"O los compras o comes. Con unos ingresos de 500 o 600 euros no puedes decidir". Para el presidente de la Red Europea de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social en el Estado Español (EAPN-ES), Carlos Susías, el baile de precio de los test de COVID-19 supone una situación "claramente injusta" para las familias vulnerables, aquellas con recursos económicos limitados.
Según una encuesta realizada por Facua a 150 farmacias del territorio nacional, los precios varían hasta un 102% entre los distintos establecimientos. "Actualmente, los venden por importes que oscilan entre 4,95 y 10,00 euros", apuntan. Un ejemplo de ello es el de la farmacia La Estación (Valladolid), que ha ido aumentando hasta los 7,50 euros. "Los llegamos a vender a 3,50", explica a RTVE.es. Ahora los distribuidores se los ofrecen en torno a los 4,50 o 4,20 euros, aunque reconocen que "es muy difícil conseguirlos por menos de cinco".
“Se quedan en encerrados en casa porque son pobres“
"Los que tienen más dinero pueden asumir esta subida de los costes, pero no los más vulnerables", advierte Susías. "Una familia monoparental con tres menores y con unos ingresos de 600 euros no puede permitirse hacerse test de antígenos antes de ir a algún tipo de reunión", como las que tienen lugar en Nochebuena y en Nochevieja. Entonces solo quedan dos opciones, apunta, o deciden arriesgarse y asistir sin ninguna prueba "o se quedan encerrados en casa porque son pobres".
Una familia de cuatro miembros invierte hasta 40 euros
Facua ha denunciado en los últimos días la "especulación" en los precios que durante estas semanas ha inflado los costes de las pruebas en algunas farmacias. De acuerdo con sus datos, una familia de cuatro miembros puede llegar a invertir hasta 40 euros cada vez que tengan que realizarse los test.
Esta cifra, multiplicada por la cantidad de encuentros propios de las fiestas, supone un importe imposible para muchas economías: si la unidad familiar únicamente necesitase efectuarse tests de autodiagnóstico los días 24 y 31 de diciembre y la noche de reyes, el gasto alcanzaría los 120 euros. No obstante, "puede haberlos más caros en otros establecimientos", sugiere el secretario de la asociación, Rubén Fernández.
El mapa de la pobreza severa en España de EAPN-ES muestra que el 9,5 % de la población, unos 4,5 millones de personas, vivían en esta condición en 2020. El umbral de renta para considerar que un hogar está en pobreza severa es de 6.417,3 € por unidad de consumo al año, un presupuesto con el que tienen que cubrir todas sus necesidades (vivienda, alimentación, ropa, educación, salud, energía, ocio...) y que difícilmente deja lugar a la compra de pruebas de detección de la COVID-19.
“Genera una situación desventaja social muy importante“
"En estas fechas de reuniones todos queremos tener seguridad, protegernos y proteger a los demás", pero las familias vulnerables no tienen acceso a ello, a lo que "se ha creado como una necesidad" para disfrutar de las fiestas, cuenta Susías. De acuerdo con el presidente de EAPN-ES, es una situación de malestar "añadida a las situaciones por las que ya están pasando" y que "genera una situación de desventaja social muy importante".
Las farmacias, la otra cara de la moneda: "Nos dicen que somos unos ladrones"
Por qué suben y por qué varían tanto los precios de una ciudad a otra son dos preguntas que están presentes en muchas conversaciones durante las últimas semanas. Los clientes, según cuenta la farmacia Hermosilla 5 (Madrid), tienden a culpar a las farmacias. "Nos dicen que somos unos ladrones", explica. "Nosotros no tenemos la culpa, pero somos los que ponemos la cara". Según este establecimiento, son "los laboratorios y el Gobierno, si no establece un límite", los verdaderos responsables.
Lo advierten también los farmacéuticos en el seguimiento de Facua: algunas empresas distribuidoras están inflando los precios aprovechando el gran aumento de la demanda. Mientras que antes de agotarse las existencias el importe más bajo fue de 3,55 euros, la encuesta encontró que en Sevilla las pruebas alcanzaban los 6,50 euros, en Madrid los ocho y en Valencia los siete y diez euros.
"El problema es que los han tenido que traer de fuera", sugiere la farmacia Vázquez (Asturias). Por su parte, el establecimiento La Estación (Valladolid) habla de subastas de test: "Cuando acuerdas un precio y te los van a traer te dicen que en otro lado se los pagan más caros y te quedas sin ellos". "No hay nadie que controle eso".
Facua critica que ni el Ministerio de Sanidad ni las comunidades han fijado precios máximos, favoreciendo así los desproporcionados márgenes de beneficios que se están produciendo. Como recoge la asociación, se solicitó a Sanidad que pusiese topes a los importes de las pruebas, pero finalmente se hizo solo con determinados tipos de mascarillas, dejando la otra cuestión en manos de las comunidades autónomas. "Lamentablemente, no se ha querido proteger los intereses de los consumidores", lamenta Sánchez.
"Hay quienes mantienen el margen y quienes quieren dar un servicio"
Como reconocen las farmacias entrevistadas por RTVE.es, el aumento de los precios en los establecimientos se debe, sin lugar a dudas, a un mayor coste de las pruebas por la escasez de las mismas. Sin embargo, también sugieren que, mientras algunas farmacias recortan su beneficio para hacer el producto asequible, otras lo conservan. Según Vázquez (Asturias), "hay quiénes mantienen el margen y quiénes quieren dar un servicio aunque ganen un poco menos". Esta farmacia los distribuye a seis euros y prevé que este fin de semana pueda hacerlo a solo tres euros.
Desde la farmacia Casanueva Luis, en Murcia, afirman haber mantenido el precio de venta estable, en torno a los seis euros, aunque tienen constancia de que en muchos establecimientos este ha aumentado. También la sevillana Alhucema sugiere que sus pruebas siempre han costado "lo mismo que un test de embarazo" y desde el principio las ofrecen a 7,50 euros.
“Si ninguna farmacia los compráramos tendrían que bajarlo“
"Nos ofrecen test muy caros, no los queremos, nos parecen un abuso", cuenta Saavedra (Pontevedra). Allí desde hace algunos días no tienen pruebas a la venta porque se niegan a subir el coste más allá de los seis euros: "Parece que nos estamos aprovechando, pero no es así". "Si ninguna farmacia los compráramos supongo que tendrían que bajarlo", propone.
No obstante, otros establecimientos como Red Farma (Valencia), que vende actualmente los test a nueve euros después de haber alcanzado un máximo de diez, apuestan por continuar ofreciendo tests, aunque esto signifique el baile de precios, pues consideran importante satisfacer la demanda durante las fiestas. Lo mismo recomienda la farmacia Hermosilla 5 (Madrid), con pruebas a un precio de 6,90 euros, un importe que se ha reducido desde los 7,90 euros en los últimos días tras la bajada de los costes por parte de sus proveedores.