La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y Reto Demográfico, Teresa Ribera, ha asegurado que espera que las medidas acordadas en la Unión Europea para frenar los precios de la energía se puedan aplicar en "tres o cuatro semanas". "Calculamos que en tres o cuatro semanas habrá un pronunciamiento de la Comisión Europea y podremos hacerlas inmediatamente operativas", ha señalado en una entrevista a TVE, tras afirmar que las medidas, "van a permitir que lo sintamos en la factura eléctrica".
Los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea acordaron el viernes reconocer a España y Portugal como una "isla energética", lo que permitirá reducir el precio del gas inmediatamente y repercutirá directamente en el de la electricidad. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, venía reclamando en los últimos días que los Veintisiete tomasen en cuenta la situación especial de la Península Ibérica en materia energética y, tras un tenso debate, y ante la negativa de países como Alemania o Países Bajos, se ha conseguido finalmente este objetivo.
Ribera insta a buscar otros proveedores de gas
La ministra ha defendido el acuerdo en Bruselas y lo ha calificado de "imprescindible", pese a las críticas de la oposición. Entre las medidas, ha resaltado que se buscar desacoplar el precio del gas de la electricidad: "Hay que pagar el gas en todo caso, pero queremos que ese precio del gas no sea el precio al que se pague el resto de la electricidad que se produce, que tiene un precio más barato. Lo que haremos es separar el gas del mecanismo de formación de precio", ha dicho.
Además, ha recordado que las medidas serán temporales y vinculadas a una excepcionalidad que se está viviendo, ya que el objetivo es que se puede habilitar un mecanismo de compra conjunta de gas para que caiga por debajo de los umbrales actuales. Ribera ha detallado, además, que el aumento del precio del gas se debe, por un lado, al incremento de la demanda del gas a nivel mundial, algo que, según opina, los productores "no tenían previsto". Por el otro, la ministra ha apuntado al papel de Rusia en la guerra de Ucrania, ya que es "el principal proveedor" de gas hacia la Unión Europea.
"La situación de Rusia va a seguir siendo complicada, por tanto, es capital buscar otros proveedores", ha explicado en relación con la reciente visita a Europa del presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, en la que el mandatario anunció que suministrará un 68% más de gas a los países europeos.
Argelia, Noruega o Qatar, entre las alternativas al gas ruso
En este sentido, la ministra ha citado como posibles proveedores, además de Estados Unidos, a Argelia, Noruega, Qatar o Australia. "Sustituir a un gran productor en poco tiempo cuesta mucho", ha admitido. Ribera ha hecho hincapié en la necesidad de ser un país "autónomo" en cuanto a abastecimiento energético y ha apostado por las energías renovables como una solución.
Preguntada por la garantía de que España siga recibiendo gas procedente de Argelia tras las críticas de este país por el cambio de postura del gobierno español sobre el Sáhara, Ribera ha indicado que Argelia, además de ser un gran proveedor de gas para España, es un país "aliado" con el que existe una "buena relación de vecindad". "Aspiramos que así siga siendo", ha afirmado.