El presidente de Rusia, Vladímir Putin, ha advertido este jueves que puede congelar y gestionar los activos de las empresas extranjeras que decidan abandonar el país como consecuencia de la invasión rusa en Ucrania.
"Nosotros no vamos a cerrarnos a nadie, estamos abiertos a trabajar con todos nuestros socios extranjeros que lo deseen. Los derechos de los inversores y colegas extranjeros que permanecen en Rusia y trabajan en Rusia deben protegerse de manera confiable", ha dicho.
Por ello, Putin ha pedido a su Gobierno que "no pierda de vista esto, ante los que van a cerrar sus plantas de producción, aquí hay que actuar con decisión". "Habrá que introducir la gestión externa y luego transferir estas empresas a los que quieren trabajar", ha remarcado. Y ha añadido: "Hay suficientes instrumentos legales, instrumentos de mercado" para poder llevarlo a cabo.
El mandatario ha respondido así a la salida o cese de operaciones en Rusia de cientos de empresas extranjeras de bienes y servicios de múltiples sectores desde el inicio de la ofensiva contra Ucrania el 24 de febrero.
Dice que está cumpliendo sus obligaciones energéticas
Además, también ha señalado que está cumpliendo sus obligaciones de suministro de recursos energéticos a Europa y otras partes del mundo, incluida Ucrania.
"Acerca de esos países que están dando pasos hostiles hacia nuestro país y nuestra economía, sabemos muy bien que están llamando a sus ciudadanos a apretarse el cinturón, a vestirse más abrigados. Y hablan de las sanciones que nos están imponiendo como el motivo del deterioro de su situación", ha relatado.
Putin también ha rechazado que Rusia sea culpable del aumento de los precios del petróleo en EEUU, y ha especificado que fue decisión de Washington dejar de importar combustibles rusos y se ha referido a que ese país ahora trata de acordar la compra de petróleo a países a los que anteriormente impuso sanciones, como Irán o Venezuela.
EE.UU. dice que Rusia saldría perjudicada y podría ser demandada
Por su parte, Estados Unidos ha opinado este viernes que Rusia saldrá perjudicada si incauta los activos de las empresas extranjeras que están abandonando el país. Asimismo, ha advertido que podría exponerse a demandas de esas compañías.
La portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, ha reaccionado en la red social Twitter a la afirmación del presidente ruso. "Cualquier decisión ilegal de Rusia de incautar los activos de estas compañías resultará en último término en todavía más dolor económico. Subrayará el mensaje claro a la comunidad empresarial global de que Rusia no es un lugar seguro para invertir y hacer negocios", ha recalcado.
Psaki ha añadido que el país norteamericano apoya "a las compañías estadounidenses que están tomando decisiones duras sobre el futuro de sus operaciones en Rusia".