El primer ministro británico, Boris Johnson, ha informado este miércoles de que Reino Unido ha superado los 10 millones de personas que han recibido la primera dosis de una vacuna contra la COVID-19.
Johnson ha subrayado que cada vez hay más pruebas de que las vacunas logran minimizar las complicaciones "graves" y "reducir las muertes" por coronavirus en todas las variantes que se han analizado.
El jefe de Gobierno británico también ha recalcado que "estas vacunas no nos harán invulnerables". "Ninguna vacuna ha logrado nunca ofrecer el cien por cien de la protección a todo el mundo", ha añadido en una rueda de prensa.
Retrasan la segunda dosis
Reino Unido ha decidido retrasar la segunda dosis de la vacuna hasta doce semanas tras recibir la primera, para maximizar cuanto antes el número de personas que tienen cierta inmunidad.
En este sentido, Johnson se ha referido a un estudio preliminar de la Universidad de Oxford que señala que la vacuna de la compañía farmacéutica AstraZeneca es efectiva en un 76% durante los tres meses siguientes a recibir la primera dosis.
Los autores del estudio también afirman que han observado una reducción del 67% en los contagios después de la primera dosis en los voluntarios de sus ensayos en Reino Unido.
El ministro británico de Sanidad, Matt Hancok, ha calificado los resultados del estudio preliminar de "absolutamente magníficos" y ha daado las gracias a "todos los que han hecho su parte" para lograr que más de 10 millones de británicos hayan recibido su primera dosis de la vacuna.
Johnson ve signos de "esperanza"
Reino Unido ha registrado en las últimas 24 horas 19.202 nuevos contagios, comparado con los 16.840 registrados ayer, y 1.322 fallecidos por coronavirus.
Sin embargo, el nivel de nuevas infecciones en los últimos siete días se ha reducido un 25,2% y las muertes un 13,4%. La ocupación en los hospitales también ha comenzado a descender y 32.851 personas permanecen ingresadas, frente a las 39.219 que estuvieron internadas el pasado 19 de enero.
El primer ministro ha asegurado que estas cifras ofrecen algunos signos de "esperanza", aunque ha insistido en que son todavía "alarmantemente elevadas".
El consejero médico del Gobierno, Chris Whitty, ha indicado que el país ha superado el pico de la presente ola de la pandemia. "Eso no quiere decir que nunca vayamos a tener otro pico, pero en este momento, siempre que la gente siga cumpliendo las normas, nos encontramos en una pendiente descendente de casos", ha aseverado.
El primer ministro descarta relajar las restricciones inmediatamente
A principios de año, Inglaterra, que es la más poblada de las cuatro naciones que conforman Reino Unido, volvió a entrar en un confinamiento nacional, que incluye restricciones para viajar, así como el cierre de tiendas no esenciales, escuelas, restaurantes y pubs.
El inquilino del 10 de Downing Street ha señalado que, a pesar de la ligera mejora de las cifras, no relajar inmediatamente las restricciones. "Entiendo que hay gente que quiere que lo hagamos rápidamente. Comprendo esa urgencia, pero lo que no quiero, ahora que estamos progresando con las vacunas, es que nos veamos forzados a retroceder. Hay que ser cautos", ha manifestado.
Johnson informó la semana pasada de que el Gobierno tratará de comenzar la apertura de las escuelas a partir del lunes 8 de marzo, después de vacunar a los grupos más vulnerables a mediados de febrero.