El Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) ha reconocido esta noche en un comunicado el fracaso de su más reciente misión especial a Irán, la segunda en menos de un mes. Los inspectores de la ONU no han podido avanzar en los puntos pendientes de la investigación sobre el controvertido programa nuclear iraní.
"Un equipo de alto nivel de expertos del OIEA está volviendo de Irán después de dos días de debates con funcionarios iraníes, mantenidas el 20 y 21 de febrero. Estas reuniones siguieron a las discusiones previas del 29 al 31 de enero", agrega la agencia nuclear de la ONU.
“Es decepcionante que Irán no nos haya dejado visitar la central nuclear de Parchin“
Los inspectores del OIEA no han recibido el permiso de visitar la polémica instalación militar de Parchin, ubicada dentro de una base militar, ni han esclarecido las posibles dimensiones militares del programa atómico de la República Islámica, indica la nota emitida en Viena, sede del OIEA. "Irán no dio su permiso para hacer esta visita", reconoce el organismo en el comunicado.
El comunicado cita las palabras del director general del OIEA, Yukiya Amano, asegurando que "es decepcionante que Irán no haya aceptado nuestra petición de visitar Parchin durante la primera o segunda visita (a la República Islámica)".
"Nosotros negociamos con espíritu constructivo, pero no se alcanzó acuerdo alguno", concluye el japonés, quien tiene previsto emitir esta misma semana su más reciente informe sobre la investigación del programa nuclear de Irán.
En su declaración, el OIEA no da información sobre su siguiente paso, que debatirá la Junta el próximo 5 de marzo. El embajador del organismo nuclear, Ali Asghar Soltanieh, presente en las discusiones de Teheran, ha comentado que "estas negociaciones continuarán en el futuro." No obstante, la portavoz del OIEA, Gill Tudor ha indicado a Efe que "por ahora, no hay acuerdo sobre más conversaciones (con Irán)".
Tras la marcha de los inspectores, el líder supremo iraní, ayatolá Alí Jamenei, ha declarado que nada podrá detener el programa nuclear del país. "Con la ayuda de Dios, y a pesar de la propaganda, el curso nuclear de Irán continuará de manera firme y seria. Las presiones, las sanciones y los asesinatos no darán fruto. Ningún obstáculo puede para el trabanjo nuclear de Irán", ha subrayado. Jamenei ha reiterado, no obstante, que su país no pretende construir un arma atómica.
Tensión en aumento
Por su parte, el investigador del Wilson Center de Washington (EE.UU.), Michael Adler, advierte de que este fracaso "impulsará las preocupaciones de que Irán no está cooperando con la comunidad internacional, lo que se unirá a la ya existente tensión". Además, su falta de cooperación "contradice la versión de Irán de que no tiene nada que ocultar y que quiere cooperar con el OIEA, sobre todo por que fue Teherán la que invitó al OIEA a estas visitas", concluye Adler.
Además esta misma noche el ministro de Petróleo de Teherán, Rostam Ghasemi, ha asegurado que Irán podría congelar sus exportaciones petroleras a más países europeos en caso de que "sigan las prácticas hostiles contra Irán", en referencia a las sanciones impuestas por la Unión Europea el pasado 23 de enero.
"Tras el anuncio de congelación de las exportaciones del crudo (iraní) al Reino Unido y Francia, el precio de petróleo subió más de dos dólares. Si los demás países europeos optan por una política hostil contra Teherán, igualmente suspenderemos las exportaciones petroleras a ellos", ha apuntado Ghasemi.
"Los países europeos iniciaron las sanciones y (ahora) han de enfrentarse a las consecuencias de sus políticas", ha añadido Ghasemi, según el canal de televisión iraní, Hispan TV.
Alerta de la OIEA
Estas sanciones, tanto de la UE como de Estados Unidos, pretenden disuadir a Irán de la consecución de su programa nuclear. En el último informe de la OIEA publicado en noviembre pasado y considerado como el más duro con Irán después de nueve años de investigaciones, Yukiya Amano dice que dispone de informaciones "creíbles", procedentes de los servicios secretos de una decena de países, que indican que Teherán está trabajando en un programa nuclear militar.
Por su parte, Irán se niega hablar desde hace casi cuatro años sobre estas alegaciones, que considera "mentiras" y "falsificaciones".
En un intento por superar este punto muerto en la investigación, el OIEA envió en enero y en febrero dos misiones especiales a Irán, lideradas por Naeckerts y el jefe de gabinete de Amano, el argentino Rafael Grossi.
El fracaso de la misión del OIEA se produce en un momento de creciente tensión en la disputa sobre el programa nuclear iraní y las amenazas directas e indirectas de Israel sobre un posible ataque aéreo contra las instalaciones atómicas de ese país.