Cuatro días después de la victoria de Joe Biden en las elecciones en Estados Unidos, Donald Trump ha reaparecido en público en el cementerio de Arlington para conmemorar el Día de los Veteranos, pero ha evitado pronunciarse sobre la batalla electoral. La última vez que compareció fue el jueves, dos días antes de su derrota, y lo hizo para acusar a los demócratas del robo de las elecciones.
El presidente guarda silencio en público y mantiene la transición de poder bloqueda, pero sí se manifiesta en Twitter, donde sigue difundiendo acusaciones de irregularidades en el proceso electoral sin aportar ninguna prueba y a pesar de que la red social etiqueta sus mensajes como información engañosa. Y mientras, el Partido Republicano cierra filas en torno a su líder y evita reconocer al presidente electo.
Transición incierta en EE.UU. ante la negativa de Trump
Georgia volverá a contar los votos
El estado de Georgia ha ordenado el recuento a mano de los cerca de cinco millones de votos emitidos en los comicios ante la estrecha ventaja de Biden obre Donald Trump en un territorio que no escoge a un candidato demócrata a la Presidencia desde 1992.
El secretario de Estado, Brad Raffensperger, máxima autoridad responsable del proceso electoral a nivel estatal, ha anunciado que la decisión afecta únicamente a la elección presidencial y prevé que el proceso concluya el 20 de noviembre, la fecha límite para que cada estado certifique sus resultados. "Con un margen tan estrecho, se requerirá un recuento completo, a mano, en cada condado. Eso ayudará a construir confianza", ha señalado en rueda de prensa.
Raffensperger ya apuntó a esta posibilidad la pasada semana, el mismo día en que el demócrata adelantó a Trump en el recuento y antes de la declaración de su victoria. Sin embargo, el republicano ha confirmado que podría haber dos recuentos, ya que, si se confirma que el margen de victoria del ganador es inferior al 0,5 %, el equipo del perdedor tiene derecho a solicitar un nuevo conteo bajo la ley estatal.
Sin pruebas de fraude electoral
Georgia cede así a las presiones de la campaña del presidente, que había pedido contar a mano las papeletas entre denuncias de fraude electoral sobre las que todavía no aportan evidencias. "No hemos encontrado ningún fraude generalizado. Investigaremos cada caso que nos traigan los votantes", ha indicado.
En la misma línea se han manifestado los secretarios de Estado del resto de territorios estadounidenses. Según una investigación del diario The New York Times, ninguna autoridad electoral ha detectado irregularidades en el recuento de papeletas. De hecho, el martes un trabajador del Servicio Postal de Pensilvania que denunció fraude en Pensilvania, el estado clave que dio la victoria a Biden, se retractó ante el juez el martes.
Con todo, una hipotética victoria del presidente en Georgia no alteraría el resultado electoral, ya que no superaría el umbral de 270 votos electorales necesarios para un segundo mandato. Y con el resultado pendiente en Carolina del Norte y Arizona, el mandatario no tiene ninguna opción ante el demócrata.
Trump ha sido declarado ganador en Alaska este miércoles por la prensa estadounidense con el mismo sistema de proyecciones que dio la victoria a Joe Biden, que ya acumula cinco millones de votos más que el presidente. Y aunque el presidente no se ha manifestado sobre su victoria allí, sí lo ha hecho su hija, Ivanka Trump. "Última hora: el presidente Trump y los senadores republicanos ganan Alaska por una enorme mayoría de 20 puntos. ¡Gracias Alaska!", ha escrito en Twitter, la misma plataforma donde ha puesto en duda los resultados en estados que Biden arrebató a Trump.