Un total de 16 presos de ETA (10 enfermos y seis mayores de 70 años) han empezado desde este pasado lunes a pedir a Instituciones Penitenciarias su acercamiento a cárceles vascas, según han informado a Europa Press fuentes cercanas a este colectivo, una petición que no le consta al ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, pero sobre la que garantiza el cumplimiento de la ley, que exige para este acercamiento que los presos reconozcan el daño causado y se desvinculen de la banda terrorista.
Los encarcelados, según las citadas fuentes, reclaman su pase a la prisión alavesa de Zaballa, mientras los que están en prisiones de Francia piden ser llevados a cárceles cercanas al País Vasco francés.
Entre los presos de la banda terrorista enfermos y en prisiones de fuera del territorio vasco se encuentran: Josetxo Arizkuren Ruiz (preso en A Coruña), Inmaculada Berriozabal Bernas (Pontevedra), Gari Arruarte Santa Cruz (Almería), Iñaki Etxeberria Martin (Salamanca), José Miguel Etxeandia Meabe (Salamanca), Ibon Fernández Iradi (Lannemezan, Francia) y Ventura Tomé Queiruga (Murcia). Sin embargo, fuentes de Instituciones Penitenciarias afirman no haber recibido ninguna solicitud hasta el momento.
De producirse, sería la materialización de lo recogido en el comunicado hecho público el pasado 28 de diciembre por el colectivo de presos de ETA (EPPK) en el que reconocía el "sufrimiento y daño multilateral generados" como consecuencia del conflicto y se mostraba dispuesto a estudiar la posibilidad de que el proceso que culmine "con la vuelta a casa" se efectúe "de manera escalonada, mediante compromisos individuales y en un tiempo prudencial".
Fernández Díaz: "Se cumplirá la legalidad"
El ministro del Interior, ante la posibilidad de que se confirmen esas peticiones, ha subrayado que el Gobierno va a aplicar la ley, que ha dicho que es "muy clara" al respecto.
Fernández Díaz ha explicado que la legislación establece que es facultad de la administración penitenciaria determinar, dadas las circunstancias que concurren en cada interno, en qué centro penitenciario cumple su condena.
Además, en el caso de presos terroristas, ha recordado que se exige que reconozcan el daño causado y se desvinculen de la organización terrorista.
"Como es lógico, se cumplirá la legalidad, como siempre se ha hecho en casos anteriores, en el presente y en el futuro", ha añadido el titular de Interior, quien ha recordado que ya hubo peticiones de estas características en 1996 y 2012.
Urkullu recela de una "escenificación" electoral
Por su parte, el lehendakari vasco, Iñigo Urkullu, ha expresado su temor de que esta solicitud de medidas penitenciarias individualizadas de presos de ETA pueda responder a una "escenificación" con "objetivos electorales".
"Siempre ha habido tentaciones" de utilizar estas cuestiones como arma electoral, ha recordado en una entrevista a Euskadi Irratia ante la cercanía de las elecciones europeas del 25 de mayo, una fecha que está "en el medio" del calendario de solicitudes anunciadas por el colectivo de presos de ETA.
Tras asegurar que la decisión de los reclusos terroristas "de alguna manera ya estaba anunciada", Urkullu ha dicho que no conoce "textualmente" dichas solicitudes, al tiempo que ha asegurado que la clave de este proceso es que los miembros de ETA expresen su arrepentimiento mediante el "reconocimiento del daño injusto causado".
En su opinión, lo que los presos están haciendo es "un camino de vuelta" de una vía que adoptaron en su día, por lo que "tienen que decir más claro qué han hecho y qué quieren".
El parlamentario de EH Bildu y secretario general de EA, Pello Urizar, ha reclamado por su parte al Gobierno que estudie las peticiones "sin lecturas políticas".
En respuesta a las declaraciones de Urkullu, ha replicado que el acercamiento "es lo que se pedía en 2010, 2011, 2012, 2013 y 2014 y va más allá de una mera escenificación. Hay un compromiso claro y se dan pasos, pero algunos todavía tienen que dar el primero", ha dicho en referencia a los Gobiernos de España y Francia.