Con toda la seriedad del mundo, el secretario permanente de la Academia sueca, Peter Englund, anunciaba el Premio Nobel de Literatura 2010 cargado de ironía en sueco, inglés y español poco después de la una de la tarde.
Después de años entre los favoritos, el escritor peruano Mario Vargas Llosa ha sido galardonado cuando casi nadie daba una corona sueca por él.
De hecho, Vargas Llosa pensaba que "era una broma" cuando la Academia Sueca le informó, "ocho minutos antes del anuncio" oficial, según ha señalado el hijo del escritor peruano, Álvaro Vargas Llosa.
Premio Nobel de Literatura
El Comité Nobel ha premiado al autor de La ciudad y los perros "por su cartografía de las estructuras del poder y sus mordaces imágenes sobre la resistencia, la revuelta y la derrota individual".
Vargas Llosa ha reconocido, en declaraciones al Telediario de TVE, que "en gran parte debe este premio a España", porque es aquí donde ha popularizado su obra y se ha convertido en un escritor popular. El escritor ha hecho estas primeras declaraciones en Nueva York, donde da clases en la Universidad de Princeton, tras conocer la noticia de madrugada.
“Vargas Llosa es el decimoprimer autor en lengua hispana que gana este Nobel“
Desde 1990, cuando lo recibió el poeta Octavio Paz, ningún autor que escribiese en español había recibido el Premio Nobel. Vargas Llosa es el decimoprimero de los autores de lengua hispana en alzarse con tal distinción.
Jorge Mario Pedro Vargas Llosa (Arequipa, Perú, 1936) es uno de los representantes más destacados de la literatura del boom de la narrativa hispanoamericana de los años 60 y 70 del siglo XX y un destacado pensador político y crítico literario.
El autor de La casa verde (1965), Pantaleón y las visitadoras (1973) y La tía Julia y el escribidor (1977) recibirá 10 millones de coronas suecas (un millón de euros) por el premio. Su próxima novela, El sueño del celta, se publicará en noviembre.
El novelista peruano, que cuenta también con la nacionalidad española, recibió el Premio Cervantes en 1994 y el Premio Príncipe de Asturias en 1986.
Hijo único, Vargas Llosa vivió con su madre -separada de su padre cuando todavía estaba embarazada- en Arequipa, localidad del sur del Perú hasta su mudanza a Cochabamba, cuando su abuelo materno fue nombrado cónsul honorario en Bolivia.
En 1946 marchó a Lima, donde conoció a su progenitor, quien reanudó la relación sentimental con su madre. A la edad de 14 años ingresó, por imposición paterna, en el Colegio Militar Leoncio Prado de Lima. Sus experiencias en ese centro, un escenario de brutalidad que le marcó profundamente, inspirarían la novela La ciudad y los perros, que le dio la fama.
Paso de Vargas Llosa por Madrid y París
Vargas Llosa se matriculó en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (Lima). Estudió derecho y literatura, al tiempo de adentrarse en el mundo de la política del brazo del entonces clandestino Partido Comunista.
En 1955 se casó con su tía política Julia Urquidi, que le sacaba diez años de edad: la oposición familiar a este enlace, inspirador de la novela La tía Julia y el escribidor (1977), le obligó a realizar trabajos de muy diversa índole para sostenerse económicamente.
En 1957 publicó su primer relato: "El desafío". Un año después, tras su graduación, una beca le condujo a Madrid para cursar estudios de doctorado en la Universidad Complutense. Al terminar el periodo de becario en España, marchó a la vecina Francia y se estableció en París con su esposa-tía Julia. En 1964 se divorció; un año más tarde, contrajo matrimonio con su prima Patricia Llosa.
A finales de los años 60 se consolidó como escritor con Conversación en la catedral (1969), que había estado precedida por Los jefes (1959) -colección de relatos entre los que se cuenta el ya indicado "El desafío"-, La ciudad y los perros (1963) -Premio Biblioteca Breve, que representó su despegue literario-, La casa verde (1965) -Premio Rómulo Gallegos- y Los cachorros (1967). El propio Vargas considera a Conversación en la catedral como su mejor obra.
Del comunismo al liberalismo
Su progresivo distanciamiento del marxismo lo llevó a renegar públicamente de esta ideología en la década de 1980, para terminar abrazando el pensamiento liberal.
Activo opositor a la política nacionalizadora del presidente izquierdista peruano Alan García, en 1990 se postuló él mismo como candidato a la presidencia de la república al frente de una coalición de centro-derecha. En la segunda vuelta de los comicios fue derrotado contra todo pronóstico por el populista Alberto Fujimori.
Tras su derrota electoral se estableció en Madrid. En 1993 obtuvo la nacionalidad española, sin por ello renunciar a la peruana. Ingresó en la Real Academia Española de la Lengua en 1994. En los últimos lustros también ha pasado largas temporadas en Londres.
En la vasta producción literaria de Vargas Llosa hay que destacar, aparte de las obras ya mencionadas, otros trabajos como Pantaleón y las visitadoras (1973) -llevada al cine por él mismo en 1975 y por Francisco J. Lombardi en 1999-, La guerra del fin del mundo (1981), ¿Quién mató a Palomino Molero? (1986), Lituma en los Andes (1993) -galardonada con el Premio Planeta-, La fiesta del chivo (2000) - llevada al cine en 2006 por su primo Luis Llosa-, El paraíso en la otra esquina (2003) y Travesuras de la niña mala (2006).
Ensayista, articulista y crítico literario
Además de la narrativa, el autor hispano-peruano nunca ha descuidado el ejercicio del ensayo (como Desafíos a la libertad, 1994), el género periodístico (cabe señalar sus artículos en prensa y su serie de reportajes sobre Irak tras el derrocamiento de Sadam Hussein) y la crítica literaria.
Hay que reseñar sus trabajos acerca de la obra de escritores como Gabriel García Márquez (García Márquez: historia de un deicidio, 1971), Gustave Flaubert (La orgía perpetua: Flaubert y 'Madame Bovary', 1975), José María Arguedas (La utopía arcaica. José María Arguedas y las ficciones del indigenismo, 1996), Víctor Hugo (La tentación de lo imposible, 2004) y, más recientemente, Juan Carlos Onetti (El viaje a la ficción, 2008).
Por otro lado están sus incursiones en el mundo del teatro, con piezas como La señorita de Tacna (1981) o El loco de los balcones (1993).
Vargas Llosa, que era uno desde hace años uno de los escritores favoritos a hacerse con el Nobel, ya atesora en su currículum los prestigiosos premios Príncipe de Asturias de las Letras (1986) y Cervantes (1994).