Más de 5.000 personas han sido detenidas este domingo en las protestas que han tenido lugar en Rusia en apoyo del líder opositor Alexéi Navalny, en prisión preventiva tras su regreso de Alemania, donde se recuperaba del envenenamiento que sufrió el año pasado.
Según el portal OVD-info, especializado en el seguimiento de arrestos, en las manifestaciones, que se han celebrado en 142 ciudades del país, las fuerzas de seguridad rusas han detenido hasta el momento a 5.021 personas. La mayoría de las detenciones se han producido en Moscú.
Entre los detenidos se encuentra la esposa de Navalny, Yulia Navalnaya, de acuerdo con el canal de televisión independiente Dozhd y la agencia estatal TASS, que indica, citando a su abogada, que fue arrestada cuando marchaba junto a otros manifestantes hacia la prisión de Matrósskaya Tishiná, donde está encarcelado su marido. Navalnaya ya fue detenida en las protestas del pasado día 23, en las que fueron arrestadas más de 4.000 personas.
En la capital, las detenciones comenzaron incluso antes del inicio de la marcha, convocada inicialmente en la plaza de Lubianka, donde se encuentra la sede del Servicio Federal de Seguridad (FSB, antiguo KGB).
Fuerte dispositivo de seguridad
El fuerte dispositivo de seguridad y el cierre de las estaciones de metro más cercanas, ha impedido a los manifestantes llegar a Lubianka, por lo que el equipo de Navalny cambió la ruta para establecer los puntos de reunión en las paradas de Sújarveskaya y Krasnye Vorota.
Allí, según ha podido constatar Efe, la policía ya esperaba a los manifestantes a las salidas del metro y procedió a detener masivamente a todo aquel que se acercaba al lugar de encuentro. Desde allí una columna de miles de manifestantes ha procedido al Anillo de los Bulevares y a la plaza Komsomolskaya, conocida como la de los tres ferrocarriles, donde agentes antidisturbios han formado varios cordones humanos para impedir el acceso.
Antes de que la plaza fuera despejada los allí congregados han gritado "libertad para Alexéi Navalny". Al menos un hombre ha resultado herido por el uso de la fuerza de la policía y ha tenido que ser vendado en la frente. Los manifestantes han marchado hacia la prisión de Matrósskaya Tishiná, gritando "uno para todos y todos para uno. Suéltalo, Libertad" en referencia al encarcelado opositor.
Detenciones fueron especialmente violentas en San Petersburgo
Las detenciones han sido especialmente violentas en San Petersburgo, donde las fuerzas del orden han impedido el acceso a la céntrica Avenida Nevski y donde finalmente los ciudadanos -varios miles- se han congregado en una plaza cerca del Teatro de la Juventud.
Posteriormente han marchado hacia la plaza Sennaya, donde la policía ha recurrido a gas pimienta y descargas eléctricas contra algunos de ellos, además de pegar con porras a los manifestantes y a varios periodistas, según el portal independiente Meduza.
Asimismo, varios ciudadanos se han dirigido hacia la Asamblea Legislativa, donde también se han producido inmediatamente detenciones.
La portavoz de la embajada de Estados Unidos en Rusia, Rebecca Ross, ha condenado en un mensaje de su cuenta de Twitter el comportamiento de las fuerzas de seguridad contra manifestantes pacíficos y periodistas que portan chalecos que les identifica como tales. "Rusia debe respetar los compromisos internacionales sobre los derechos humanos", ha escrito.