El líder supremo iraní, Alí Jamenei, ha dado luz verde al acuerdo sobre seguridad y desarrollo nuclear firmado en julio en Viena con las potencias mundiales, según informa AFP. Es el último capítulo de una larga cronología de negociaciones.
El acuerdo, firmado con el Grupo 5+1, pone fin a 13 años de litigio sobre el programa nuclear de la República Islámica, que defiende su carácter pacífico frente a las sospechas internacionales de que tiene fines militares.
Jamenei ha ordenado la implementación del acuerdo, pero supeditado a condiciones, según anuncia su web oficial este miércoles. En una carta al presidente Rohani, el líder supremo exige que tanto Estados Unidos como la Unión Europea deberán anunciar públicamente la supresión de las sanciones contra Irán. El líder iraní también alerta de que, estructuralmente, el acuerdo flaquea en varios puntos, así como advierte que Irán detendrá la aplicación del acuerdo si se impusiera de nuevo alguna sanción al país.
Las sanciones internacionales mencionadas en el documento serán las que no estén relacionadas con la violación de derechos humanos. No obstante, Irán ha aceptado una suerte de ‘mecanismo automático’ por el cual estas sanciones se podrán volver a imponer a los 65 días de constatarse de que Irán viola el pacto.
Términos del acuerdo firmado en julio
Conforme a los términos del acuerdo firmado en julio, Irán se comprometería a eliminar dos tercios de centrifugadoras instaladas y, según ha manifestado el propio Obama, deshacerse del 98% de su uranio. Además, permitirá el acceso de inspectores de la ONU a instalaciones militares, pero podrá poner objeciones. Además, según Reuters, el acuerdo contempla que se mantendrá durante 5 años el embargo para armas convencionales y durante 8 el de misiles balísticos.
Sólo cuando el OIEA emita su veredicto sobre el cumplimiento íntegro de los primeros pasos del acuerdo se podrán levantar las primeras medidas punitivas, impuestas en su momento por la ONU, Estados Unidos y la Unión Europea (UE). Se estima que el OIEA entregue su informe a finales de año. El director del OIEA ha señalado que el objetivo es presentar una evaluación definitiva sobre el programa atómico iraní a partir de la 15 de diciembre de este año, incluida una investigación sobre sus actividades pasadas.
La comunidad internacional buscaba desde hace años un acuerdo para impedir que Irán acceda a la bomba atómica a cambio del levantamiento de las sanciones económicas que han estrangulado la economía del país. Los detalles políticos del acuerdo se conocerán a lo largo de este martes, según ha dicho Mogherini después, tras la lectura del documento general del acuerdo.
El acceso a la base de Parchin
El pasado 21 de septiembre, el director general del OIEA (Organismo Internacional para la Energía Atómica), Yukiya Amano, confirmó que técnicos iraníes tomaron pruebas medioambientales en nombre de la agencia nuclear de la ONU en la base de Parchin, al sur de Teherán, donde existen sospechas sobre el posible uso militar del programa nuclear iraní.
Las anteriores negativas por parte de Irán a la inspección de estas instalaciones fueron uno de los principales obstáculos en las negociaciones con la comunidad internacional dirigidas al control de los avances de Teherán en el desarrollo de armamento nuclear y a la suspensión de las sanciones impuestas al país por este motivo.
A partir de este momento, el informe de la OIEA sobre la obtención de pruebas en este polémico lugar asienta la apertura del entendimiento. "Se ha conseguido significante progreso en la implementación de la hoja de ruta", afirmó Amano a la prensa en Viena tras su visita a las instalaciones en referencia al acuerdo firmado el 14 de julio para esclarecer dudas sobre el programa nuclear iraní.