Poco a poco van saliendo a la luz nuevos detalles sobre cómo se produjo el apresamiento de Radovan Karadzic, uno de los criminales de guerra más buscados durante la última guerra. Ahora ya se sabe que fueron más de 50 agentes de los servicios secretos serbios los que siguieron la pista del genocida a través de una llamada de teléfono anónima y que dos de ellos se hicieron pasar por pacientes para conseguir pruebas de ADN del genocida.
Según publica la prensa serbia, los agentes siguieron día y noche durante varios meses al doctor naturista Dragan Dabic, identidad bajo la que se escondía el antiguo líder ultra nacionalista serbio.
"Establecimos contacto con él en una conferencia celebrada en Belgrado entre el 23 y el 25 de mayo", ha aclarado una fuente policial que ha preferido mantener el anonimato y que ha filtrado que la mayoría de los agentes que siguieron de cerca Karadzic no sabía de quién se trataba.
La principal dificultad de la investigación se ha centrado en verificar la identidad del Dr. Dabic y comprobar si efectivamente se trataba del líder político serbio que se encontraba en paradero desconocido desde 1996.
"Dos de nuestros agentes se presentaron en su consulta haciéndose pasar por una pareja con problemas de infertilidad y consiguieron concertar una cita para hacerse con un cabello del Dr. Dabic y someterlo a una examen de ADN", ha afirmado la misma fuente policial.
Se desmiente que viajara a Viena
Ahora también se ha sabido que Petar Glumac no era la identidad usada por el presunto criminal de guerra serbobosnio Radovan Karadzic en sus supuestos viajes a Viena, sino un curandero con pasaporte croata residente en la Voivodina serbia muy parecido al detenido, según informa la prensa austríaca.
El propio Glumac confirmó a la agencia de noticias serbia Tanjug y al diario austríaco Österreich que bajo ese nombre no se escondía Karadzic.
El curandero, de 78 años, tiene un gran parecido con la identidad creada por Karadzic para escaparse de la justicia, también con una barba blanca, pelo encanecido recogido con una coleta y gafas de pasta de gran tamaño.
Glumac explicó al diario "Österreich" que "no entiende la razón por la que Karadzic tomó mi identidad", en referencia al parecido entre ambos.
También comprendió que le pudieran haber confundido con el detenido ya que "su aspecto es parecido al mío", pero recalcó que no tiene nada que ver con Karadzic.
El pasado viernes el Ministerio del Interior de Austria confirmó, -aunque poco después desmintió- que el presunto criminal de guerra serbobosnio Radovan Karadzic, detenido en Belgrado, estuvo en Viena en mayo del año pasado, donde ofreció sus servicios de curandero para mujeres con problemas de fertilidad.