Desde el primer cocinado de exteriores de MasterChef 12 vimos como Celeste busca la excelencia en cada prueba y que es capaz de tomar las riendas del equipo si hace falta para conseguir terminar el trabajo. En esta ocasión, tuvo una nueva oportunidad de demostrar su liderazgo, esta vez como capitana. Y lo dio todo, pero las inseguridades volvieron a tener consecuencias. Eso sí, nadie mejor que ella sabe que lo tiene todo para transformar esas dudas en experiencia para no dejar de crecer.
Después de un cocinado difícil donde hubo incluso algún cambio de integrante -Ángela por Jose- Celeste llegó a la valoración con la sensación de haberse vaciado pero sin resultado positivo. "¿Cómo se ha visto la capitana?", preguntó Jordi Cruz. "Yo siempre me veo mal", contestó Celeste antes de explicarse: "Jolin...siempre me falta seguridad. Me pongo tanta presión encima y quiero hacerlo tan bien que cuando veo que ya vamos tarde empiezo a decir aggghh qué rabia, porque quiero hacerlo bien y llegar".
"Necesito creer en mí"
Jordi Cruz sacó su lado más empático con Celeste y le preguntó qué necesitaba para saber que vale. La aspirante tuvo clara su respuesta: "Creer en mí, pero es un trabajo que tengo que hacer yo. Aquí rodeada de tanto magnate de la cocina me cuesta creer en mí". Tenemos claro que Celeste superará sus inseguridades, porque tiene herramientas para hacerlo. Tal y como ella misma dice es "luchadora, trabajadora, currante y autodidacta".
Desde luego, aunque estar rodeada de estrellas de la cocina pueda asustar en un principio, Celeste sabe que está en el lugar preciso para crecer gastronómicamente y convertir sus dudas en motivación para crecer culinariamente. ¡No tenemos dudas de que lo conseguirá!