Nunca pasa desapercibida y es la estrella que mejor sabe acaparar la atención en las alfombras rojas. No es la más elegante ni la que viste mejor pero es un indiscutible icono de la moda, como Rihanna. Todo empezó con la túnica transparente con estampado de bambú que Versace lanzó en 1997. Amber Valletta lo sacó en la pasarela pero se hizo mundialmente famoso cuando la cantante lo llevó a la 42ª edición de los premios Grammy en el año 2000.
Desde entonces López se ganó un hueco en el museo de la moda y ahora el Consejo de Diseñadores de Moda Americanos ( CFDA) la escoge como el icono ‘fashion’ de 2019. “Es un verdadero honor que todos estos increíbles diseñadores y artistas te escojan por tu estilo, porque además me encanta la moda. Me encanta la ropa, me ha gustado desde siempre. Cuando era una niña y vivía en el Bronx rajaba las sudaderas y los vaqueros imitando a Janet Jackson, Madonna y Cindy Lauper. ¡Es un momento muy especial!”.
López deslumbró en la gala con un espectacular vestido de Ralph Lauren compuesto por un crop top de manga larga y cuello alto adornado con más de 43.000 cristales y una falda larga de seda. Un diseño con el que presumía de figura, esculpida con su afición al deporte y al baile. Un atrevido diseño de dos piezas en color naranja. “Lauren es también es del Bronx”, decía la cantante. “Le agradezco a él y todos los diseñadores que vistieron mi silueta curvilínea, sobre todo en aquellos años marcados por las supermodelos. Oscar de la Renta, Versace, Gucci y otros muchos me permitieron entrar en su mundo y lucir sus diseños. ¡Me sentía como un niño en una tienda de golosinas!”. Destaca el momento en el que cambiaron tanto la sociedad como la moda y las curvas empezaron a aceptarse para ampliar el concepto de belleza. “Siempre quise combinar el estilo de la calle con la alta costura y por eso agradezco a todos ellos que se dieran cuenta de qu era necesario cambiar de registro estético”.
En el evento coincidió con estrellas como el modisto Michael Kors y las modelos Bella y Gigi Hadid, vestida por Virgil Abloh, uno de los más influyentes del momento. El veterano Bob Mackie ha sido otro de los galardonados en la gala con el Premio Geofrey Beene a toda una carrera. Es una leyenda de la moda, como reconocía el modisto Zac Posen. “Es uno de nuestros más grandes creadores. Hizo que las mujeres se vieran fabulosas y ha vestido a las estrellas más icónicas”.
El premio al mejor diseñador de moda femenina ha sido par Brandon Maxwell, catapultado a la fama por sus laureadas colaboraciones con Lady Gaga y por vestir a mujeres como Michelle Obama, Meghan Markle o Nicole Kidman, entre otras. “Estoy muy orgulloso de formar parte de esta industria en la que cada día trabajamos para que las mujeres se sientan bien y sean felices. Trabajé diez años como estilista antes de ser diseñador y ahora sé que esta noche se han puesto un traje y se abrazan felices pero los otros 364 días del año trabajan muy duro para pagar las facturas de la luz y hacer que la moda sea una realidad y no una fantasía”.
El ganador en el apartado de moda masculina ha sido el genial Rick Owens, un verso suelto de las pasarelas, que se ha impuesto a Abloh y Thom Browne. Las hermanas Olsen, directoras creativas de The Row, ganaron en el apartado de complementos y Emily Adams Bode se impuso como mejor diseñadora emergente. La lista de galardonados con los llamados 'Oscar de la Moda' la completan mujeres tan relevantes como la editora de moda Carine Roitfeld, Premio a los Fundadores, y Sarah Burton (directora creativa de Alexander McQueen) que tuvo el Premio Internacional Valentino Garavano y Giancarlo Giammetti.
La noche permitió ver el relevo en la cúpula del CFDA. Diane von Furstenberg ha estado trece años en el cargo y ahora lo deja en manos de Tom Ford que ya anunciado que tiene como objetivo mejorar la calidad de la moda estadounidense para vuelva a conquistar su poderío a través de la excelencia. Ford será el undécimo diseñador en ocupar este cargo que también ostentaron Herman, Sydney Wragge, Norman Norell, Oscar de la Renta, Herbert Kasper, Bill Blass, Mary McFadden, Perry Ellis y Carolyne Roehm.
Ford anunció a mediados de mayo que la Semana de la Moda de Nueva York, que no atraviesa su mejor momento, acorta su calendario en la próxima edición y durará tan solo cinco días. La cita será del 6 al 11 de septiembre. "Son cambios necesarios para globalizar esta pasarela", dijo el modisto de Texas nada más ser nombrado presidente de CFDA.
La New York Fashion Week quiere recuperar su poder e influencia y Ford cree que el primer paso es 'limpiar' el calendario. Para él es mejor la calidad que el número de participantes. "Solo hay una opción. O cambiamos la programación para tratar de revitalizarla para que sea más competitiva o se quedará como una cita irrelevante", dijo en aquella entrevista. De nuevo, menos es más.
Ford alabó a la cantante que acaba de festejar el 20º aniversario de su disto 'On the 6'. Ford y López son amigos desde hace años y la ha vestido en ocasiones relevantes, como la alfombra roja de los Oscar de 2019 en la que sorprendió con un vestido de espejos. Jennifer López sucede en el trono de los iconos de moda a mujeres tan espectaculares como Naomi Campbell, Rihanna o Beyoncé.