan Kovacs.
La República Checa quiere un periodo de transición mayor, de dos o tres años, para renunciar al petróleo ruso, un embargo contemplado en las nuevas propuestas de sanciones de la Unión Europea (UE). "Estamos tratando de conseguir un aplazamiento por dos, tal vez tres años", ha declarado el primer ministro checo, Petr Fiala, tras el Consejo de Ministros.
Por su parte, Dinamarca y Finlandia apoyan la propuesta de la UE, según han comunicado los primeros ministros de ambos países en una rueda de prensa conjunta ofrecida este miércoles en Copenhague.
Italia también apoya las sanciones. El ministro de exteriores italiano, Luigi Di Maio, ha transmitido este miércoles a su homólogo ucraniano, Dmytro Kuleba, que Italia apoyará totalmente y sin vetos el sexto paquete de sanciones preparado.
El mayor banco ruso y el patriarca Kiril, entre los sancionados
La propuesta de la Comisión incluye, además de la prohibición de importación de petróleo, la ampliación de la lista de entidades y personas sancionadas.
La CE propone sacar del sistema de mensajería financiera Swift a Sberbank, el banco más importante de Rusia, y a otras dos entidades financieras.
"Vamos a desconectar de Swift a Sberbank, el mayor banco de Rusia, que representa cerca del 37 % de todo el sistema financiero ruso, y a otros dos bancos importantes - ha dicho Von der Leyen - Así, golpeamos a bancos que son críticos para el sistema financiero ruso y la capacidad de Putin para emprender su destrucción".
Hasta ahora, siete bancos rusos han sido excluidos de Swift. A principios de marzo fueron expulsadas las entidades Bank Otkritie, Novikombank, Promsvyazbank, Bank Rossiya, Sovcombank, Vnesheconombank (VEB), y VTB, esta última la segunda mayor del sistema financiero ruso. Sin embargo, entonces quedaron fuera Sberbank y Gazprombank, que gestiona las compras de productos energéticos por parte de los Estados miembros de la UE.
Entre las personas, se incluye ahora al patriarca Kiril, cabeza de la Iglesia Ortodoxa rusa, que ha apoyado la operación militar rusa en Ucrania, según informa Afp. También se incluye a militares rusos supuestamente responsables de las matanzas de civiles en Bucha y Mariúpol, y a la familia del portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.
En total, son 58 nombres nuevos que se suman a los de 680 individuos y 53 entidades rusas sancionadas desde finales de febrero, en las que se incluye al presidente ruso, a su ministro de Exteriores, Serguéi Lavrov, y a oligarcas cercanos al Kremlin.